Cuando mandan los socialistas se nota. Ahora se vuelcan con Miguel Hernández. Miestras con el PP lo ignorá tanto en Alicante como en Elche.
Donde ahora se dictan sentencias judiciales en Alicante, en la Ciudad de la Justicia, tal día como hoy, hace 74 años, murió el poeta Miguel Hernández. Con tan solo 31 años, enfermo de tuberculosis, acabó sus días en lo que entonces era el Reformatorio de Adultos de Alicante, una cárcel donde la reciente victoria franquista encerraba a los que no estaban de su parte. A día de hoy, la ciudad de Alicante todavía parece burlar su fatal destino manteniendo, a menos de 400 metros del lugar donde murió, la plaza de la División Azul.
La madrugada del 28 de marzo de 1942 se apagó el poeta del pueblo, conocido por su humildad y por la pasión de sus versos, por haber defendido el gobierno legítimo de la República. Y es que aunque sea su faceta menos conocida, Miguel Hernández, además de escribir versos, también dejó poderosos textos publicados en periódicos de la Guerra Civil como Frente Sur, Frente Extremeño o Pasaremos, las balas de su pluma con las que peleaba como comisario político comprometido con el Gobierno de la República, conocedor ya de la importancia de la propaganda.
Cuenta el escritor Andrés Sorel, en las imprescindibles Crónicas de la guerra de España de la Fundación Domingo Malagón, que la herencia del poeta que recogió su mujer, Josefina Manresa, fue: “Un mono. Dos camisetas. Un jersei. Una camisa. Unos calzoncillos. Dos juegos de almohada. Una toalla. Una correa. Una servilleta. Un par de calcetines. Una manta. Una cazuela. Un bote”.
La Senda del Poeta, poesía sin política
Este año se celebrará el 20 aniversario de la ‘Senda del poeta’, la caminata de 70 kilómetros en tres etapas que discurre la senda internacional GR-125 y que homenajea al poeta en un recorrido desde su lugar de nacimiento, Orihuela, hasta su tumba, en el cementerio de Alicante, organizado por el Institut Valencià de la Joventut (IVAJ).
Se trata de tres jornadas en las que viaja por la vida de Miguel Hernández, entremezclando la naturaleza, el compañerismo, la poesía y, en menor medida, la memoria histórica. Se visita el que fuera uno de los campos de concentración franquistas más duros tras la Guerra Civil, el de Albatera, hoy un campo de palmeras. Pero se minimiza prácticamente hasta el olvido la militancia del poeta como comisario político.
Ahora, el actual equipo de gobierno del Ayuntamiento de Alicante -compuesto por los grupos PSOE, Guanyar Alacant y Compromís-, siempre tímido respecto a la memoria histórica, aprobará en el próximo pleno municipal la creación de una Comisión encargada de coordinar los actos conmemorativos del 75 aniversario de la muerte de Miguel Hernández en la cárcel de Alicante, que será el año que viene, en 2017.
El nuevo gobierno ya creó una Concejalía específica de Memoria Histórica y Democrática, dirigida por la edil María José Espuch. A través de una Declaración Institucional, este jueves propondrá la creación de dicha Comisión que también coordinará el 80 aniversario del terrible bombardeo del Mercado Central de Alicante en 2018 y del 80 aniversario de los acontecimientos relacionados con el fin de la guerra en la ciudad en 2019, ya que esta ciudad fue el trágico escenario final, entre marzo y abril de 1939, con más de 15.000 personas atrapadas en su puerto, algunas de las cuales se suicidaron, mientras que otras pasaron un durísimo periplo por campos de concentración y cárceles y otras fueron fusiladas.
”La Declaración Institucional recuerda el papel tristemente protagonista de Alicante en la etapa de la Guerra Civil Española, cuando la ciudad se mantuvo fiel a la República y a la Constitución y por ello, pese a estar en la retaguardia, sufrió como pocas las consecuencias de dicha guerra por los sistemáticos bombardeos que, desde las Islas Baleares, se fueron sucediendo en esos años por lo aviones fascistas italianos allí asentados”, ha informado el Ayuntamiento de Alicante en un comunicado, que prosigue: “En este periodo, cientos de personas de distinta ideología murieron en dichos ataques aéreos, entre ellas las más de trescientas personas -sobre todo mujeres y niños- asesinados en el bombardeo del Mercado Central ocurrido el 25 de mayo de 1938. En esos terribles años, las verdaderas protagonistas del día a día en nuestra ciudad fueron las mujeres que no sólo tenían que mantener a sus familias con escasos recursos debido a la guerra, sino que trabajaron intensamente en la fabricación de productos tales como mantas, uniformes y munición.
“Es justo que ahora podamos hacer un justificado homenaje también a todas ellas, como hará la Concejalía de Memoria Histórica y Democrática en la remodelación del Centro de Interpretación del Patrimonio de los Refugios y la GCE en Alicante”, detalla la edil María José Espuch. La Declaración Institucional recuerda “la terrible represión de la posterior Dictadura Franquista llevó también a la cárcel, tortura y fusilamiento de numeras personas por su sola condición de republicanos, entre ellas el insigne poeta oriolano, Don Miguel Hernández, fallecido el 28 de marzo de 1942 en el Reformatorio de Adultos de Alicante”.
La propuesta contempla que el resto de instituciones públicas y privadas, así como a organizaciones y colectivos que estén interesados, puedan participar no sólo en la preparación de actividades y eventos sino incluso en aportar la ayuda económica necesaria para su realización.
La presidencia de la comisión estará ocupada por el alcalde y la vicepresidencia, por la edil de Memoria Histórica. Los grupos municipales del PSOE, Guanyar y Ciudadanos tendrían tres concejales representados, mientras que el Grupo Popular tendría cuatro, y Compromís dos. Además, se integrarían con voz pero sin voto: el Jefe de Memoria Histórica y Democrática municipal; un representante de la Comisión para la Recuperación de Memoria Histórica de Alicante; uno de la Asociación Alicante Vivo; dos representantes de la Universidad de Alicante; dos de la Generalitat Valenciana, y dos de la Diputación Provincial.