Miguel Hernández
El texto de la doctora puertorriqueña Mercedes López-Baralt aborda el permanente diálogo intertextual que caracteriza su poesía
La doctora puertorriqueña Mercedes López-Baralt acaba de publicar un
nuevo libro titulado “Miguel Hernández, poeta plural”, cuya presentación
oficial se celebrará el martes, 7 de febrero, a las 7:00 p.m., en la Academia Puertorriqueña de la Lengua,
ubicada en el tercer nivel del Cuartel de Ballajá, en el Viejo San
Juan. El doctor Ferdinand Padrón, poeta y catedrático de la Universidad
de Puerto Rico en Utuado, estará a cargo de la presentación del libro.
Este libro, según se informó en comunicado de prensa, aborda el permanente diálogo intertextual que caracteriza la poesía de Miguel Hernández, y que resulta en un originalísimo mestizaje retórico que entrevera tradición y vanguardia. El desencaje entre retóricas diversas, que tantas veces se da en un mismo poema, resulta en una tensión fecunda para la sorpresa, elemento indispensable de la poesía, como en su día lo señaló Edgar Allan Poe y más tarde lo explicara Claudio Guillén. Sorpresas que subvierten cada etapa: la pastoril es culta, la culta es oral, la amorosa violenta, la bélica se torna antibélica, la petrarquista despierta la sexualidad más encendida, la clásica alberga a la vanguardia. Es precisamente esta dimensión de la obra hernandiana, tan oscilante dentro de su coherencia como irreductible al tópico, lo que la engrandece, convirtiendo a Miguel Hernández en un poeta plural.
Este libro, según se informó en comunicado de prensa, aborda el permanente diálogo intertextual que caracteriza la poesía de Miguel Hernández, y que resulta en un originalísimo mestizaje retórico que entrevera tradición y vanguardia. El desencaje entre retóricas diversas, que tantas veces se da en un mismo poema, resulta en una tensión fecunda para la sorpresa, elemento indispensable de la poesía, como en su día lo señaló Edgar Allan Poe y más tarde lo explicara Claudio Guillén. Sorpresas que subvierten cada etapa: la pastoril es culta, la culta es oral, la amorosa violenta, la bélica se torna antibélica, la petrarquista despierta la sexualidad más encendida, la clásica alberga a la vanguardia. Es precisamente esta dimensión de la obra hernandiana, tan oscilante dentro de su coherencia como irreductible al tópico, lo que la engrandece, convirtiendo a Miguel Hernández en un poeta plural.