Sinopsis:

Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

jueves, 31 de octubre de 2013

Cinco pesetas por la vida de Miguel Hernández


| Actualizado 13.06.2010 - 05:01 /Huelvainformacion.es
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El reloj de oro de Aleixandre fue su última posesión. Decidió venderlo en Moura. Ese día 30 de abril de 1939, domingo, intentó el trueque. Josefina contaría después que era el único regalo de su matrimonio. El joyero le denunció a la Policía de Fronteras y fue detenido allí mismo. Llevaba en su poder 20 escudos y dos salvoconductos inútiles y el libro La destrucción del amor y un ejemplar del auto sacramental Quién te ha visto y quién te ve y sombra de lo que eras. Recuerdo de sus flirteos con la religión que le inculcara su amigo del alma y el que le quiso alejar de Pablo Neruda, de Aleixandre o de Rafael Alberti.

Miguel era un alma libre: No hay cárcel para el hombre/ no podrán atarme, no/Este mundo de cadenas me es pequeño y exterior/quién enseña una sonrisa/quién amuralla una voz...

Miguel fue conducido al depósito carcelario de Rosal de la Frontera desde Moura el 3 de mayo de 1939. "Ruego se sirva admitir en el Depósito Municipal del Ayuntamiento a Miguel Hernández Gilabert, el que queda a disposición del señor secretario de Orden Público e Inspección de Fronteras". La rúbrica era de Antonio Marqués Bueno.

La primera vez que Miguel es interrogado fue a las doce del mediodía del 4 de mayo de 1939 ante el agente de segunda clase del Cuerpo de Investigación y Vigilancia y un agente auxiliar: Antonio Marqués Bueno y Rafael Córdoba Collado. En sus anotaciones identificaban al poeta como "Miguel Hernández Gilabert, de 28 años, casado en la que fue zona roja, de profesión escritor e hijo de Miguel y Concepción. Fue entregado en este puesto fronterizo por haber pasado clandestinamente desprovisto de la documentación necesaria a este efecto".

El premio para los guardinhas lusos que lo entregaron fue de cinco pesetas, el precio que pagaba el Régimen de Franco a los colaboracionistas que entregaran refugiados o huidos a través de la frontera con Portugal.

Según consta en el Registro Municipal y Servicio de Depuración de Detenidos del 4 de mayo de 1939, allí compartieron ese día cautiverio con Miguel Hernández, un hombre y una mujer: Victoriano Borrero Frutos y Francisca García Villanueva.

El interrogatorio duró diez horas. Medio día de torturas. Golpes que ocultó en sus cartas a Josefina. "Ve a mi casa y di a mi padre y a mi hermano que un día de estos me llevan a Huelva desde este pueblo y que es preciso que me reclamen de Orihuela. Que hablen con don Luis Almarcha.... (otra vez el obispo) y quien sea preciso para la consecución de mi traslado a nuestro pueblo. La detención no es nada de importancia, pero haz lo que te digo para estar junto a nuestro hijo y a ti lo más pronto posible. No te preocupes, nena. Como bien, me tratan bien y a lo mejor desde Huelva paso a Orihuela antes de que nuestros amigos pudientes de ahí hayan hecho gestión alguna". Miguel se mostraba 'confiado' en la justicia de Franco, sabedor de que la carta iba a ser leída por sus captores.

La verdad era muy distinta. Los captores se emplearon a fondo, golpeándole la cabeza y los riñones hasta hacerle orinar sangre.

El único apoyo que tuvo Miguel en Rosal se lo dio otro preso, Francisco Guapo, y su mujer, Manuela, que le llevaba el poco alimento que fue capaz de comer.

Hoy su nuera, Lucía Izquierdo, recuerda que los amigos de Miguel sabían que moriría en prisión. Allí sólo sobreviven los débiles (los canijos). Y Miguel era un hombretón de 175 centímetros de estatura al que gustaba comer, acostumbrado a la pitanza campestre. Pero incapaz en el presidio de aceptar comida que necesitaban sus compañeros.

