Club Información, 27 de enero a las 20 horas. Doctor Rico, 17 Alicante.
MIGUEL HERNÁNDEZ. PASIONES, CÁRCEL Y MUERTE DE UN POETA
Con ocasión del LXXV aniversario de su muerte en 2017, la figura y
la obra de Miguel Hernández (1910-1942) vuelven a ser conmemoradas para
celebrar no sólo al poeta, sino también al hombre. Y esta efeméride
nos ha servido para recuperar una obra de referencia, la biografía que
sobre el escritor publicara en 2002 el investigador y novelista José
Luis Ferris. ´Miguel Hernández. Pasiones, cárcel y muerte de un poeta´
se publica ahora enriquecida con nuevos testimonios, como los aportados
por cartas hasta hace poco desconocidas de Vicente Aleixandre o de
Josefina Manresa, su mujer.
Esta obra, que ya era de referencia obligada para lectores y
estudiosos, es una edición ampliada que aparece en vísperas de un
aniversario para el que se programarán distintas jornadas y seminarios
que pretenden dar a conocer más profundamente, sin tópicos, al poeta
de Orihuela.
ENTREVISTA AL AUTOR Diaro Información de Alicante
La obra de José Luis Ferris sobre el poeta ha sido unánimemente
reconocida como la más completa y valiosa, un libro que deshace los
tópicos y arroja luz definitiva sobre la breve y apasionada trayectoria
del autor de ´El rayo que no cesa´. Recuerda a las mujeres que
inspiraron sus versos de amor, los recelos de Lorca, Cernuda o Alberti, o
las circunstancias del proceso que lo llevó a la cárcel, sin olvidar
las responsabilidades por su fallecimiento prematuro. Ferris desvela en
este nuevo libro que ahora publica la Fundación José Manuel Lara los
misterios que rodearon el itinerario del poeta pastor de Orihuela en una
aproximación audaz y limpia de falsas leyendas, que sitúa en su justo
lugar a aquel joven cuyo compromiso con la vida, en todas sus
manifestaciones, le llevó a cantar con igual entrega la fuerza del
deseo, la plenitud de la naturaleza y la honda grandeza del sufrimiento
humano.
¿Qué aporta esta nueva edición de la biografía de Miguel Hernández?
El poeta de Orihuela, pese a su desaparición física hace 75 años, es un órgano literario que no
ha dejado de latir, de crecer y de expandirse entre cientos de miles de lectores. Desde la primera
aparición de este libro en 2002 han pasado cerca de quince años, quince años de publicaciones y
eventos en torno al autor de ´Perito en lunas´ en los que han
aparecido nuevos datos, algunos inéditos, reveladores testimonios,
numerosas tesis doctorales, monografías y estudios de diversa índole.
Lo que aporta esta nueva edición, en primer lugar, es una puesta al día, una actualización de sus
contenidos y una confirmación, con más y mayores argumentos, de
las hipótesis que la sujetaban. Por concretar, la aparición en la
última década de epistolarios inéditos -la correspondencia entre el
hispanista Dario Puccini y la viuda de Hernández, las misivas de
Vicente Aleixandre a Miguel y Josefina Manresa y la edición completa de
las cartas del poeta a su esposa-, así como de los diarios de guerra
del diplomático chileno Carlos Morla Lynch. Todo ha servido para
reconstruir con razones más firmes el entorno amoroso de ´El rayo que
no cesa´ y para documentar minuciosamente los últimos días de
Hernández en Madrid al acabar la guerra.
¿Cree que la conmemoración del LXXV aniversario de su muerte va a ayudar a conocer mejor al poeta, al hombre? ¿Puede adelantarnos, como investigador de
referencia y conocedor de la vida y obra de Hernández, algunos de los
actos programados para el 2017?
Por supuesto que todo lo que suponga un regreso al poeta, a su vida y, especialmente, a su obra,
es positivo. La realización del IV Congreso Internacional sobre Hernández va a suponer otro
acercamiento importante y otra labor de recuperación. Llevará el
título de ´Miguel Hernández, poeta en el mundo´. Este encuentro se
dividirá en tres bloques principales que se centrarán en analizar la
imagen exterior del poeta. Uno de ellos profundizará en el conocimiento
de la recepción de su obra en los países hispanoamericanos, otro se
ocupará de su difusión en el resto de países a través de las
traducciones, con atención especial a su obra en Europa, y un tercero
se dedicará a la divulgación hernandiana en el siglo XXI a través de
internet y otras tecnologías. Son numerosos los jóvenes investigadores
que en la última década se han visto atraídos por la obra de Miguel
Hernández y hay que facilitar un espacio para que cuenten esa
experiencia. De igual modo, a las iniciativas generadas desde el mundo
académico hay que sumar otras de desde diversos ámbitos y disciplinas
(el arte, el teatro, la música y la literatura) que también se están
moviendo para la conmemoración del 2017.
