Sinopsis:
Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com
miércoles, 6 de mayo de 2015
He recibido un CD de las actas: "Miguel Hernández vuelve a Jaén", 28.29 de octubre de 2014
He recibido un CD enviuado por Rafael Alarcón Sierra,coordinador del I Seminario Internacional Miguel Hernández celebrado la Universidad de Jaén, 2014, de las Actas cuyo índice adjunto.
Editado por Publicaciones de la Univerdidad de Jaén. Vicerrectorado de Extensión Universitaria, Departamento y proyectos Intitcuinla. telefono 953 212 355 y fax 953 212 235. servpun@ujaen.es
ISBN 978-84-8439-898-1
Índice
Presentación. Manuel Parras Rosa......................................................................................4
Introducción. Rafael Alarcón Sierra.....................................................................................5
Miguel Hernández: El poeta periodista por tierras de Andalucía.
Juan Cano Ballesta..............................................................................................................7
Trazos de Miguel de Unamuno en Miguel Hernández. José María Balcells..........................21
El legado de Miguel Hernández en Quesada y Jaén. Francisco Escudero Galante .............. 35
Aleixandre y Hernández, cara a cara, carta a carta. Confesiones íntimas
en un epistolario privado. Jesucristo Riquelme ..................................................................49
En torno a El hombre acecha: publicación, recepción, proceso de escritura.
Carmen Alemany................................................................................................................72
La obra dramática de Miguel Hernández en el contexto del teatro en verso.
Dámaso Chicharro Chamorro.........................................................................................100
"Sonoras manos oscuras y lucientes": metamorfosis hernandiana de un
motivo literario y artístico. Rafael Alarcón Sierra...........................................................129
"Me llamo barro aunque Miguel me llame": lo popular en la obra de
Miguel Hernández. Cristina Castillo Martínez.................................................................150
La mirada del insomne: presencias de lo siniestro en la poesía de
Miguel Hernández. Julio Ángel Olivares Merino.............................................................169
El sueño de justicia en Miguel Hernández. Sobre el poema "El hambre".
Genera Pulido Tirado........................................................................................................214
Homenajes artísticos a Miguel Hernández durante la posguerra.
Jesús Rubio Jiménez.........................................................................................................221
Aniversarios y celebraciones: Miguel Hernández y su lenguaje
conmemorativo. Jesús Carlos Rovira..............................................................................267
lunes, 4 de mayo de 2015
Rosal “sana las heridas” de Miguel Hernández recordando su figura a ambos lados de la frontera
Rosal “sana las heridas” de Miguel Hernández recordando su figura a ambos lados de la frontera
» El director de la Casa de la Cultura del
municipio y estudioso de su figura, el escritor isleño Augusto Thassio,
impulsa el homenaje al poeta alicantino en tierras lusas y onubenses.
29 abril 2015
P.C.G. La última etapa de la vida de Miguel Hernández (1910-1942) no fue precisamente un camino de rosas. Apresado en tierras portuguesas, cerca de Moura, el día 3 de mayo de 1939, comenzó una ruta carcelaria cuya primera parada fue el municipio onubense de Rosal de la Frontera.
Sin embargo, hoy la cárcel que privó de libertad al poeta alicantino es
precisamente todo lo contrario, un canto aperturista a la cultura y un
homenaje a su figura: “La buena noticia está precisamente ahí, en que un
lugar de oscuridad como es una cárcel se haya transformado primero en biblioteca pública con libros de poesía y luego en centro de interpretación de la vida de Miguel Hernández
y su paso por Rosal y por Huelva. Es, por tanto, un homenaje a su
figura y a la de todos los poetas y cómo no al pueblo de Rosal de la
Frontera”, explica el poeta y director del centro Augusto Thassio.
La carta que el poeta envió a su mujer Josefina contándole su detención y que se encuentra en el centro.
En cualquier caso, en esos escasos cinco días que pasó en Rosal no faltaron las anécdotas positivas y las historias conmovedoras de su paso por Huelva como la que protagonizó con el preso con el que compartió celda y su mujer: Francisco y Manuela. Tal y como relata Augusto, Manuela hablaba con su marido a través de un ventanuco por el que también le pasaba una talega con comida. Un día Francisco le pide a Manuela más comida para “un poeta, un escritor de esos que escribe libros”. Manuela le contesta que tienen tres hijos y que la cosa está difícil y el reo le dice que “este tiene más hambre que todos los niños de Rosal de la Frontera juntos”.
