Sinopsis:

Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

martes, 25 de agosto de 2009

Miguel por Eduardo Vicente

(Retrato al óleo de Miguel Hernández, pintado por Eduardo Vicente, posiblemente en la cárcel).

Biografía del pintor Eduardo Vicente.
Madrid. (1909-1968)

En los años grises y sombríos de la postguerra española brillaba con luz tenue y delicados matices la obra pictorica de Eduardo Vicente. Nacido en Madrid, en el año 1909, al acabarse la contienda tenia exactamente treinta años. En plena juventud y con entera posesión de sus medios expresivos, contaba ya con una intensa experiencia artlstica, adquirida al lado de su hermano Esteban, tambien pintor, cuya vida y obra posterior estaría ligada a Norteamerica.

Eduardo Vicente, que con anterioridad a la Guerra Civil había colaborado, como copista, con el Museo Ambulante de Misiones Pedagogicas, que había sido creado para mostrar por los pueblos y las aldeas de la Península copias facsímiles de las obras mas representativas del arte español ,el mismo se encargo de hacer las reproducciones de las Pinturas Negras de Goya ya que había vivido el ambiente intelectual de las vanguardias históricas en los años veinte y treinta, pertenecía al lado liberal de las dos Españas. Combatiente del ejercito republicano, tiempo en el que conocerá a Miguel Hernández, al triunfar los "nacionales" era un perdedor, un vencido. Para poder sobrevivir se vio obligado entonces a realizar trabajos de pintura industrial de brocha gorda. Pero muy pronto su buena estrella y circunstancias favorables hicieron que, pese al exilio interior, pudiese salir adelante. Su amistad con Jose María de Cossío, que le introdujo en la Editorial Espasa-Calpe y sobre todo el descubrimiento de su pintura por Don Eugenio D'Ors, que le puso en contacto con el galerista Aurelio Biosca y en 1944 le encargo el cartel para el Salon de los Once en la academia Breve de Crítica de arte, hicieron que Eduardo Vicente volviese a empezar su interrumpida carrera creadora.



A partir de entonces se inicio su camino ascendente hacia la fama hasta lograr el cenit del exito al cual podía entonces aspirar un artista. Amigo de escritores, de poetas, libreros e intelectuales, asiduo de las tertulias del cafe Gijon, Eduardo Vicente se convirtio en un pintor admirado y elogiado por las personas mas cultas de la epoca. En el panorama de la pintura madrileña de la postguerra -Manuel Sánchez Camargo, en 1954 lo incluía en su libro Pintura española contemporanea. En la escuela de Madrid ocupa un singular puesto. Junto con Benjamín Palencia, Rafael Zabaleta, Ortega Muñoz, Pancho Cossío y Díaz Caneja, su nombre figura hoy en el primer plano artístico del momento. Nombrado en 1951 miembro del Jurado de la Primera Bienal Hispanoamericana del Arte e invitado a la Bienal de Venecia, su arte se alineaba dentro de las tendencias consideradas entonces renovadoras de la plastica española. Ahora bien, a partir de 1957, con la aparicion de "El Paso", del Informalismo, del "Arte Otro", el Pop y demas movimientos de vanguardia, Eduardo Vicente pasó a formar parte de un pasado que para los artistas jovenes estaba totalmente obsoleto. Con su muerte relativamente temprana -todavla no había cumplido los sesenta años desaparecio discreta y silenciosamente de la escena. En la primavera del año 1968, cuando en Madrid se celebran las Fiestas de San Isidro y cuando iba a abrirse una exposicion de su obra en la Galeria Quixote, fallecio repentina e inesperadamente. Sus amigos, inquietos al no verle durante varios días, descubrieron su cuerpo sin vida acurrucado en un rincon de su estudio como si la muerte le hubiese sorprendido en un primer sueño.Era el 9 de Mayo de 1968 y su cuerpo no fué descubierto hasta 3 días más tarde.

Logotipo año hernandiano

A mí ni me gusta ni me deja de gustar el logotopo del AÑO HERNANDIANO que ha elegido el Ayuntamiento de Orihuela, lo que sí se tenía que haber hecho era un concurso público, para tener más opciones, como se hace con los carteles de fiestas o Semana Santa, y haberlo expuesto al público en la Sala san Juan de Dios de Orihuela. Un consurso público y limpio. Esto de adjudicar un logotipo a una agencia de publicidad (18.000 €) a dedo, a espaldas de la oposición y de los oriolanos, es sospechoso, y además ha ido en detrimento de los artistas oriolanos, alicantinos, nacionales o internacionales, por eso el actual logotipo no puede guastar a nadie.
Aquí os adjunto proyecto de NUEVO logotipo para el I Centenario del nacimiento de Miguel Hernández, 2010, donde he usado la "h" de Hernández y de Orihuela como eje vertebrador, como espina bífida porque no es posible uno sin el otro. Este logotipo es sólo un proyecto, se puede seguir trabajando en él. Lo podéis copiar libremente. Yo se lo hubiera dado gratis al Ayuntamietno, pero lo importante, son los gastos, las facturas, las adjudicaciones, después vendrán otras "cosas". Pues ha habido también gastos de vallas publicitarias (24.000 €) e imprentas.

lunes, 24 de agosto de 2009

Montaje Teatral sobre la vida y la obra de Miguel Hernández (1992)