La confesión del poeta fue la que quisieron. En los escritos que se conservan ponen en su boca que "Lorca era un hombre de mucha más espiritualidad que Azaña, que no desconoce que era pederasta y que a pesar de esto era uno de los hombres de más espiritualidad de España, y que después del teatro clásico, él ha sido una de las mejores figuras; advirtiendo a los agentes que suscriben tengan cuidado no se repita el caso de García Lorca, que fue ejecutado rápidamente y según tiene entendido el mismo Franco (nuestro inmortal Caudillo) sentó mano dura sobre sus ejecutores".

Después de aquel atroz interrogatorio, sus inquisidores apuntan las pertenencias del preso: veinticinco escudos con cuarenta centavos y los dos salvoconductos para desplazarse a Sevilla y Cádiz.

La conclusión de los agentes de Rosal parece más bien una condena: "Es de suponer que este individuo haya sido en la que fue zona roja por lo menos uno de los muchos intelectuales que exaltadamente ha llevado a las masas a cometer toda clase de desafueros, si es que él mismo no se ha entregado a ellos".

Los documentos, que carecen de membrete, según apunta Cerdán Tato en su Geografía Carcelaria, llevan un sello de la Jefatura de Seguridad del Puesto de Rosal de la Frontera y la firma sólo figura al pie de la declaración. El atestado ocupa las primeras páginas del Procedimiento Sumarísimo de Urgencia 21.001 que condena al poeta a pena de muerte de acuerdo con la sentencia dictada el 18 de enero de 1940.

Como si un camino hacia la perdición escrito en algún sitio tratara de seguir, Miguel Hernández tuvo la mala fortuna de que en Rosal estuviese destinado un guardia civil vecino suyo, de Callosa del Segura, que le reconoció y aportó toda una leyenda de rebelde y escritor comunista. Qué fatalidad. A esa letanía de cargos, Miguel añadiría otro infortunio. Era de Alicante, lo que sirvió a sus verdugos para intentar relacionarle con el fusilamiento de Primo de Rivera. Quién les convencía de lo contrario. En su fantasía de cargos inventados pesaba el hecho de que cuatro de los milicianos que participaron en el fusilamiento de Rivera eran de Huelva. José Pantoja Muñoz, Guillermo Toscano Rodríguez, Miguel Quintero Cruz y Luis Serrat Martínez. Todos fueron depurados entre 1939 y 1941 en un procedimiento que comenzó precisamente el 15 de mayo de 1939.

El 9 de mayo de 1939 Miguel Hernández ingresa en la Prisión Provincial de Huelva. En su ficha, que se conserva en la biblioteca del presidio que lleva hoy su nombre, se concreta que entró a las 12:30 de la mañana. Dos días después, el 11 de mayo de 1939 era conducido a la Prisión Provincial de Madrid.

Once días de mayo agitados, repletos de miedos, acechanzas, traiciones que abrieron la puerta de un rosario de traslados a presidio que tiene 2.300 kilómetros de recorrido por los cerrojos de media España hasta que muere el 28 de marzo de 1942 en la enfermería del Reformatorio para Adultos de Alicante.

miércoles, 30 de octubre de 2013

Hoy 30 de octubre se cumplen los 103 año del nacimiento Miguel Hernández



1.- Miguel Hernández (Infancia y Juventud)