La propia Manuela relató a Thassio que tenían un chorizo colgado del techo de la cocina al que sus hijos llamaban San Isidro, como el patrón de Rosal de la Frontera y les decía: “el día que salga papá nos lo comemos”. Cada día Manuela preguntaba al vigilante de la prisión cuándo iban a trasladar a su marido, hasta que uno de esos días el vigilante le contesta que “se llevan al escritor a la prisión provincial”. Manuela cortó entonces un chorizo y lo envolvió en papel de estraza que entregó a Miguel a su salida de la prisión, los dos se fundieron en un abrazo y el poeta le correspondió con un poema que había escrito en su celda de Rosal, precisamente también sobre un papel de estraza. Manuela no sabía leer y le preguntó a Miguel Hernández, quien le contestó que solamente eran unas líneas agradeciéndoles a ella y su marido todo el cariño que le habían demostrado en los cinco días que estuvo en la cárcel de Rosal.
Asimismo, Miguel Hernández, le prometió que cuando saliera volvería y pasearían por las calles de Rosal. Ese poema que el alicantino escribió a la mujer de Francisco por sus atenciones se encuentra actualmente en paradero desconocido. Tal y como relata el también escritor, estudioso y colaborador de la Fundación Cultural Miguel Hernández de Orihuela, Ramón Fernández Palmeral: “Miguel escribió el poema para su compañero de celda, un contrabandista al que creo que llamaban ‘El guapo’ y lo entregó a su mujer. Esta se lo prestó a un maestro y desgraciadamente se perdió”.
Fernández Palmeral es autor del libro Miguel Hernández, el poeta del pueblo, donde se recoge la trayectoria del dramaturgo de Orihuela y su paso por la provincia de Huelva. Una obra que recoge lo rocambolesco de los procesos judiciales a los que fue sometido Miguel Hernández “por su adhesión a la rebelión militar. Había una ley de responsabilidades políticas con la que el régimen franquista condenó a todo aquel que fuera contra el movimiento nacional. Miguel defendió las ideas propias de la república, entre otros en su poemario Viento del Pueblo y fue un icono de la resistencia republicana, el paradigma de los presos de la república y un líder en las cárceles”.
Tanto fue así que, en aquella época como eran los presos los que llevaban el papeleo y los temas burocráticos, los atestados que se hicieron en Huelva para que el gobernador civil los mandara al juzgado Madrid y al director general de Seguridad en Madrid, “se perdieron. En ellos se exponía que lo que Miguel Hernández había cometido no era un delito, sino una infracción administrativa por paso clandestino de la frontera.
También recoge Fernández Palmeral en su obra, en la que se desmienten algunos mitos sobre el periplo carcelario del poeta y dramaturgo alicantino, que “Sánchez Maza, Ridruejo y Cossío intercedieron ante Franco que era el encargado de firmar la ejecutoria en los Consejos de Guerra contra Miguel Hernández, advirtiéndole de que iba a tener otro caso como el de Federico García Lorca y se le iba a echar la prensa internacional encima. Por eso lo condenó a 30 años que luego se redujeron a 20″, explica Ramón Fernández.
Miguel pasó de Rosal de la Frontera a la prisión provincial de Huelva, de allí a Sevilla y de ahí a Madrid, Alicante, Madrid otra vez y Palencia, donde sufrió una pulmonía, y continúo su vuelta con alguna parada más en otras cárceles españolas hasta llegar de nuevo a Alicante donde murió en 1942 de tuberculosis, fiel a sus ideas y sin recibir asistencia médica en la prisión.
Rosal, Miguel Hernández y Portugal
El merecido homenaje de Rosal de la Frontera al poeta de Orihuela se materializa en un busto de bronce con alas, obra del escultor Alberto Germán Franco ubicada muy cerca del lugar en el que fue entregado el 4 de mayo de 1939 y en el centro de interpretación impulsado por Augusto Thassio y el Ayuntamiento de Rosal.
Para Fernández Palmeral, el Centro de Interpretación de Rosal de la Frontera es muy buena idea porque “contribuye a dar a Miguel Hernández una proyección nacional e internacional. Una de las líneas de la fundación es llevarlo a las aulas y que sean los jóvenes los que impulsen su figura, para que se rescate del olvido en determinados sitios y que se conozca la historia y la injusticia de su encarcelamiento”.
El pasado 28 de marzo se conmemoraba el aniversario de la muerte del dramaturgo considerado de la generación del 27, aunque pertenecía por edad a la del 36, con un encuentro de poetas andaluces, marroquíes y portugueses, impulsado también por Thassio en el que se recitaron poemas y se contó con la presencia de la nuera de Miguel Hernández, Lucía Izquierdo, quien también estuvo presente en el centenario de su nacimiento en 2010.