¿Quedan muchas sombras en la biografía de Miguel Hernández?
Siempre hay aspectos de la vida de la persona que estudiamos en profundidad que no quedan
muy claros. Nos faltan datos, testimonios, pruebas que confirmen lo que muchas veces es mera
intuición. Me gustaría haber podido leer el largo centenar de cartas que Josefina escribió a Miguel
durante la guerra y en los años de cárcel, pero no se conserva
ninguna. Creo que alguien aconsejó a la mujer del poeta que las quemara
para que no se conociera esa otra cara de la relación. Me hubiera
gustado conocer los proyectos que el poeta se llevó con su vida. En
fin, hay cosas que por mucho que investiguemos nunca se podrán saber.
¿Podemos llevarnos alguna sorpresa al leer esta nueva edición? ¿Se desmonta algún tópico,
alguna leyenda urbana?
El trabajo de rescate y desescombro, de distanciamiento de los tópicos que hicieron de
Hernández una bandera, un mártir y un triste poeta-cabrero fue la tarea de la que partió esta
biografía desde su primera edición. Devolver a Miguel Hernández a
su estado natural, a su condición de militante apasionado de la vida,
limpio de leyendas, fue siempre mi objetivo. Ya desmontamos el tópico
de la falsa pobreza y el de su limitada formación cultural. Queda claro
que no tuvo la preparación ni los medios de que gozaron los
intelectuales con los que se codeó en Madrid, pero él supo superar
perfectamente esa carencia. Iba con su carácter, con su
temperamento, el enorme afán de superación que le define, y eso se
ve en su enorme amor a la literatura. Miguel creía en él, en sus
posibilidades, y no cejó jamás en el empeño de hacerse
oír a pesar de los obstáculos que le pusieron en vida unos y
otros. Era obstinado y tenía talento. Eso le bastó para llegar a donde
llegó.
En esta edición de ´Pasiones, cárcel y muerte de un poeta´ vamos a
encontrarnos con una nueva propuesta de lectura de ´El rayo que no
cesa´ a partir de iluminadores datos biográficos; vamos a profundizar
en la polémica relación de Miguel con los compañeros que no lucharon,
como él, en el frente durante la contienda civil; vamos a conocer
nuevos datos sobre sobre su viaje a la URSS en 1937, sobre su
participación en las Misiones Pedagógicas, sobre sus numerosas
detenciones y su estancia en prisión. Vamos a disponer de pruebas y
testimonios sobrados para demostrar el abandono que sufrió el poeta por
parte de amigos de generación al acabar la Guerra Civil.
Acerca de las mujeres que formaron parte de la vida de Hernández, especialmente de las que
tuvieron cierto protagonismo en su obra, ¿hay nuevos datos? ¿Se puede sostener la idea de que
Josefina Manresa fue el gran amor del poeta?
En este libro se aclaran muchos aspectos personales de Miguel; algunos son determinantes para
aportar una nueva lectura de ´El rayo que no cesa´, el libro de
sonetos de amor del oriolano. Partimos de que Josefina ocupa de modo
amplio y prioritario su vida afectiva, y de ello dan cuenta la mayor
parte de sus poemas de amor y una correspondencia de más de trescientas
cartas. Esto no impide aceptar, como ya sabemos, que hubo otras mujeres
en su vida, desde el primer amor adolescente que encarna Carmen Samper
Reig -a quien conoció en el ambiente de la tahona de Carlos Fenoll y a
quien dedicó algunas prosas y varios poemas-, a María Zambrano, María
Cegarra y, sobre todo, Maruja Mallo, artista con la que compartió
experiencias íntimas y artísticas entre mayo y octubre de 1935.