Montaje Teatral sobre la vida y la obra de Miguel Hernández, estrenado en 1992 en el Centro Cultural de la Villa de Madrid. Desde entonces ha sido presentado por casi toda España y parte de América. Concebido como homenaje al gran poeta de Orihuela, fallecido en la prisión de Alicante en 1942, cuenta la breve vida de Miguel Hernández, declamando e interpretando una precisa selección de poemas y fragmentos teatrales, mediante un montaje audiovisual en el que se narran puntos culminantes de su bibliografia y de la historia del país en ese momento. De la actriz, la crítica ha dicho que pone su alma sobre el escenario, en una soberbia interpretación. Con esta misma obra se realizó una gira de gran éxito en América y representó al teatro español en el Festival Hispánico de Montreal.
HOMENAJE A MIGUEL HERNANDEZ EN HISPANOAMERICA: “La compañía de MARY PAZ PONDAL, acaba de regresar de una gira por Hispanoamérica donde ha realizado 30 representaciones de su espectáculo “COMPAÑERO DEL ALMA,…¡COMPAÑERO!” como homenaje al poeta español Miguel Hernández. Ha recorrido la República Dominicana donde se representó en la Casa de España con la asistencia de D. Manuel Luna, Embajador de España en aquel País y en el Teatro Nacional de Santo Domingo, donde se dieron dos representaciones, asistiendo al estreno el Profesor D. Juan Bosch, ex-presidente de la República, constituyendo un grandioso y emotivo éxito. De allí se trasladó a Puerto Rico, donde se representó en el Foro “Inés de Castro” de la Universidad Nacional de Puerto Rico, con asistencia del Rector y de todas las autoridades universitarias. Fue un homenaje de aquella Universidad a la figura de nuestro poeta, lleno de emoción y de fervor. En México, tuvo lugar la estancia más larga y se dio a conocer en la Universidad Autónoma Nacional de Querétaro durante dos días y con asistencia de poetas y escritores del Estado. El Foro “Sor Juana Inés de la Cruz” de la Universidad Autónoma Nacional de México (U.N.A.M.), acogió otras dos representaciones, constituyendo todo un éxito cultural y académico, donde el aforo escaso de la sala y nuestros compromisos con otras ciudades, impidió repetirlo para el gran número de personas que solicitaron entradas. En el Teatro “José Peón Contreras” del Gobierno del Estado de Yucatán en Mérida: extraordinario. En el Teatro Xicohténcatl de Tlaxcala, gracias al Consejo Estatal de Cultura, se pudo también homenajear al poeta con lleno apoteósico. Inenarrable fué la acogida por parte del Rectorado y el público en la Universidad de las Américas de Puebla. Siempre lo recordaremos. También en el Centro Asturiano de México D.F. Y en la Universidad de Guadalajara, donde Mary Paz Pondal participó en un coloquio-homenaje sobre Miguel Hernández, con asistencia del Cónsul General de España en Guadalajara, D. Jesús Dilla y de las Autoridades Universitarias. Luego en el Teatro Nacional “Fernando Calderón” de Zacatecas, y en el Teatro Monterrey de la ciudad del mismo nombre, donde la actriz tuvo que parar los aplausos y agradecer al público de Monterrey y de todo México, al ser su última actuación en el País, la acogida al espectáculo, a ella y a Miguel Hernández.” En Venezuela, invitados por la Universidad de los Andes en la ciudad de Mérida, actuamos en el Teatro Cesar Rengifo de la Universidad durante tres días, donde fuimos agasajados por el Cónsul de España en Mérida, autoridades universitarias y el público, con su masiva asistencia.
Fueron cuarenta y dos días plenos de éxitos, de recuerdos y de satisfacción por haber llevado a aquellas tierras y gentes la palabra de uno de los más grandes poetas de España. La gira estuvo patrocinada por la Dirección General del Instituto Nacional de las Artes Escénicas y de la Música, La Dirección General de Relaciones Culturales y Científicas del Ministerio de Asuntos Exteriores y las respectivas Embajadas de España en los diferentes países recorridos.

Las manos cortadas




(Ilustración de Miguel Prieto)
Siempre me impresionó esta ilustración del manchego Miguel Prieto Anguita del poemas "Las Manos" de Miguel Hernández, donde vemos a una mujer que lleva en cada una de sus manos, unas manos cortadas. Imagen que corresponde a la última de las estrofas de este tremendo poema.
Miguel Prieto (pintor, natural de Almodóvar del Campo), formó parte de la delegación española de la República en el V Festival de Teatro en Moscú, 1937


"Las manos"


Miguel Hernández
(De Vientos del pueblo)
España, 15 de febrero de 1937.



Dos especies de manos se enfrentan en la vida,
brotan del corazón, irrumpen por los brazos,
saltan, y desembocan sobre la luz herida
a golpes, a zarpazos.

La mano es la herramienta del alma, su mensaje,
y el cuerpo tiene en ella su rama combatiente.
Alzad, moved las manos en un gran oleaje,
hombres de mi simiente.

Ante la aurora veo surgir las manos puras
de los trabajadores terrestres y marinos,
como una primavera de alegres dentaduras,
de dedos matutinos.

Endurecidamente pobladas de sudores,
retumbantes las venas desde las uñas rotas,
constelan los espacios de andamios y clamores,
relámpagos y gotas.

Conducen herrerías, azadas y telares,
muerden metales, montes, raptan hachas, encinas,
y construyen, si quieren, hasta en los mismos mares
fábricas, pueblos, minas.

Estas sonoras manos oscuras y lucientes
las reviste una piel de invencible corteza,
y son inagotables y generosas fuentes
de vida y de riqueza.

Como si con los astros el polvo peleara,
como si los planetas lucharan con gusanos,
la especie de las manos trabajadora y clara
lucha con otras manos.

Feroces y reunidas en un bando sangriento
avanzan al hundirse los cielos vespertinos
unas manos de hueso lívido y avariento,
paisaje de asesinos.

No han sonado: no cantan. Sus dedos vagan roncos,
mudamente aletean, se ciernen, se propagan.
Ni tejieron la pana, ni mecieron los troncos,
y blandas de ocio vagan.

Empuñan crucifijos y acaparan tesoros
que a nadie corresponden sino a quien los labora,
y sus mudos crepúsculos absorben los sonoros
caudales de la aurora.

Orgullo de puñales, arma de bombardeos
con un cáliz, un crimen y un muerto en cada uña:
ejecutoras pálidas de los negros deseos
que la avaricia empuña.

¿Quién lavará estas manos fangosas que se extienden
al agua y la deshonran, enrojecen y estragan?
Nadie lavará manos que en el puñal se encienden
y en el amor se apagan.

Las laboriosas manos de los trabajadores
caerán sobre vosotras con dientes y cuchillas.
Y las verán cortadas tantos explotadores
en sus mismas rodillas.

Amores con Maruja Mallo


AMORES CON MARUJA MALLO (Miguel Hernández y la sexualidad)

Decíamos el otro día que en el verano del 35 disfrutó intensamente Miguel la libertad sexual que nunca se había permitido. Compañera de aventuras eróticas fue Maruja Mallo. Y el poeta, viviendo intensamente una retrasada adolescencia, había anunciado ya a su chica de Orihuela, con aire autosuficiente, que las cosas estaban cambiando mucho y que era mejor que se dejasen. Medio año estuvo rota la relación. Refiere Camilo José Cela, compañero de tertulia de Hernández:

“Con algunos amigos literarios me iba a bañar los domingos a La Poveda, en el río Henares, cuando venía el buen tiempo; salíamos de la estación del Niño Jesús y al pasar por los viñedos de Coslada nos bajábamos del tren, robábamos unos racimos de uva, corríamos un poco y volvíamos a bordo de un brinco ayudados por los viajeros que iban en la última plataforma: al llegar a San Fernando el tren cambiaba de máquina, le ponían una más pequeña y que pesaba menos porque el puente no brindaba muchas garantías de seguridad.