Asimismo, Augusto está promoviendo el homenaje al poeta alicantino en tierras portuguesas donde “ya hay un monolito y un paseo en Vilaverde de Fiscaio, un paseo en Santo Aleixo, primer pueblo que pisó Miguel, y en Moura los jardines de un antiguo palacio llevan su nombre”.
Con los reconocimientos del municipio onubense y el impulso en tierras portuguesas, Rosal de la Frontera “sana las heridas” de Miguel Hernández y le rinde merecido homenaje a su figura en Huelva.
Publicado en Huelva. Buenas noticias
jueves, 30 de abril de 2015
76 años de la detención de Miguel Hernández en Rosal de la Frontera
El próximo 3 de mayo de 1938 en cumple 76 años que la policia portugues detuvo a Miguel Hernández, cerca de Moura, pasado Santo Aleixo, por paso clandestino de frontera.
La 1ª Cárcel donde estuvo el poeta Miguel Hernández se encuentra en Rosal de la Frontera, en la Avenida de Portugal. Se trata de un edificio que tiene un gran valor histórico, ya que en él comenzó el viacrucis personal del poeta, cuando una vez acabada la guerra, intenta escapara a pie por la frontera portuguesa.
Como Miguel Hernández no encuentra refugio seguro ni trabajo en Sevilla, se marcha a Cádiz y Jerez, buscando a Pedro Pérez Clotet (natural de Villaluenga del Rosario y director de la revista Isla, se conocieron en el 33 con motivo de la publicación de Perito en lunas) pero no lo encontró, por lo que decidió seguir su camino hacia Huelva para buscar al abogado Diego Romero Pérez en Valverde del Camino (Huelva) según su libro M.H. en mi recuerdo (Camas, 1992), quien era el contacto pensado por Miguel para pasar a Portugal. Un camión le lleva de Huelva a Aroche, allí cruza el río Rivera de Chanza, llega a Santo Aleixo, vende un traje y el reloj que le regaló Vicente Aleixandre para su boda, le dan unos escudos, este mismo comprador lo debió denunciar a la policía. Se interna hacia Moura y aquí es donde comienza la historia común del Rosal de la Frontera y Miguel Hernández, cuando el 4 de mayo de 1939 tras ser detenido en esta localidad portuguesa por la policía salazarista, fue trasladado al calabozo del puesto fronterizo de Rosal de la Frontera (Huelva).
Antonio Márquez Bueno, agente de segunda clase del Cuerpo de Investigación y Vigilancia, y a la sazón jefe del puesto de Rosal de la Frontera (Huelva), supo desde un principio que iba a prestar un valioso servicio a la patria y ordenó a Rafael Córdoba, agente auxiliar interino, que se pusiera a la máquina de escribir. Tenía ante sí a un joven asustado que acababa de entregarle la policía portuguesa por haber cruzado la frontera de manera clandestina. Llevaba poco consigo: un billete de veinte escudos, una moneda de cinco centavos y cuatro más de diez; el libro “La destrucción o el amor” con una carta de su autor, Vicente Aleixandre, y un auto sacramental titulado “Quién te ha visto y quién te ve, y sombra de lo que eras” del que él mismo era autor.
Rafael Córdoba comenzó a teclear: “En la villa de Rosal de la Frontera, siendo las doce horas del día 4 de mayo de 1939, Año de la Victoria, comparece el que dice ser y llamarse Miguel Hernández Gilabert, de 28 años de edad, casado en la que fue zona roja, de profesión escritor, e hijo de Miguel y de Concepción, natural de Orihuela (Alicante) y con domicilio en Cox (Alicante)”.
Llevaba Miguel en su poder 20 escudos y unos centavos, dos salvoconductos, el libro de poesía de Aleixandre La destrucción o el amor y una carta del propio Vicente, más un ejemplar de el Auto Sacramental “Quien te ha visto y quien te ve, y sombra de lo que eras”. El día 6 de mayo escribe a Josefina notificándole su detención, quitando hierro al asunto ya que fue maltratado por sus guardianes.
El 9 de mayo está en la prisión Provincial de Huelva y le conducen a Madrid, según el documento del Gobernador Civil de Huelva.