Miguel Hernández Gilabert nació a las seis de la mañana del domingo 30 de octubre de 1910 en la calle San Juan, números 72, 80 u 82, de Orihuela, según varios biógrafos, frente al convento de San Juan de la Penitencia de las Clarisas y donde naciera también el poeta-panadero Carlos Fenoll Felices. En una fotografía de Manuel Muñoz Hidalgo aparece su casa con el número 80. María de Gracia Ifach dice que era el número 82 Con los años los números de la casa natal han ido cambiando. En la partida de nacimiento no se nombra el número de la casa, conocemos la casa pero no el número que tenía en 1910, lo cual tampoco tiene gran importancia.  Inscrito en el Registro Civil en la Sección 1ª, Tomo 60, folio 188.  La calle pasó a llamarse Antonio Piniés (de segundo apellido Roca de Togores, barón de la Linde), actualmente, en 2012, y por decisión de la corporación municipal ha pasado a recuperar su antiguo nombre, el de San Juan de la Penitencia.
 El 3 de abril 2008, en el Diario Oficial de la Generalitat Valenciana se publicó la licitación de la rehabilitación de la casa natal, lo cual fue un gran logro de la Fundación Cultural Miguel Hernández. Actualmente la casa se encuentra rehabilitada, pero cerrada y sin ninguna función, pendiente de alguna partida presupuestaria. En la acera de enfrente hay otra casa natal abandonada que se debería recuperar para la cultura oriolana,  la del poeta-panadero Carlos Fenoll, nacido el 8 de agosto de 2012.

Era  Miguel hijo de don Miguel Hernández Sánchez (Visenterre), guarda jurado y tratante de ganado, nacido en Redován el 24 de octubre de 1878 en la antigua Travesía Mayor (Actual Calle Colón), (no tenemos constancia de la fecha de su fallecimiento), a quien los negocios no le iban del todo mal, casado en segundas nupcias con  Concepción Gilabert Giner (Concheta) nacida en Orihuela en 1879, que falleció el 16 de diciembre de 1942. Se ocupaba de las tareas de la casa y del cuidado de sus cuatro hijos, Vicente, Elvira, Miguel y Encarnación.  Por orden de nacimiento era el tercer hijo.  Tres días después de nacer fue bautizado en la Parroquia de El Salvador con los nombres de Miguel-Domingo, por haber nacido un domingo, aunque otros dicen que el coadjutor se llamaba don Domingo Aparicio, y les ponía su nombre como segundo nombre a todos los  niños que bautizaba. 
 Era el  tercer hijo, hermanos: Vicente (1906-1979), Elvira (1908-1994), Miguel, Concha, Josefina, Monse y Encarnación (1917-1993). Concha, Josefina y Monse fallecieron en la infancia.
Los «Visenterre», (los abuelos paternos se llamaban Vicente y Vicenta, y un tío, hermano del padre, Vicente) era el apodo de la familia, una familia no pobre, sino humilde y trabajadora, propietario de un rebaño de cabras, leche y cabritos de carne, y era quien comerciaba casi todo el ganado caprino de la zona que enviaba a su hermano Francisco, el Corro, en tren a Barcelona, que era donde vivía éste.  Al fallecer el Corro cambió la vida de Miguel, pues fue sacado de los jesuitas.
 El abuelo materno, Antonio Gilabert Berná era tratante de caballos, posiblemente surtía de caballos a las plazas de toros para la suerte de varas, esta actividad de tratante de caballerías era propia de gitanos, esta familia le llamaban los Mansebos, de etnia gitana, es decir que nuestro poeta tenía más sangre gitana que García Lorca, que no tenía ninguna.
 Don Miguel, según José Luis Ferris (2002, 28), tenía cierto capital y  era un hombre «duro y autoritario, tozudo y conservador, intransigente y de carácter fuerte, marcó siempre las distancias entre él y sus vástagos sin que le temblara el pulso». Mi parecer es que era un padre de su época, de origen labrador, nacido en el último tercio del siglo XIX, tiempos confusos en la política y en la economía con mentalidad práctica de supervivencia.
                           