Josefina fue la ´novia oficial´ y, tras un tiempo de crisis, la mujer a la que regresó para convertirla
en su esposa y en madre de sus hijos. Iniciaron un noviazgo en 1934
con bastantes reparos, ya que la muchacha aldeana tenía unos principios
católicos y morales muy asumidos que no permitieron que la relación
fuera más allá de paseos puritanos e inocentes caricias. Cuando
Hernández se instala en Madrid en 1935 y se rodea de nuevas amistades y
de un ambiente de libertad, sin atavismos religiosos, se distancia de
Josefina y rompen el compromiso. Es en ese tiempo cuando la pintora
Maruja Mallo entra en su vida (decisiva para entender los poemas del
libro citado) y cuando recupera la relación con una vieja amiga, la
poeta María Cegarra. Las tres están presentes en esa obra, pero en las
proporciones que se detallan en la biografía, dando el protagonismo a
quien, en esas fechas, lo tenía con pleno derecho.
¿Qué imagen le gustaría que quedase del poeta, del hombre y del artista?
La del hombre íntegro y la del poeta necesario. He dicho muchas veces que no quisiera
encontrarme nunca ante dilemas como los que Miguel Hernández
sufrió. Mantener su dignidad, su integridad ideológica, su firmeza
moral, entraba en directa oposición con salvar su vida y con la
posibilidad directa de salir de prisión y de estar junto a su mujer y
su hijo. Lo que, por un lado, le pedía su pensamiento y su conciencia,
por otro se lo negaba su corazón. Creo que eso minó sobremanera su
salud, debilitó su cuerpo, y esa debilidad fue la que aprovecharon
algunos para rematar al poeta.
Por otro lado, su poesía tiene una vigencia estremecedora. Como escribí hace unos años en un
libro para niños, "Miguel fue, por encima de todo, el gran poeta de
la vida. Las palabras que escribía en un papel, los versos que ponía
en su cuaderno, salían de su cabeza, es cierto, pero sobre todo
brotaban de su alma. Su poesía era tan verdadera que, más de un siglo
después de que el poeta viniera al mundo, aún atrae a los lectores de
cualquier edad, de cualquier color, de cualquier familia y de cualquier
país. Miguel Hernández se marchó hace muchos años, pero gracias a
ti, a lectores como tú, su voz se escucha, nueva y limpia, cada día".
EL AUTOR
José Luis Ferris (Alicante, 1960) es licenciado en Filología
Hispánica por la Universidad de Salamanca y doctor en Literatura
Española por la Universidad de Alicante. Ha publicado los poemarios
´Piélago´ (1985), ´Cetro de cal´ (1985), ´Niebla firme´ (1989) y
´Poemas del agua y de la noche´ (2010), así como las novelas ´Bajarás
al reino de la tierra´ (1999, Premio Azorín), ´El amor y la nada´
(2000) y ´El sueño de Whitman´ (2010, Premio Málaga). Es autor de
relatos infantiles y de tres obras de aproximación al mundo de Miguel
Hernández para niños y jóvenes. En calidad de biógrafo, además del
trabajo dedicado al poeta de Orihuela, ha publicado ´Maruja Mallo. La
gran transgresora del 27´ (2004) y ´Carmen Conde. Vida, pasión y verso
de una escritora olvidada´ (2007).
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EL POETA QUE NO CESA
El escritor alicantino José Luis Ferris desmonta los tópicos de
poeta pastor y sin formación, analiza sus malas relaciones con Lorca y
Alberti, y desvela su amor por el cine en la biografía revisada de
Miguel Hernández
CRISTINA MARTÍNEZ (INFORMACIÓN-25 noviembre 2016)
El escritor alicantino José Luis Ferris ha revisado, modificado
datos y ha añadido 150 páginas a su biografía de Miguel Hernández
escrita en 2002. El resultado se presentó ante numerosos medios de
comunicación en Madrid, la ciudad que recibió de manera hostil al poeta
en 1931, pero en la que nació literariamente y en la que conoció a los
grandes de la literatura del momento.
Miguel Hernández. Pasiones, cárcel y muerte de un poeta
(Fundación José Manuel Lara) pretende acercar al público «la figura del
poeta más que su vida». Por eso, apunta, «empecé a trabajar la figura de
Hernández para que se fuera a su obras, que se conociera al poeta
beligerante, instrumentalizado muchas veces tanto por la izquierda como
por la derecha y que podamos conocer al poeta completo, al poeta herido
por la muerte de un hijo, al poeta de las cárceles, reposado, con 30
años pero de vuelta de muchas cosas y que en ese momento de pausa y
ausencias escribe ese conjunto maravilloso de poemas».