En Rosal de la Frontera estuvo cinco días, le pegan y le torturan hasta orinar sangre. Según Enrique Cerdán Tato, hubo un testigo Francisco Guapo que comparte celda con Miguel, preso por contrabando, y gracias a la mujer de éste, Miguel recibió comida y le lavó la ropa, Miguel le dedicó un poema "Hombre encarcelado" en un papel de estraza con un dibujo del barco que pensaba coger en Lisboa, actualmente éste se encuentra inédito y en paradero desconocido.De allí es trasladado a la Prisión de Huelva, de Huelva a la prisión de Sevilla como transeúnte, unos días, y de Sevilla a la cárcel de Torrijos, a la que llegó el 18 de mayo de 1939.
Por una serie de descoordinación gubernamental y judicial lo ponen en libertad de 15 de septiembre 1939, no se ha demostrado documentalmente lo que María Teresa León y Pablo Neruda contaron sobre la mediación del cardenal Baudrellat con Franco. Puesto que de haber sido cierto, la segunda detención, una semana después no se hubiera llevado a efecto.
En aquellos años, acabada la guerra, la Fuerzas del Orden actuaban como verdaderos Fiscales, y con suma dureza interrogaban a los detenidos, amparados por la leyes franquistas, y estaba bien visto ante los jueces que el detenido fuera interrogado a conciencia y sin presencia de abogados, ya que la presencia del abogado en la primeras diligencias, aparece ya en España a partir de la Constitución de 1978. Sin abogados presentes, las declaración de los detenidos eran “durísimas” y los jueces las iban a tomar como verdaderos testimonios sin lugar a dudas.
La prisión en la que estuvo el poeta es ahora la Casa de la Cultura "Miguel Hernández", donde está recreada la celda y también se ha instalado un centro de interpretación de su vida y obra.
El 12 de junio de 2010, la nuera del poeta, Lucía Izquierdo y la Presidenta del Parlamento Andaluz, Fuensanta Coves y el alcalde de Rosal de la Frontera, Ramón Márquez, descubrieron un monolito en granito gris custodiado por dos olivos. Y en segundo lugar una escultura con el busto del poeta realizado y donado al pueblo de Rosal por el joven escultor aracenense Alberto Germán Franco, con la presencia de dos alas rotas como símbolo de la libertad.
publicado en Huelvapedia
La 1ª Cárcel donde estuvo el poeta Miguel Hernández se encuentra en Rosal de la Frontera, en la Avenida de Portugal. Se trata de un edificio que tiene un gran valor histórico, ya que en él comenzó el viacrucis personal del poeta, cuando una vez acabada la guerra, intenta escapara a pie por la frontera portuguesa.
Descripción
La última etapa de la vida de Miguel Hernandez fue un cúmulo de despropósitos que convirtió su existencia en un auténtico calvario. Al desánimo personal (su primer hijo, Manuel Ramón, había muerto en otoño de 1938) se unía el desánimo colectivo (la guerra estaba prácticamente perdida, y el miedo a la muerte y a la represión era más que patente). Es una época de amargura, tan sólo aliviada por la noticia del nacimiento de su segundo hijo Manuel Miguel. Su via crucis personal comienza cuando, finalizada la guerra, intenta escapar a pie por la frontera portuguesa.Como Miguel Hernández no encuentra refugio seguro ni trabajo en Sevilla, se marcha a Cádiz y Jerez, buscando a Pedro Pérez Clotet (natural de Villaluenga del Rosario y director de la revista Isla, se conocieron en el 33 con motivo de la publicación de Perito en lunas) pero no lo encontró, por lo que decidió seguir su camino hacia Huelva para buscar al abogado Diego Romero Pérez en Valverde del Camino (Huelva) según su libro M.H. en mi recuerdo (Camas, 1992), quien era el contacto pensado por Miguel para pasar a Portugal. Un camión le lleva de Huelva a Aroche, allí cruza el río Rivera de Chanza, llega a Santo Aleixo, vende un traje y el reloj que le regaló Vicente Aleixandre para su boda, le dan unos escudos, este mismo comprador lo debió denunciar a la policía. Se interna hacia Moura y aquí es donde comienza la historia común del Rosal de la Frontera y Miguel Hernández, cuando el 4 de mayo de 1939 tras ser detenido en esta localidad portuguesa por la policía salazarista, fue trasladado al calabozo del puesto fronterizo de Rosal de la Frontera (Huelva).