 Orihuela era una población de economía agrícola, industria del cáñamo y cría del gusano de seda, comercio local y sede de numerosas órdenes religiosas y 33 iglesias, llamada Oleza por Gabriel Miró. Pero antes se llamó Orcelis, Tudmir, Aurariola... Tierra de oro, que este es su verdadera etimología.  Ciudad protegida por la Sierra de La Muela, donde los almorávides coronaron un castillo fortaleza.  La situación política en España de 1910, era la siguiente: Reinado de Alfonso XIII. Presidente del Gobierno don José Canalejas y Méndez desde el 9 de Febrero, hasta el gobierno provisional de don Manuel García Prieto el 12 de noviembre de 1912. El conflicto más importante era la guerra de Marruecos, en el verano de 1909, la movilización de reservistas provocó la Semana Trágica de Barcelona. En 1913 había sesenta y cinco mil soldados destinados en Marruecos... La política local hasta aproximadamente el año 1911 [...] se dio una situación de dominio indiscutido de uno de los partidos turnantes:  El Partido Liberal.
 Volviendo a la infancia de Miguel Hernández, a los cuatro años se trasladó la familia a la calle Arriba, 73 (hoy Miguel Hernández), en un altozano colindando con el monte y la parte de arriba de la ciudad, a espaldas de la iglesia de Santo Domingo.  Hoy convertida en Casa-Museo  desde 1981, adquirida por el Ayuntamiento de Orihuela, podemos comprobar que tiene tres dormitorios, cocina, pozo interior, huerta y corral.    De párvulo tuvo un profesor particular. A los ocho años empieza a asistir a la escuela del Ave María, como alumno pobre, aunque otros opinan que no,  bajo la tutela del seglar granadino don Ignacio Gutiérrez Tienda, porque dependía también de los jesuitas. Iba al colegio y también trabajaba en cuidar el ganado junto a su hermano Vicente, aprende a ordeñar y las particularidades de este desprestigiado oficio; hoy día, los cabreros se llaman: empresarios caprinos.
       El joven Miguel destacó en los estudios por su despierta inteligencia, llamó la atención de los jesuitas, y,  como era  su costumbre seleccionar a los niños que creían idóneos para pertenecer  a la Orden de Jesús,  con trece años le acogieron en el Colegio de Santo Domingo junto a los hijos de las clases acomodadas con una beca para que siguiera la carrera eclesiástica, donde según la tesis doctoral de Odón Betanzos, estudió: Gramática, Aritmética, Geografía y Religión, aunque destacó en Gramática y Religión. A los dos años de haber ingresado en el Colegio, y próximo a cumplir los quince años de edad,  su padre lo necesitaba como jornalero,  se puso a trabajar como repartidor de leche con el ganado de su padre.
Otras versiones aseguran que los jesuitas propusieron al padre ingresar a Miguel en dicha Orden de Jesús, y éste no quiso desprenderse de un hijo/jornalero que necesitaba para seguir en sus negocios ganaderos, puesto que  solamente tenía dos varones para las cabras,  ya que no era oficio para  las mujeres.
 Don Miguel saca a su hijo del Colegio de Santo Domingo en marzo de 1925, y  lo toma como pastor, trabajo  que no le gustaba, sobre todo cuando desde el monte veía a sus antiguos compañeros del Colegio de Santo Domingo. En esta época coincide con la muerte del tío Francisco, apodado Corro, en Barcelona. Se ha desmentido por Ramón Pérez Álvarez que trabajara Miguel en la tienda de textiles El Globo, situado en los Hostales, hasta que un incendio destruyó el local, puesto que este incendio ocurrió el 9 de marzo de 1925, cuando asistía al colegio.

    Miguel persiste en su auto-educación, visita la biblioteca del Círculo de Bellas Artes y Círculo Radical, lee cuanto cae en sus manos y se deja asesorar por lecturas en la biblioteca privada del canónigo don Luis Almarcha, que vivía en la misma calle Arriba. Además jugaba en el equipo de futbol de la calle de Arriba La Repartiora», cuyo himno socoso y burlesco lo creo Miguel. El equipo rival era el C.D. Los Yankees creado en 1933. En sus comienzos, básicamente el equipo estaba formado por: Esteban Sanmartín; Vicente Villagrasa, Chino; Verdú, Bigote, Cremades; Corro, Gramalier, Manuel Soler Muñoz «Lolo», Colomina (padre del escritor oriolano Antonio Colomina Riqueleme) y Segura. Curiosamente, el guardameta era el famoso  «Lolo»  que fuera después portero del Orihuela C.F., a quien Miguel le dedicó una elegía sin hacer muerto, simplemente porque sufrió una brecha en la ceja y se los llevaron en camilla del campo, éste hecho debió inspirar al poeta y por ello le dedictó  «Elegía al guardameta» de estilo encomiástico, A Lolo, sampedro joven en la/ portería del cielo de Orihuela. Lo compara con San Pedro que guarda las Puertas del Cielo.

