La Senda del Poeta
llegará a Alicante el domingo 31 por la tarde
Ramón
Fernández Palmeral
El próximo 28 de marzo del actual se
cumplirá los 77 años de la muerte del poeta Miguel Hernández en la enfermería
del Reformatorio de Adultos de Alicante, actuales juzgado de Benalúa, donde
existe un monumentos de chapara que se está oxidando, en recuerdo de que aquí
murió el poeta por tuberculosis o lo dejaron morir por no trasladarlo a tiempo
al Sanatorio de Pota-Coeli en Valencia.
Las autoridades penitenciaras franquitas y el viario D. Luis Almarcha le
obligaron a contraer matrimonio eclesiástico el 4 de marzo de 1942, con un
novio medio moribundo y una novia con un rostro doloroso de Virgen andaluza,
por ser natural de Quesada (Jaén).
Las Senda del Poeta también conocido como Camino
Hernandiano, corresponde a la ruta
GR-125, recorre unos 70 kilómetros en
tres etapas desde la plaza de la Casa-Museo de Miguel Hernández en Orihuela hasta su tumba en Alicante. Este
año esté previsto que la Senda del Poeta llegue el domingo 31 de marzo al
cementerio de Nuestra Señora del Remedio de Alicante, y en la plazoleta de la
Virgen del Remedio donde se encuentra su sepultura, que es la zona de
personajes ilustres alicantinos como Gastón Castelló, Vicente Ramos…, hará una
ofrenda de flores, y un acto poético de fin del camino donde se nombrará la
senderistas del año, y se recitarán poemas del poeta o dedicados a él. Entre
las banderas, que siempre ondea en su sepultura está la tricolor republicana y
claves: rojos, gualdas y morados. Asistirán autoridades y otros muchos
hernandianos.
Está
dirigida principalmente a escolares y jóvenes, aunque la pueden realizar todos
aquellos que estén interesados sin importar la edad. Se hace noche en polideportivos
y otros lugares que habilitan especialmente para la Senda del Poeta. La
Fundación Cultural Miguel Hernández, la Asociación de Amigos de Miguel
Hernández de Madrid y su director Francisco Esteve, el “Institut Valencià de la
Joventut” (IVAJ), la Universidad Miguel Hernández de Elche, la Federación
Territorial Valenciana de Montañismo y los Ayuntamientos de Orihuela, Redován,
Callosa de Segura, Cox, Granja de Rocamora, Albatera, San Isidro, Crevillente,
Elche y Alicante organizan esta Senda del Poeta en homenaje al reconocido
escritor oriolano. Años atrás acudían los concejales Miguel Valor –hoy alcalde- y Pablo Sandoval, concejal de
Juventud.
Esta actividad lúdico deportiva se
inició en el año 1998 y se viene realizando cada año coincidiendo con el fin de
semana más próximo al día 28 de marzo, aniversario de la muerte del poeta. La
Senda se efectúa a pie durante tres días saliendo el viernes por la mañana
desde la Casa Museo de Miguel Hernández en Orihuela y finaliza el domingo por la tarde
ante la tumba de Hernández, mujer e hijo
en el cementerio Nuestra Señora Virgen del Remedio Alicante.
En mazo de 1952 se cumplían los primeros
diez años de su muerte del poeta y también el plazo de la sepultura provisional
para comprar el nicho a perpetuidad, de lo contrario sus restos mortales
hubieran pasado a la fosa común, Josefina acude como siempre a Vicente Ramos y Manuel Molina en la Biblioteca Gabriel Miró
de la calle Terol, ya que la viuda no disponía
de las 2.042 pesetas que costaba la licencia municipal y el nicho en
propiedad, de lo contrario los restos cadavéricos pasarían a la fosa común. Ramos y Molina acuden
a sus amigos de Madrid: Buero Vallejo, Celaya, Aleixandre, Cela, en suscripción
nacional y en dos meses reúnen el dinero para comprarlo. «La respuesta,
felizmente, es masiva y el 29 de enero de 1952- escribe Luis Beresaluze (Biografía de Vicente Ramos, ECU, 2004, p. 65)
pueden presentarse en el Ayuntamiento y pagar los derechos y las
correspondientes 2.042 pesetas». Lo pusieron a nombre de Josefina
Manresa. Parece ser que, ni la propia
Josefina Manresa a través de María de Gracia Ifach en nota (196), p. 334 de su libro “Miguel
Hernández, rayo que no cesa”, Barcelona,
Plaza & Janés, mayo 1975, contaron después la verdad, al decir que le
recaudación del dinero se lo atribuyeron a la iniciativa de Celaya.
Josefina no quiso que se supiera que el nicho fue pagado por suscripción
popular porque ello denigraba en cierto modo la dignidad de ella y de su
familia. Josefina dice en la página 147
de su ya citado libro que «no contaron conmigo para molestar a tantas personas
pidiéndole subvenciones sin necesitad». Entonces me pregunto ¿tenían o no
tenían las 2.042 pesetas?
Transcurrido el tiempo hoy tenemos los hernandianos un lugar de peregrinaje
donde además encuentran enterrados Josefina Manresa Marhuenda, la esposa y
custodia de su legado, y Manuel Miguel el segundo hijo del poeta.
Ramón Fernández Palmeral es autor del
libro: “Miguel Hernández, el poeta de las tres heridas”, de venta en Amazon y
otros libros sobre el poeta y amigos contemporáneos.