Antonio Márquez Bueno, agente de segunda clase del Cuerpo de Investigación y Vigilancia, y a la sazón jefe del puesto de Rosal de la Frontera (Huelva), supo desde un principio que iba a prestar un valioso servicio a la patria y ordenó a Rafael Córdoba, agente auxiliar interino, que se pusiera a la máquina de escribir. Tenía ante sí a un joven asustado que acababa de entregarle la policía portuguesa por haber cruzado la frontera de manera clandestina. Llevaba poco consigo: un billete de veinte escudos, una moneda de cinco centavos y cuatro más de diez; el libro “La destrucción o el amor” con una carta de su autor, Vicente Aleixandre, y un auto sacramental titulado “Quién te ha visto y quién te ve, y sombra de lo que eras” del que él mismo era autor.
Rafael Córdoba comenzó a teclear: “En la villa de Rosal de la Frontera, siendo las doce horas del día 4 de mayo de 1939, Año de la Victoria, comparece el que dice ser y llamarse Miguel Hernández Gilabert, de 28 años de edad, casado en la que fue zona roja, de profesión escritor, e hijo de Miguel y de Concepción, natural de Orihuela (Alicante) y con domicilio en Cox (Alicante)”.
Llevaba Miguel en su poder 20 escudos y unos centavos, dos salvoconductos, el libro de poesía de Aleixandre La destrucción o el amor y una carta del propio Vicente, más un ejemplar de el Auto Sacramental “Quien te ha visto y quien te ve, y sombra de lo que eras”. El día 6 de mayo escribe a Josefina notificándole su detención, quitando hierro al asunto ya que fue maltratado por sus guardianes.
El 9 de mayo está en la prisión Provincial de Huelva y le conducen a Madrid, según el documento del Gobernador Civil de Huelva.
En Rosal de la Frontera estuvo cinco días, le pegan y le torturan hasta orinar sangre. Según Enrique Cerdán Tato, hubo un testigo Francisco Guapo que comparte celda con Miguel, preso por contrabando, y gracias a la mujer de éste, Miguel recibió comida y le lavó la ropa, Miguel le dedicó un poema "Hombre encarcelado" en un papel de estraza con un dibujo del barco que pensaba coger en Lisboa, actualmente éste se encuentra inédito y en paradero desconocido.De allí es trasladado a la Prisión de Huelva, de Huelva a la prisión de Sevilla como transeúnte, unos días, y de Sevilla a la cárcel de Torrijos, a la que llegó el 18 de mayo de 1939.
Por una serie de descoordinación gubernamental y judicial lo ponen en libertad de 15 de septiembre 1939, no se ha demostrado documentalmente lo que María Teresa León y Pablo Neruda contaron sobre la mediación del cardenal Baudrellat con Franco. Puesto que de haber sido cierto, la segunda detención, una semana después no se hubiera llevado a efecto.
En aquellos años, acabada la guerra, la Fuerzas del Orden actuaban como verdaderos Fiscales, y con suma dureza interrogaban a los detenidos, amparados por la leyes franquistas, y estaba bien visto ante los jueces que el detenido fuera interrogado a conciencia y sin presencia de abogados, ya que la presencia del abogado en la primeras diligencias, aparece ya en España a partir de la Constitución de 1978. Sin abogados presentes, las declaración de los detenidos eran “durísimas” y los jueces las iban a tomar como verdaderos testimonios sin lugar a dudas.
La prisión en la que estuvo el poeta es ahora la Casa de la Cultura "Miguel Hernández", donde está recreada la celda y también se ha instalado un centro de interpretación de su vida y obra.
El 12 de junio de 2010, la nuera del poeta, Lucía Izquierdo y la Presidenta del Parlamento Andaluz, Fuensanta Coves y el alcalde de Rosal de la Frontera, Ramón Márquez, descubrieron un monolito en granito gris custodiado por dos olivos. Y en segundo lugar una escultura con el busto del poeta realizado y donado al pueblo de Rosal por el joven escultor aracenense Alberto Germán Franco, con la presencia de dos alas rotas como símbolo de la libertad.
publicado en Huelvapedia
lunes, 27 de abril de 2015
Carta de Miguel a Carlos Rodríguez Spiteri
- "Querido Carlos: con gran sorpresa, he recibido ese libro tuyo del 38, cuando las circunstancias eran muy otras para todos. Son poemas esos tuyos impregnados de la enrarecida atmósfera que respirabas, llenos de la angustia y la esperanza de tu juventud. Me alegran ciertos versos, donde la ternura halla su forma de expresión más inspirada. El libro, en total, está lleno de ese aliento que hace patente a un poeta. Vicente te habrá dicho mucho, y yo prefiero aguardar una ocasión para decirte todo cuanto pienso de este libro, que tú consideras un poco lejano. Veo que viajas, y cuando miro que tu carta viene de Toledo, siento todas mis ataduras y mi poca, mi escasísima posibilidad de movimiento. Sólo puedo moverme en un patio, que tengo más recorrido que el día. Dime más de tu actividad poética. Yo no hago nada por hoy, mañana veremos qué se hace. Vivo, me limito a vivir una vida de preso con todas sus consecuencias. Te abrazo y te prometo darte a conocer mi hijo".