Fuente: Nido de Poesía

Miguel Hernández


Por Alfonso Ramírez de Arellano (Psicólogo)

Cuando Miguel Hernández escribió: “porque donde unas cuencas vacías amanezcan ella (la libertad) pondrá dos piedras de futura mirada...” ["El Herido" en "El hombre acecha", 1939] no lo hizo de forma retórica ni pensando en un futuro remoto, lo hizo en una cárcel franquista, enfermo de tuberculosis y esperando la muerte. Una muerte que sabía inminente y que no podría ser buena habiendo pertenecido al bando de los perdedores. En su caso no se cumplía la distinción orteguiana: “Vida es una cosa, poesía es otra... No las mezclemos”. Podemos imaginar al poeta pensando en su mujer y su hijo pequeño, a los que adoraba; en la libertad que no recuperaría; en el aire y la luz de su Orihuela natal sin las cuales había enfermado sin remisión. Treinta y un años es una edad demasiado temprana para resignarse a morir y mucho más cuando se está enamorado y se es un vitalista empedernido como lo era él. Aun así Miguel fue capaz de escribir esos versos, de confiar en el futuro, no en su futuro personal, respecto al que no albergaba muchas esperanzas, en el futuro de otras generaciones, quizá la de su hijo, en el de la humanidad.

Hay algo conmovedor en las ideas de libertad y de revolución de Miguel Hernández, una dramática fe en la posibilidad de superación del género humano que trasciende la política convencional. Hay también valentía, entereza e integridad en la defensa de unos valores hasta el final. Esa cuestión es clave para entender al personaje. Los valores son un elemento de conexión entre el autor, su obra y sus ideas políticas. Lástima que la izquierda tradicional española, a la que perteneció Miguel, nunca haya sabido reivindicar los valores. La izquierda siempre se ha sentido más cómoda en el terreno de las ideas y en el de la acción, manifestando el mismo pudor para hablar de ética y moralidad que las beatas para hablar de sexo. Sin embargo el auténtico frente de batalla en el que militó el poeta fue el de las ideas encarnadas en valores personales asumidos hasta sus últimas consecuencias. Sin esa conexión la política degenera fácilmente en propaganda, adoctrinamiento y manipulación.

Josefina Manresa, su mujer, decía en una entrevista que nunca escribía en casa, que siempre lo hacía en el campo o en la sierra. Era pastor —el oficio de los dioses paganos y los héroes bíblicos, le diría en una carta Miguel a Juan Ramón—, acostumbrado a las soledades y al contacto íntimo con la naturaleza. Su poesía está plagada de imágenes animales y vegetales, pero sobre todo telúricas: metáforas de tierra, polvo y piedras; fenómenos atmosféricos; y también huesos, que son la parte más recóndita y mineral de los seres humanos.

De haber nacido junto al Misisipi no se habría encarnado en un tahúr ni en un terrateniente, habría trabajado de sol a sol y cantaría blues y espirituales negros. La estructura de su cráneo tenía algo que recuerda a esa raza. Aunque hubiera sido analfabeto resulta fácil imaginarlo inventado letrillas para acompañar las monótonas tareas del campo o para cantar por las noches en el barracón acompañado por la armónica. Habría muerto a tiros encabezando una rebelión antiesclavista, dejando tras de sí a un montón de amigos y familiares doloridos y agradecidos.

Miguel no fue un revolucionario desarraigado o desclasado como tantos otros. Miguel era pobre y era de pueblo. Con su comportamiento nos descubre el sentido auténtico de la nobleza, el que nace de la dignidad mantenida más allá del dolor y del castigo, no la que se adquiere por nacimiento junto a un cortijo y un escudo de armas. Esa nobleza es una herencia para todos los seres humanos.

Su poesía es honda a fuerza de sencillez y de honestidad. Miguel es capaz de llegar al alma de las cosas elementales: una piedra, una rama, un latido y ofrecérnoslas a sus lectores. Hay algo zen en su comunión con la naturaleza. No trata de sublimarla, sino de profundizar en ella que es como hacerlo sobre sí mismo. “Un beso viene rodando desde el principio de los tiempos hasta mi boca...”. “He prolongado el eco de la sangre a que respondo...”. Como Whitman hizo en su Canto a mí mismo, celebra al hombre como buen producto de la naturaleza, sólo que Miguel era más modesto. Cuando en una ocasión le ofrecieron la posibilidad de elegir un cargo u oficio con el que poder mantenerse en Madrid por mediación de un vizconde amigo de Pablo Neruda, Miguel, después de pensarlo durante toda la tarde, respondió si sería posible disponer de un rebaño de cabras a las que pastorear en los alrededores de Madrid. Miguel no fue un costumbrista, ni un folclorista, ni un poeta de salón, fue un hombre del pueblo que escribía maravillosamente poesía, primero en el campo, después en las trincheras y finalmente en la cárcel.

También la amistad, esa forma que adquiere el amor entre los hombres, está muy presente en la vida y en la obra del poeta, y el tremendo dolor por su pérdida. El llanto por Ignacio Sánchez Mejías de García Loca es una obra de precisión, una sinfonía perfecta, pero la elegía a Ramón Sijé es un canto desgarrado y desgarrador que a todos nos conmueve. Ahí están de nuevo la tierra, en este caso la de la sepultura: “Quiero escarbar la tierra con los dientes, quiero apartar la tierra parte a parte, a dentelladas secas y calientes...”, y su rabia, desatada como los elementos de la naturaleza: “En mis manos levanto una tormenta de piedras, rayos y hachas estridentes, sedienta de catástrofe y hambrienta...”.