     Tu grillo, por tus labios promotores,
    de plata compostura,
    árbitro, domador de jugadores,
    director de bravura,
    ¿no silbará la muerte por ventura?

     Esta elegía ha sido ampliamente estudiada por José María Balcells en su ponencia «Variaciones  elegiácas hernandianas» publicada en las Actas del III Congreso Internacional Orihuela&Elche&Alicante, Instituto Alicantino de Cultura Juan Gil Albert, Tomo II, 2012, pp, 253-262. Donde comenta «Miguel Hernández, buen conocedor de las exigencias del paradigma elegíaco, convierte, por arte de birlibirloque literario, al herido en un muerto. Y aun recalca en varias oportunidades que ese suceso tuvo consecuencias fatalas irreversibles…». Advierte en la nota 7 de su ponencia que el poema hernandiano debió inspirar al escritor Salvador García Jiménez para su noveal Coro de aluncinacinados (1975), cuando da por muerto al portero Comba en lance de su torpeza con el larguero.

Miguel se rebela contra la humillante decisión de su padre de excolarizarlo, y con orgullo y tenacidad, y resuelta decisión, bajo una lluvia de tortazos y mal trato a los veintiún años se macha a Madrid, tras ser dado en el Servicio Militar como excedente de cupo, lo cual le desilusionó, puesto que él quería hacerlo para salir del entorno paterno. De 2 de noviembre de 1932, es la data de la carta que escribió a Jesús Poveda, que hacía el Servicio Militar en submarinos de Cartagena, para que le informara de cómo redactar la instancia para ser marino. 


Artículo de mi próximo libro  Miguel Hernández, el poeta del pueblo, (40 artículos).
Ramón Fernández Palmeral.

jueves, 10 de octubre de 2013

Conciertos y exposiciones para celebrar la III edición del Octubre Hernandiano

El Ayuntamiento programa una extensa agenda cultural para recordar la figura del poeta con más de 70 actividades

29.09.2013 | 01:38/ Orihuela/Vega Baja
La Concejalía de Cultura del Ayuntamiento de Orihuela, en colaboración con la Fundación Cultural Miguel Hernández y la Cátedra Miguel Hernández (UMH), ha organizado una extensa programación para celebrar la tercera edición del Octubre Hernandiano con más de 70 actividades culturales en las que participarán hasta 200 artistas.
Los actos comienzan el próximo jueves, 3 de octubre, con un concierto del cantautor Toyo Gabarrús que se celebrará en el Claustro de la biblioteca María Moliner a las 21.30 horas. Al día siguiente se repetirá esta misma actuación a las 20 horas en el auditorio de San Bartolomé.
La programación continúa el 10 de octubre con la proyección del documental «Las tres heridas de Miguel Hernández» en la sala de exposiciones de la biblioteca María Moliner a las 19 horas, mientras que el domingo, día 13, tendrá lugar la IX edición de «Merca de Arte» en la Calle de Arriba entre las 10.30 y las 14.30 horas.
De igual modo, oriolanos y visitantes podrán disfrutar de exposiciones fotográficas como la de «Murales de San Isidro. Homenaje a MH» o «Ramón Sijé. La claridad del aire». Las actividades se completan con el Festival Internacional de Performance, con la presentación del disco de Andrés Martínez Carmona «Oleza: canción y beso» o con la conferencia «Poesía y Humanidad del Poeta Universal. Sembrando vientos», a cargo de Manuel Roberto Leonís.