domingo, 19 de abril de 2015
Fotos de la llegada de la Senda del Poeta Miguel Hernández 2015 al cementerio de Alicante. Foto con Chema Rubio
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Aitor Larrabide lee uno foios junto a él está Paco Esteve y representate del IVAJ |
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(Palmeral con Chema Rubio Velasco) |
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(Ramón Fernández Palmeral en la Senda del Poeta) |
La Senda del Poeta llegó sobre las 18 horas al cementerio de Alicante, hubo un acto de recitar poemas junto al mausuleo de Miguel Hernández, entre ellos se recitó la Elegía a Ramón Sijé, en castellanmo, valencia e inglés. Tambien recitó el hernandianao Chema Rubio.
La Senda del Poeta llega esta tarde al cementerio de Alicante
Según el horario oficial está previsto aque esta tarde sobre las 17 horas del domingo 19 de abril 2015 llegue la Senda del Poeta al cementerio de alicante. Si no hay contratiempo allí estaré esperando la llevaga de estos valientes senderistas que han hecho en tres día más de 70 kilómetros caminando por la sendas entre las amapolas de abril, porque los campos están a reventar.
Aunque bajo la tierra mi amante cuerpo esté escribeme a la tierra que yo te escribiré.
Aunque bajo la tierra mi amante cuerpo esté escribeme a la tierra que yo te escribiré.
jueves, 16 de abril de 2015
Miguel le dedicó "El pez más viejo del río" a Antonio Buero Vallejo
“El pez más viejo del río”, canción 119 del Cancionero y romancero de ausencias.
Así comienza un hermoso poema de Miguel Hernández que Antonio Buero
Vallejo quiso recordar con sentimiento un día. Al parecer, cuando
ingresó en el penal de Ocaña, alguien pudo contarle que Miguel, al
contemplar triste y abatido a un compañero de cárcel y penas, le
preguntó por el motivo de su desconsuelo. Este, mostrándole la
fotografía de su hija que llevaba en sus manos, le contestó que ante el
cercano cumpleaños de la pequeña, ni sabía, ni tenía, ni podía enviarle
nada. El oriolano le pidió prestada aquella ajada cartulina y, mientras
pensaba cómo él ansiaba poder tener alguna fotografía de su Manolillo, y
de qué modo entendía aquella pena, abandonó el lugar por un instante,
retornando al poco con estos conocidos versos que regaló a su amigo,
para que él los entregara, decía Buero, como “el obsequio que aquel padre quería mandar y no sabía cómo”. Acertó Odón Betanzos al denominar a este poema como una “nana-cuento” que aliviaba del dolor, como también acertó el Camarón de la Isla cuando lo cantó con su peculiar y desgarrada voz. En 1989 lo incluyó en su disco “Soy gitano”,
acompañado por la guitarra de Vicente Amigo, y recreando con su cante
las dos variantes que a los fandangos había aplicado, así los afirman
los entendidos, el cantaor jerezano Niño Gloria. El resultado, una feliz
maravilla.
En la nota final que sobre este poema aparece incluida en las obras completas, se nos indica que Miguel Hernández lo envió, para su hijo, en una carta dirigida a su mujer desde el Penal de Ocaña, realizando además el dibujo alusivo que aquí copiamos. Se publicó, por vez primera, en el número 9 (mayo 1946) de la revista vallisoletana Halcón, aunque con el título “A la niña Rosa María” y con algunas significativas variantes. Nosotros copiamos la versión facilitada en las Obras completas de Miguel Hernández, aunque nos hemos permitido modificar el verso 7, para dotarlo de un sentido que, consideramos le falta (así, Camarón cantaba "el agua no le divierte"). La coplilla dice así:
El pez más viejo del río
En la nota final que sobre este poema aparece incluida en las obras completas, se nos indica que Miguel Hernández lo envió, para su hijo, en una carta dirigida a su mujer desde el Penal de Ocaña, realizando además el dibujo alusivo que aquí copiamos. Se publicó, por vez primera, en el número 9 (mayo 1946) de la revista vallisoletana Halcón, aunque con el título “A la niña Rosa María” y con algunas significativas variantes. Nosotros copiamos la versión facilitada en las Obras completas de Miguel Hernández, aunque nos hemos permitido modificar el verso 7, para dotarlo de un sentido que, consideramos le falta (así, Camarón cantaba "el agua no le divierte"). La coplilla dice así:
El pez más viejo del río
de tanta sabiduría
como amontonó, vivía
brillantemente sombrío.