Si la amistad fue un elemento exaltado por muchos de sus compañeros de generación, hay otro rasgo que es más característico de Miguel: su virilidad. Es un hombre quien nos habla de su mujer, de su amor: “He poblado tu vientre de amor y sementera...”; “Menos tu vientre todo es confuso...”, de su hijo,de la amistad, del dolor, del orgullo, de no doblegarse ante las injusticias. También en este aspecto Miguel Hernández da una lección al afirmar su masculinidad en oposición al machismo imperante. Se puede ser un hombre íntegro, honesto, fuerte, orgulloso y sencillo, sin necesidad de ser violento. No ser machista tampoco implica ser pusilánime, Miguel fue un hombre valiente, pero su valentía no era locura, ni excusa de otra cosa, era la consecuencia natural de un sentido sencillo y profundo de la dignidad. Miguel no huía de nada, fue abiertamente al encuentro de la vida y encontró la muerte.

FUEBNTE: LETRALIA Nº198

Talavera, Ocaña, Puertollano y Mestanza se unirán en 2010 al «Año Hernandiano»


Talavera, Ocaña, Puertollano y Mestanza se unirán en 2010 al «Año Hernandiano»

Lunes, 24-08-09
MARÍA JOSÉ MUÑOZ

TOLEDO. El próximo 2010 ha sido declarado «Año Hernandiano»: Se cumplen cien años del nacimiento en Orihuela del poeta Miguel Hernández, que murió enfermo de tuberculosis en la cárcel de Alicante en 1942, con tan sólo 31 años de edad.
El poeta será homenajeado el año que viene en 18 países y 34 municipios españoles, y Castilla-La Mancha no puede quedarse al margen de un centenario que lidera la Fundación que lleva su nombre y que dirige Juan José Sánchez. Las gestiones para conmemorar los cien años del nacimiento del autor de «El rayo que no cesa» se han realizado en contacto con hispanistas, profesores universitarios y centros culturales de Europa, América, África y Asia.
Talavera de la Reina, Puertollano, Ocaña y Mestanza son cuatro localidades de Castilla-La Mancha que se han sumado ya al acontecimiento, ya que por todas ellas pasó el poeta. Como muestran los archivos de la Fundación Cultural Miguel Hernández, la figura de Carmen Pastrana quedó vinculada a la del poeta por un encuentro casual en la villa de Mestanza, donde ejercía como maestra y que fue lugar de paso de Miguel Hernández, que en aquella época formaba parte de las Misiones Pedagógicas. «Tanto debió impresionar Carmen al poeta que éste le dedicó un poema, generando una polémica para la crítica literaria hernandiana que ha llegado hasta nuestros días».
Respecto a la estancia de Miguel Hernández en las Misiones Pedagógicas en primavera de 1936 por tierras de la Mancha, el poeta escribe una carta a su esposa Josefina con membrete del Hotel Castilla de Puertollano, y fechada en marzo de 1936, donde dice: «Aquí me tienes ya; hubiera querido escribirte ayer mismo que fue el día de mi partida de Madrid a esta provincia de Ciudad Real. Estoy muy cerca de Andalucía, pero no paso a ella...te pido me escribas a la dirección ésta: Miguel Hernández. Hotel Castilla. Puertollano».
La Fundación también ha realizado gestiones con la Concejalía de Cultura de la localidad toledana de Ocaña, en cuya cárcel estuvo preso entre 1940 y 1941. El poeta, recluido al final de la guerra civil, es trasladado en noviembre de 1940 al Penal de Ocaña, donde daba clase a los reclusos analfabetos.
«Las Nanas», en Talavera
«Y en Talavera tuvo buenos amigos, como Víctor González Gil o el poeta Rafael Morales, que fueron bastante importantes en su vida. En junio de 1935, cuando Víctor González dirigía la revista talaverana «Rumbo», Miguel publicó allí el soneto «Pastora de mis besos»», señala Sánchez. Como se ve, la vinculación del poeta con Talavera es grande y el Organismo Autónomo Local de Cultura, que dirige Francisco Castaño, «ya está preparando varias actividades para el centenario». Para ello cuenta con el apoyo de Pilar García, especialista en el escultor Víctor González Gil, que perteneció a la generación del 27 y que mantenía excelentes relaciones con Miguel Hernández.
Víctor González Gil contó, durante una conferencia pronunciada en la década de los ochenta en las I Jornadas de la Juventud, que Miguel Hernández escribió «Las Nanas» y algunas cancioncillas en la parte de arriba de su casa de Talavera, y abajo, en el patio, se pasaba el día subido a la higuera, como si estuviera en Orihuela.
La Fundación Miguel Hernández ha patrocinado el disco «Tristes guerras», en el que el cantautor Francisco Damas ha musicado doce poemas del poeta con la colaboración del poeta argentino Juan Gelman, Premio Cervantes 2007; el cantautor Luis Eduardo Aute y la cantante Pastora Soler, con ritmos contemporáneos. «Es un intento de acercar la poesía de Miguel a todos los públicos. Hay un formato digipack para todos los públicos, y también va a haber un formato CD-ROM para alumnos», explica Juan José Sánchez, quien añade que este último formato estará patrocinado por el Gobierno de Castilla-La Mancha, a través de las Consejerías de Educación y Presidencia, y que se distribuirá con fines didácticos por los centros de enseñanza. La presentación tendrá lugar en Toledo el próximo otoño, probablemente en el mes de octubre.
Jornadas para profesores
También en la capital de Castilla-La Mancha se preparan unas jornadas dirigidas a profesores de Educación Secundaria que podrían celebrarse, en colaboración con la Junta de Comunidades, entre febrero y marzo de 2010, jornadas que impulsa una experta en el poeta oriolano, la profesora Inmaculada Gómez Vera, autora de una tesis doctoral sobre Miguel Hernández.
Preguntado el director de la Fundación si en el ámbito municipal de Toledo se espera algún acto, contesta que, «de momento, no hay nada, pero aún queda tiempo para que se vayan sumando localidades y organismos. Vamos poco a poco. Nos ponemos en contacto con los que sabemos que son hernandianos y les recordamos que por allí pasó Miguel. Yo no tengo documentado que pasara por Toledo».