Para Ferris, lo importante es que se conozca «la cantidad de poemas» que escribió entre El rayo que no cesa y Cancionero de ausencias.
Cuando el cantautor Enrique Contreras le preguntó qué poema podía
musicar de Miguel Hernández que nadie hubiera cantado antes, Ferris le
dijo Me sobra el corazón, «un poema desconocido pero que está ahí, en las obras completas. Por eso escribí la biografía de Miguel».
El autor cree que con su trabajo intenta «sacar del escombro» la
imagen del «poeta cabrero o indocumentado, autodidacta y que se dedicó
al ganado». Lo dice con conocimiento de causa tras un arduo proceso de
documentación y también gracias a las investigaciones que se han ido
publicando. «Su padre tenía las mejores cuentas de Orihuela, un gran
negocio de exportación de gana do, fletaba barcos parta transportar
cabras». Es decir, que «nunca hubo pobreza ni hambre en su vida, hubo
austeridad» y que cuando abandonó el colegio fue a los 15 años porque
murió el hermano de su padre y tuvo que ayudarle con el ganado. «Haber
estado diez años escolarizado en esa época era una barbaridad» y cuando
sale «ya sabía latín y francés».
Entre sus aportaciones a este libro, Ferris da una visión «más
profunda de su relación con Vicente Aleixandre, tras la publicación del
epistolario del escritor con el poeta y con Josefina Manresa. «Se llega a
la conclusión de que en la selección de los 29 poemas y el orden de
El rayo que no cesa fue su consejero».
No fue tan fluida y satisfactoria su relación con otros grandes
poetas de la Generación del 27, como Lorca y Rafael Alberti. «Hay una
parte de los autores del 27 que lo desprecian porque hay que reconocer
que es una magnífica generación literaria pero también es un grupo de
burgueses a veces insoportables y había mucho clasismo». Lorca, afirma,
«no soportaba a nadie a su lado que no vistiera de punta en blanco. ¿Qué
iba a decir de Miguel que iba siempre con su ropa humilde? De hecho
dijo que le tenía alergia a ese chico de Orihuela y que procuraran no
invitarle si iba a estar Miguel». Y también se llevó mal con Alberti
«porque tenían conceptos diferentes de la guerra, uno en el frente y
otro desde su casa». Para el autor, el comportamiento de ambos con
Miguel fue «bastante injusto», pero él fue «el poeta del pueblo, que
escribía con un gran nivel literario y grandes metáforas, pero el pueblo
lo entendía, cosa que otros poetas no consiguieron porque escribían
para el pueblo como si fuera estúpido».
Esta biografía analiza también la importancia de las figuras de la
pintora Maruja Mallo, fundamental en su vida, la escritora Maria Cegarra
y Josefina Manresa, su esposa, «que nunca le entendió como poeta».
Ferris desgrana el esquema emocional de ese libro y los poemas dedicados
a cada una de estas tres mujeres.
En 2017 se conmemoran los 75 años de su muerte, pero Miguel
Hernández «sigue dando juego, siguen apareciendo poemas inéditos», como
el que hace días publicó INFORMACIÓN. El escritor espera que los actos
que se programen, como el congreso internacional organizado por el
Instituto Juan Gil-Albert en el que él participa, sean un éxito. «Yo lo
que pido es que se deje hacer, que si hay una compañía de teatro joven
que quiere estrenar una obra y se le quiere homenajear se le deje
trabajar, que no se pidan derechos imposibles que impidan iniciativas
culturales».
«Es lógico que se cobren derechos de autor» porque «durante mucho
tiempo sufrió una explotación y un expolio indiscriminado, incluso
Josefina, que era muy generosa, le cedió a Serrat los poemas para el
disco del 73 a cambio de un tocadiscos para poder escucharlo... eso
tampoco es».
Y si hay que hablar del futuro, Ferris se decanta por «hacer una
biografía de lo que hubiera pasado con la vida de Miguel si no hubiese
muerto, qué proyectos tendría... Hay algo que no se conoce y es que se
quería dedicar al cine, tenía un proyecto. Qué pasó cuando murió fuera y
dentro de España, cómo se le despreció y luego se le intentó encumbrar.
Lo que está detrás de Miguel está aún por trabajar. La carpeta desde
hoy vuelve a llenarse de documentos para empezar a investigar de
nuevo».