Y el agua le sonreía.
Tan sombrío llegó a estar
(nada del agua le divierte)
que después de meditar,
tomó el camino del mar,
es decir, el de la muerte.
Reíste tú junto al río,
niño solar. Y ese día
el pez más viejo del río
se quitó el aire sombrío.
Y el agua te sonreía.
martes, 14 de abril de 2015
"Momento", Revista de la Semana Santa Olecense de 1942, aparece el poema de Carlos Fenoll al Cristo Yacente y el poema de Antonio Fantucci a Miguel Hernández.
POR ANTONIO LUIS GALIANO PÉREZ, CRONISTA OFICIAL DE ORIHUELAEste día del calendario en los anales de Orihuela ha tenido diversas conmemoraciones desde la Guerra Civil. En un principio, sería considerado tal como se decía durante el franquismo como Día de la Liberación, en que en el año 1939, los reclusos nacionales encerrados en el Seminario, abandonaban materialmente el encierro en dirección a la ciudad acompañados por el repique de campanas. Poco tiempo después, sería al contrario, y durante algún tiempo los inquilinos pasarían a ser los republicanos. Eran algunas de las consecuencias de una confrontación fratricida.
A los tres años, el 28 de marzo de 1942, fallecía en el Reformatorio de Adultos de Alicante el poeta Miguel Hernández: era [sábado anterior al] Domingo de Ramos. Como una premonición, el italiano Antonio Fantucci, en la revista ‘Momento’ plasmaba en su trabajo ‘Mane, nobiscum, Domine’ la dedicatoria «A Miguel, que se muere, solo». En esas circunstancias era incluso arriesgado el nombrar al poeta al que tanto debe Orihuela, y que políticamente se había identificado hasta lo más íntimo con la República. Después de una Guerra Civil la situación política no era favorable para ello, resultando hasta osado tenerlo en consideración, por las posibles represalias que pudieran derivarse. Sin embargo, los editores de esta efímera publicación dedicada a la Semana Santa, que políticamente hablando no eran inequívocos, lo permitieron.
Entre ellos encontramos al alcalde Mariano Belda Garriga, a Gabriel Sijé, a Antonio García (Molina Martínez) y a Eladio Belda Irles, siendo este último el que de su peculio sufragó el sepelio de Miguel. En ‘Momento’ encontramos algunos contrasentidos, pues mientras que se recordaba al poeta, se rendía también homenaje a Luis Bueno Ferrer, caído en la División Azul, y al que su madre, Amelia Ferrer, Cayetano López Noguera y el citado Gabriel Sijé le dedicaron sendos artículos. La revista se completaba con las firmas de Manuel Martínez Ros, Emilio Bregante Palazón, Antonio Escudero Esquer, Fulgencio Ros Alifa, Luis Almarcha Hernández, Fernando Brú Giménez, Elías Abad Navarro, Vicente Hernández Romero, Francisco Díe, José Franco Martínez y Carlos Fenoll. Las fotos eran originales de Antonio Ballester, M. Belda, A. Bernard, Penalva, Esteban Montero, J. Franco. En la portada aparece un dibujo de Adolfo Pérez León representando al Cristo del Consuelo. Hoy, ninguno de ellos está entre nosotros, pero dejaron su huella con esta publicación que fue impresa en los talleres de Zerón y que veía la luz, ese mismo día en que Miguel abandonaba este mundo, «en el júbilo y el sol del Domingo de Ramos».