FUENTES

EL VIAJE DE MIGUEL HERNÁNDEZ A RUSIA

(Miguel en Rusia, dibujo de Palmeral)


Por Ramón Fernández Palmeral



Si los viajes del poeta oriolano Miguel Hernández a Madrid fueron decisivos para su proyección poética y personal, en cambio, el viaje que realizó a Rusia con motivo del V Festival de Teatro Soviético en Moscú, representando a la delegación de la II República española, le supondría un destino trágico al finalizar la guerra civil, y además marcaría en Miguel un cambio ideológico y artístico como así lo reflejó en un artículo que apareció en el diario alicantino «Nuestra Bandera» a su regreso de la URSS. Un viaje periodístico por el país de los bolcheviques. Porque Miguel también ejerció una forma de periodismo como ya demostró J. Manuel Carcasés al defender su tesis doctoral en la Facultad de Ciencias de la Información en la Complutense, y dirigida por el profesor Francisco Esteve, bajo el seudónimo de Antonio López. Los últimos estudios sobre este viaje, además de los de Juan Cano Ballesta, uno de los más completos, y el no menos elogiado de Andrés Santana [1] , que duda sobre la afirmación que actualmente se hace de que Miguel volvió muy cambiado de la URSS, suposiciones al respecto.

La verdadera vocación de Miguel fue el teatro más que la poesía, él deseaba ser dramaturgo como su «amigo» Federico García Lorca quien recorría España con su compañía La Barraca «en un teatro de acción social» con dramas rurales, puesto que esta actividad suponía un medio más eficaz de ganarse la vida que con la poesía, que siempre va aneja a toda creatividad artística. Miguel admiraba y conoció a Lorca en Murcia cuando se lo presentó Raimundo de los Reyes en 1933 con motivo de una función de teatro en esa ciudad. También admiraba al dramaturgo Rafael Alberti (Numancia), al Bergamín de Mangas y Capirotes. Aunque los del 27 son epígonos del teatro de Lope de Vega, en la representación del drama social «Fuenteovejuna», o del mejor Zorrilla. A la muerte de Federico, a Miguel se le encarga que organice “La Barraca”, e marzo de 1937, según la declaración indagatoria que hizo ante el Juez Militar de Prensa el 6 de julio de 1939 (pp.79-80. Proceso a Miguel Hernández. Sumario 21.001, Juan Guerrero Zamora ), parece ser que en junio fue nombra do director, cargo que por los abatares de la guerra no llegó a ejercer. Miguel le escribió una carta a Josefina diciciéndole que a su regreso a espa pensaba dedicarse la teatro. Esta fue una de las razones por las que fue comisionado era el V Festival de Teatro en Moscú. Podemos pensar que Alberti no fue nombrado porque era demasiado radical y no tan noble como Miguel. Además los asuntos de guerra sobre todo la cuciante toma de el espolón nacionalista de Teruel, era prioritario para la República, por ello el comadante Carlos le requirió a primeros de diciembre de 1937´para que fuera hasta Teruel, y estuvo en Concud y Altos de Celada.

Las influencias de Lorca, Alberti, Azorín y la de otros autores en el teatro social de Miguel, han sido analizadas y expuestas por Jesucristo Riquelme en varios artículos publicados en la revista Empireuma, donde encuentra coincidencias en: Los hijos de la piedra, (1935) y El labrador de más aire, (1936).

En tiempos de la II República y durante la guerra civil era frecuente viajar a Rusia, por las relaciones de ayuda que ésta nación aportaba a la causa republicana española, sin olvidarnos del oro de Moscú a cambio de armas ((ver el libro de Pío Moa, Los mitos de la guerra civil, pp.293-320).La Unión Soviética era para los intelectuales y artistas de todo el mundo el gran espejo donde mirarse, considerada como la «patria espiritual de los trabajadores del mundo», como dejó escrito M. Hernández. Alberti y su esposa M.ª Teresa León, J. Bergamín habían viajado con anterioridad a Moscú

1 de Julio de 1937 viaja a Valencia, para II Congreso Internacional de Escritores en Defensa de la Cultura. Firmó junto a otros escritores la “Ponencia colectiva” que se publicará en la revistas Hora de España, Valencia, número 8. Donde además se reunieron numerosos intelectuales internacionales. Recojo la nota de Gonzalo Santonja: «En ese Congreso Miguel conoció a Octavio Paz, en [revista] Letras de México 1942 escribió: ...llevaba la cabeza casi rapada y usaba pantalones de pana y alpargatas...»

En dicho Congreso asistió además de Octavio Paz, otros escritores extranjeros: Pablo Neruda, Nicolás Guillén, Alejo Carpentier, César Vallejo, Vicente Huidobro, Raúl González Tuñón, Andrés Malraux, Luis Aragón, Jean Causso. La ya célebre y referida “Ponencia colectiva” se puede leer completa por Internet, pero quiero recoger un párrafo de ella por alusiones a Miguel Hernández y a Juan Gil-Alberti.

«Porque lo que menos importa ya es el hecho en sí mismo de que este grupo, esté total, absolutamente integrado, no sólo por distintos significados de sensibilidad, no sólo por distintas concepciones de nuestra profesión y decidida vocación de artistas, escritores y poetas, sino por individuos que, como procedencia social, pueden marcar distancias tales como las que hay entre el origen enteramente campesino de Miguel Hernández, por ejemplo, y el de la elevada burguesía refinada que pueda significar Gil-Albert;...».



La «Ponencia Colectiva» fue firmada por los intelectuales más jóvenes de la república, los que no eran partidarios de seguir la línea dura socialista, como era el caso de Alberti. Firmada por la A. Sánchez Barbudo, Ángel Gaos, Antonio Aparicio, Arturo Serrano Plaja (secretario), Arturo Souso, Emilio Prados, Eduardo Vicente, Juan Gil Albert, J. Herrera Petere (apelativo de José Emilio Herrera Aguilera), Lorenzo Varela, Miguel Hernández, Miguel Prieto y Ramón Gaya.

En 21 de agosto de 1937 Miguel recibió un Homenaje en el Ateneo de Alicante, que fue presentado por el músico José Juan Pérez, y como testigo de excepción asistió Vicente Ramos. La noticia apareció en Nuestra Bandera, de Alicante, Órgano del Partido Comunista. Días después salió en viaje para Rusia junto a cinco españoles más, que nos merece un apartado.



El ministro de Instrucción Pública Jesús Hernández designó esta vez a cinco artistas para asistir al V Festival de Teatro Soviético en Moscú. Los cinco viajeros de la delegación hispana, según Cano Ballesta, eran: Francisco Martínez Allende (director del teatro popular de Madrid), Miguel Hernández (poeta y dramaturgo), Casal Chapí (músico y nieto de Ruperto), Miguel Prieto Anguita (pintor), Gloria Álvarez Santullano (actriz). El director de esta expedición fue Cipriano Rivas Cherif, autor y director teatral y cuñado de Manuel Azaña, aunque Cipriano debió de trasladarse desde Suiza, puesto que en esa época se hallaba de cónsul en Ginebra.

En esta expedición cultural, M.Hernández acudía como dramaturgo y no como poeta, como así se lo hizo saber en una carta a Josefina desde Valencia: «...que sirvan de estudios y beneficios del teatro que yo hago en España...» Su obra dramática,antes de ir a Rusia, no era importante, su viaje fue un premio por su buen comportamiento como poeta en los frentes de guerra. A Jesús Hernández, munistro de Instrucción Pública no tuvo dificultad al seleccioarlo como uno de los seis integrates de la expedición. Además Miguel pertenencia a la Plana Mayor de la 11ª División y tenía buenas amistada militares y políticas.

El ferrocarril era el medio de transporte más usado, viajes con múltiples transbordos. La ruta férrea para llegar a Moscú, según un viaje que hizo el periodista Daniel Tapia Bolívar en los años treinta, era la línea Madrid-París-Berlín-Varsovia-Moscú (relatado en su libro “Ha llovido un dedito”,1935). Los viajeros de la representación española buscaron una ruta mixta: trem y “aeroplano”. Primero salieron en tren desde Valencia, punto de encuentro, el 29 de agosto de 1937, por ello algunos autores escriben que Miguel salió el día 26, pero desde Alicante. Escala en París día 30 del mismo mes, según la fecha de otra carta que le escribiera a Josefina desde la capital del Sena. Desde París a Moscú se continuó el viaje a aeroplano con escala en Estocolmo. Y siguiendo las huellas de su poema: “España en ausencia”, en la estrofa tercera nos revela que pasó por Francia, Holanda, Dinamarca y Suecia (para pasar de Francia de Holanda omite Bélgica). No pudieron cruzar el espacio aéreo de la Alemania de Hitler, aliada de Franco. A Hitler y a Mussolini, Miguel les dedicó un piropo: los dos mariconazos, (estrofa 15, del famoso poema “Rusia”).

El día 1 de septiembre se inauguraron los actos en el Teatro Bolchoi de Moscú, el Coro Piatnitski interpretó la canción rusa «La Estepa», según dio cuenta el rotativo soviético Izvestia el 2-09-37, y donde se recogen entrevistas a la representación española, según la traducción de Andrés Santana (miembro de la embajada de España en Moscú), y cuya copia se halla hoy día en la Fundación Miguel Hernández de Orihuela. Según Moya Torres salieron de Moscú y visitaron durante los días 12 y 13 Leningrado (cuna bolchevique) antigua San Petersburgo (En la foto que hay de Miguel en Rusia, detrás se ve la cúpula de la catedral de San Isaac de esta ciudad). El día 17 bajaron a Yarkov en Ucrania, donde compuso el poema «La fábrica-ciudad». El 5 de octubre embarcaron de regreso para Copenhague, no sabemos ciertamente desde qué puerto, lo más lógico era salir desde Kaliningrado, tocar algún puerto danés, hasta el puerto del Támesis, y visitan Londres, cruzan el Canal de la Mancha y a París.



En esta ciudad del Sena Miguel visitó a Octavio Paz y su esposa Elena Garro, a León Felipe, a Bertuca, según notas de Ramón Pérez Álvarez. Aprovechando esos días parisinos, Alejo Carpentier le graba la voz en un poema Canción del esposo solado. Elena Garro comenta que Miguel «volvió de Rusia y su rostro se había vuelto solemne, como si la experiencia soviética le hubiera cambiado». Parece ser que visitó la Exposición Internacional de París, vio el "Guernica" de Picasso (la República le pagó 150.000 francos a través de Max Aub), a Miguel no le gustaba el cubismo, quizás por que venía enviudo del “Realismo socialista” (tendencia estilo generado en la Unión Soviética en la década de 1930 con fines propagandísticos y para que fuera entendido por el pueblo, que se difundió a otros países comunistas después de la II Guerra Mundial. Juan Cano Ballesta es autor de Miguel Hernández y el debate culturala de los años treinta (El poeta ente el Guernica) que visitó a Josefina Manresa en agosto de 1985, y halló «en sus archivos unas páginas muy valiosas, que nos ayudaría a entender la reacción del poeta ante la gran obra de Picasso». En unas cuartillas Juan Cano halló la siguiente frase: «Los pintores de hoy temen a la pintura, la rehuyen. Picasso es un ejemplo».

Dicho movimiento, se fraguó en la extinta URSS durante la época de Iósiv Stalin y el primer paso hacia su establecimiento oficial fue en 1932, cuando el Comité Central decretó que todos los grupos artísticos independientes se disolvieran en favor de las nuevas formaciones controladas por el reciente Estado). La poesía de Miguel tomó este estilo realista: dirigida al entendimiento del pueblo, al estilo de los romances.

Viajó en tren a Barcelona, Valencia y Alicante. Según cuenta Vicente Escudero: «...y allí fue recibido (Alicante) por un grupo de amigos dispuestos a acompañarle en el viaje de regreso a Orihuela». Convertido en «Visenterre» comentó a su amigo Vicente Escudero que Rusia era como un pastel de gloria de Orihuela (arriba el soplillo, debajo la yema).

Miguel aprovecha la pesadez del viaje para escribir artículos, cartas o poemas. En el poema «Rusia», de su libro El hombre acecha, 1939, nos comenta el viaje, nos habla de los trenes, de la extensión de Rusia y de las minas de hierro de los Montes Urales, y, las describe como «vacas de oro yacente / que ordeñan los mineros...». De cómo protegían a los niños españoles que salieron para salvarlos de los desastres de la guerra. Alaba al camarada Stalin como ya lo había hecho Alberti, en la tumba de Lenin da vivas y escribiría: «Lenin con pie de mármol y voz de bronce quieto». Y finaliza con el deseo de dos naciones unidas: «La URSS y España, fuerzas hermanas», verso que daría título al artículo que publicó en «Nuestra Bandera» de Alicante, núm. 108, 10 de nov. 1937, a su regreso de la Unión Soviética. Según nota de Juan Cano Ballesta (pág.160, El hombre y su poesía), donde se transcribe parte del artículo, escribió: «Al pisar tierra de la URSS, volví a sentir sobre mi rostro el viento humano respirado por los hombres... En los trenes, en las calles, en los caminos, donde menos se esperaba, el pueblo soviético venía hacia nosotros con los brazos tendido de sus niños, sus mujeres, sus trabajadores...». Sin duda alguna el poder económico de la URSS difería en gran medida de la situación campesina y obrera que se vivía en España de los años treinta.

El poema «La Fábrica-Ciudad», está dedicado a la ciudad de Jarkov, junto a río Donets, en la región de Ucrania (al sur de Rusia y limite con Rumanía), al Este de Kiev. Un poema de elogio a la industria, en la primera estrofa hace una metáfora de tractores como ganadería sólida con cadenas, y más adelante con titán laborioso, o con una metáfora apasionada y potente: tractores capaces de arar el mundo. A los que compara con bueyes metálicos y con las cadenas que siempre llevan los tractores en la parte de atrás para enganchar a los remolques o arrastrar maquinaria accesoria, remarcando la idea de fuerza: con los metálicos dientes, elogios a la libertad por medio del trabajo, con adjetivos sobre el hierro, clamor de metales, laten motores, leones de azabache, fraguas el tornillo penetra como un sexo seguro.

Un tercer poema y que no se recoge en El hombre acecha, es el ya mencionado «España en ausencia» da la sensación que es el primero de los que escribiera en el viaje, en el que nos aporta datos del itinerario, meditaciones e impresiones, salvo el pareado final que evidencia su amor a España y sus añoranzas:

Ayer mandé una carta y un beso para España

donde está la mujer que yo más quiero.

(Josefina estaba embarazada).

Este viaje a Rusia llenó al poeta oriolano de entusiasmo socialista, sobre todo al contemplar el evidente progreso industrial que habían logrado los obreros del antiguo país de los zares tiranos, asombrando al mundo obrero, ante la maquinaria agrícola, las ciudades, fábricas, y escribiría: Rusia edifica un mundo feliz y transparente/ para los hombres llenos de impulsos fraternales.

La conclusión a la que llego es que, este viaje a la Rusia bolchevique representado al teatro social y de acción política de estilo lopesco y lorquiano, e incluso albertino (a Lorca le costó la vida), fueron las pruebas que argumentaron en el Consejo de Guerra, sumario 21.001, presidido por Alfaro, para condenarle a muerte por un contrasentido: «adhesión a la rebelión». Los tres poemas comentados no pudieron ser publicados hasta después de su muerte. Pero Miguel Hernández no ha muerto, él vive entre nosotros a través de su legado personal, literario y la Universidad que lleva su nombre.






NOTAS



1 ] Andrés Santana Arribas, Universidad Estatal Lingüística de Moscú, Embajada de España en Rusia, autor de la ponencia «Miguel Hernández y Rusia: Encuentro de dos Almas Gemelas». Pp483-498, en Presencia y Futuro de Miguel Hernández, Actas II Congreso Internacional (2003). Donde escribe: «En su autoditactismo, en su amor y admiración por la poesía y la cultura, en los deseos y los esfuerzos por hacer un mundo mejor, Hernández y la URS eran dos almas gemelas, dos quijotes luchando contra molinos de viento que los acabarán pro destruir con el tiempo: Hernández murió en una cárcel franquista y la URSS se extinguió».


Otros artículos de interés sobre el viaje de Miguel a Rusia (El Eco Hernandiano)

Viaje de Miguel en la Prensa Alicantina

¿Quién era Lan Adomiam?


¿QUIÉN ERA LAN ADOMIAN?



Por Ramón Fernández Palmeral



La noticia de Información del viernes 14 de abril 2006, pág. 53, dice que el compositor Carlos Cruz de Castro conoció al composito Lan Adomian en México y que éste, a su vez, conoció a Miguel Hernández. Sabemos muy bien quien es nuestro poeta oriolano, pero ¿sabemos quién era el compositor Lan Adomian?



Lan Andomian (1905-1979), era un neoyorquino origen ruso, nacio en Ucrania y murió en México, llegó a España como brigadista norteamericano, Brigada Lincoln, destinado a Valencia, aunque víctima de una enfermedad pulmonar fue declarado inútil para el combate. Posteriormente se exilió en México, donde murió en 1979. Nació el 29 de mayo de 1905 en la localidad ucraniana de Moguilov-Podolsk, a orillas del río Dniester y falleció en México D.F. el 9 de mayo de 1979. Lan estudió en el Conservatorio Nacional de Música de Czernowitz, violinista en Ruumanía hast que emigró a Estados Unidos, se traslada a a New York donde entra en contacto con las vanguardias Carles Segger o Charles Herny Cornwell (1909-1982). (1)

El himno oficial de la II República seguía siendo el de Riego, pero en 1938 Miguel Hernández escribió otro himno para la II República titulado «La guerra, madre» y composición para voz y piano del compositor Lan Adominan. Además Miguel le había entregado otras tres canciones: «Las puertas de Madrid», «Todos camaradas», «Madrid y su heróico defensor». El himno se estrenó primero en México el 13 de abril de 1957 con las modificiaciones de Margarita Nelken, y en la sala del Gran Teatro de Elx, el 27 de diciembre de 2004, con arreglo musical para banda y orquesta, del joven compositor alicantino Víctor Pérez San Roque, donde se proyectó largometraje del documental Compañero del alma, con guión de Jesucristo Riquelme y José Manuel Iglesias, acto que lo patrocina el Centro Hernandiano de Estudios e Investigaciones, del Ajuntament d'Elx, donde tuve el honor de oírlo porque fui invitado al estreno.



Lan Adomian hallándose en el exilio de México, envió una copia del himno a Salvador Etchevarría, ministro de Información del Gobierno republicano en el exilio, además le uniría una carta, donde le explica que la letra era de Miguel Hernández, de una España en guerra que inspiró a Miguel, al que había conocido en septiembre de 1938 en Valencia, porque se reunían en la calle del Trinquete de los Caballeros. Allí conoció además a otro alicantino a Pascual Pla y Beltrán. Escribe: «Una mañana, vino Miguel a mi casa. Yo tenía allí una habitación y estaba componiendo. Entró Miguel con los oficiales de la VI División y les dijo que yo era la persona indicada para componer el himno de la División. Me entregó la letra y se marchó. Aquella noceh la pasé escribiendo eses homno. noceh de bombardeo del puerto Grau [puerto de Valencia]- Termioné la canmción esa noche...



Carlos Cruz es autor de «Ofrenda a Miguel Hernández», que ayudará, sin duda, al aumentos de los fondos musicales que sen depositarán en la casa natal de poeta en calle san Juan nº 82 de Orihuela, si es que no se cae antes de su remodelación. Poca gente sabe que la mayoría del archivo musical ha sido aportado por Gaspar Peral Baeza.

El director de orquetas alcoyano Carlos Palacio hizo una recopilación de canciones de la República, destruida la edición en Valencia, junto a El hombre acecha, de Miguel Hernández si hizo una edición facsímil en 1980, titulada Colección de Canciones de lucha (1936-1939). En cuyo prólogo decía Carlos:

"Recogemos en el presente volumen canciones antiguas que exaltan las luchas de las masas populares y preferentemente las que surgieron al estallido de los primeros acontecimientos de nuestra guerra: cuando el encendido entusiasmo de los milicianos hizo viva en su carne la consigna de «No pasarán». Unas y otras han hecho vibrar el espíritu combativo de nuestros soldados y están indisolublemente unidas a los episodios más gloriosos de nuestra lucha"...


Se había casado con María Teresa Toral de Adomián, la cual escribió una nota en 1982, donde pedía fervientemente que el nombre de sus marido no se olvidara en España.

El primer verso del Himno de la República Española:

La libertad nos ha dado su aliento;

la Independencia, y el pueblo su hogar;

en el combate por un mundo hermoso,

nos dan coraje la tierra y el mar.






NOTAS


1).- Óscar Moreno. "La voluntad de crear", El Eco Hernandiano, nº 11, otoño, 2006, p. 2

domingo, 23 de agosto de 2009

Miguel Hernández: el poeta que consiguió ser “Viento del pueblo”



[martes 9 de diciembre de 2008]
Miguel Hernández: el poeta que consiguió ser “Viento del pueblo” (y no es un tópico)
Emilio Rucandio

Espero que sirva para aportar algo a la impagable deuda que tengo con Miguel desde que empecé a conocer su obra.

(Miguel en la cárcel, dibujo de Ramón Fernández)

Cuando se hacen encuestas sobre lo poemas preferidos por el público, independientemente del mayor o menor nivel cultural de l@s encuestad@s (1), los versos de Miguel Hernández (Orihuela, 1910-cárcel de Alicante, 1942), siempre ocupan un lugar preeminente. Por otra parte las conferencias y los recitales de poemas de Miguel Hernández tienen una atmósfera especial, pues suele haber una comunicación de emociones y de opiniones, que no suelen ser habituales en otros actos semejantes: Veamos algunos ejemplos:

1. En el coloquio posterior a la conferencia "Claves de Miguel Hernández" (Valencia, Bancaja, 17-12-92), que pronunció Leopoldo de Luis, poeta y especialista hernandiano, un asistente consideró que nuestro escritor tendría que ser nombrado el patrón de los labradores, pues la Naturaleza es primordial en la vida y en la obra del escritor oriolano.

2. En el año 2001, se publicó 50 poemas del milenio, conjunto de poemas editado por Debolsillo, resultado de las votaciones de lectores españoles y latinoamericanos. Entre los poemas más votados hay dos del poeta oriolano: "Elegía", de i>El rayo que no cesa (1936), y las "Nanas de la cebolla" del Cancionero y romancero de ausencias (1938-1941). Concretamente, la “Elegía”, dedicada a Ramón Sijé, aparece clasificada en el segundo puesto...


Leer más: Asociación Cultural de Orihuela

Memorias de la Orihuela republicana RAMÓN PÉREZ ÁLVAREZ

HOMENAJE A MIGUEL HERNÁNDEZ

Memorias de la Orihuela republicana RAMÓN PÉREZ ÁLVAREZ
FUNDADOR DE LA CNT.
Jesús Millán


El abandono de la memoria histórica oriolana no afecta solo a sus monumentos ni a los siglos pasados, sospecho que en ciertos aspectos debe ser más fácil conocer temas del siglo XVI que de la II República. Y sin embargo ha habido también una Orihuela republicana y en guerra que ha tenido sus protagonistas. Al alcance de la mano muchas veces, no han hallado quien se ocupe de recoger su memoria, el recuerdo de aquellos años apasionados. Por ello, y casi obligado por su franqueza y su amabilidad, he recogido algunos recuerdos de Ramón Pérez Álvarez, el adolescente que fundó la CNT en Orihuela.


POLÍTICA Y CULTURA

El origen familiar de Ramón puede tomarse como bastante corriente en la Orihuela de comienzos de siglo. "Nací en 1918 en la calle Masquefa, cerca de la Pza. de la Pía, exactamente en la Caja de Monserrate. Soy el mayor de cinco hermanos. Mi padre había sido carpintero en el colegio de los jesuitas y luego se hizo cartero. En mi casa se respiraba un ambiente religioso. Mi padre era el Apostolado de la Oración y recuerdo las visitas de los franciscanos a mi casa así como, más adelante, su preocupación por el tipo de libros que yo leía. En cambio, políticamente, no recuerdo nada especial en casa. Tal vez la relación de Pelayo Beltrán, un carlista de Valencia muy respetado en Orihuela, que tenía amistad con mis padres”.


Como para muchos españoles, la República fue el inicio de la política. “Antes no había partidos”, dice. Después del 14 de abril me puse un botón con los colores republicanos en la solapa y en el Colegio de Sto. Domingo el hermano Mercader me obligó a quitármelo. Recuerdo que al salir del colegio, sin saber por qué, me uní a la manifestación que celebraba la República. Mis relaciones con los jesuitas empeoraron. Para mí eran muy injustos y amigos de favoritismos y yo nunca he sido
“tiralevitas”. Se unieron otras circunstancias. Había muerto su padre en un accidente y las necesidades familiares le obligan a trabajar como cartero con 14 años. “Solicité una beca a la Caja de Monserrate, establecida para obreros e hijos de obreros, pero no me la dieron. Así que me quedé en tercero de bachiller”...
El 13 de diciembre de 1939 ingresó en el Reformatorio de Adultos de Alicante, procedentede Orihuela.

Leer más: FUENTE: Asociación Cultural Orihuela

Video con imáganes y voz de Josefina Manresa