Al margen de cualquier tipo de contrasentidos, en ‘Momento’ dejó su impronta Carlos Fenoll con uno de sus mejores poemas dedicado al Cristo Yacente de José Seiquer Zanón. Imagen que Juan Bellod Salmerón le hizo admirarla, haciéndole observar su mano derecha: «Y esa mano, y esa mano que, muerta/ más no del todo fría, levemente entreabierta/ bendice todavía!». Talla que se incorporó a las procesiones de ese año, siendo adquirida por el Excelentísimo Ayuntamiento. En esos primeros años de los cuarenta del siglo XX comenzaban a fundarse nuevas cofradías como la de la Samaritana, que desfilaría por primera vez al año siguiente, por iniciativa del sacerdote Antonio Roda López que ostentaba la Presidencia de la Junta Mayor de Cofradías y Hermandades de la Semana Santa. En la directiva de esta última, encontramos muchos nombres recordados como Juan Villaescusa, Manuel Penalva Fons, Juan Pertusa, Evaristo Cárceles, Manuel Muñoz Aliaga, Mercedes Maseres, Jesús Botella Brotóns, Ignacio Genovés Genovés, Luis Boné Rogel, Emilio Bregante Palazón, Enrique Garriga Mercader, Manuel Martínez Ros y Luis Almarcha Hernández.
Los desfiles procesionales del año 1942 quedaban reducidos al Domingo de Ramos con la ‘Cofradía de Nuestra Señora de los Dolores’ que desfilaba con la imagen de La Dolorosa que se veneraba en el convento de San Juan de la Penitencia. Desde la iglesia de la Merced, por primera vez, el Lunes Santo salió la Cofradía del Ecce-Homo que sacaba en procesión a las imágenes de Jesús de Salzillo y de Pilato, también del mismo autor, y actualmente venerado como San Judas Tadeo. La cita del Martes Santo era con la Cofradía del Perdón, con sus pasos de La Caída con imágenes de Salzillo y Felipe Farinós, y La Verónica, de José Díes, estrenada ese año. En la tarde de Miércoles Santo, la VOT hacía estación hasta el santuario de Monserrate con las tallas de Nuestro Padre Jesús de José Sánchez Lozano y el Cristo de la Agonía de Salzillo. Al toque de oraciones se producía el traslado desde la iglesia de San Juan hasta la Catedral de los pasos de San Juan, el Triunfo de la Cruz, el Sepulcro y La Soledad. Por la noche, y desde la iglesia de San Agustín, la Cofradía del Lavatorio con las tallas de Francisco Salzillo de Jesús lavando los pies al apóstol Pedro y el Arrepentimiento del Príncipe de los Apóstoles. En la noche del Jueves Santo, la Hermandad del Silencio sacaba en procesión al Cristo del Consuelo, considerado en esas fechas como de autor anónimo (hoy documentado como de José Puchol). La procesión general tenía su protagonismo en la madrugada del Viernes Santo y en ella, además de la Convocatoria y Los Armaos desfilaban siete pasos. Por la tarde salía la procesión del Santo Entierro, «organizada y costeada por el Excmo. Ayuntamiento», encabezada por el Caballero Cubierto, distinción que recayó en el conde de La Granja. En ese año, se estrenó los tronos de San Juan y de la Soledad, así como el Cristo Yacente y la urna de madera tallada de Balaguer y dorada por Enrique Luis.
Han transcurrido setenta y dos años desde aquel Domingo de Ramos 28 de marzo, en que ‘Momento’ servía de pórtico a una Semana Santa que empezaba a resurgir, y que premonitoriamente veía a Miguel Hernández morir solo. Sin embargo, con el tiempo transcurrido podríamos decir que la figura y la obra del inmortal poeta vives, estás entre nosotros.
Fuente: http://www.laverdad.es/
Museo Miguel Hernández-Josefina Manresa en Quesada
Home // Presentación del Museo // El Museo
Denominación:
El nuevo museo nace bajo la denominación “Museo Miguel Hernández / Josefina Manresa”,
a la luz del acuerdo alcanzado entre los herederos del ilustre
escritor, la Diputación de Jaén y el Ayuntamiento de Quesada, hecho que
ha permitido el depósito y custodia del legado del poeta en la
provincia.
La
denominación del museo pretende dignificar y promocionar culturalmente
las figuras tanto del poeta Miguel Hernández como de su esposa,
Josefina Manresa, natural de Quesada.
Se
integra además en el actual Museo Rafael Zabaleta, con la intención de
aprovechar infraestructuras ya creadas y espacios comunes, así como de
relacionar las figuras del escritor y del pintor, dos artistas
contemporáneos de la primera mitad del siglo XX, que retratan al pueblo
en su obra y establecen paralelismos en sus contenidos.
Objetivos:
El
objetivo genérico del museo es poner en valor la obra y el ejemplo de
vida del poeta Miguel Hernández, y el papel de Josefina Manresa como
musa poética del escritor y como figura determinante en la conservación y
protección del legado literario de su marido en los momentos más duros
de la postguerra española.
Con este objetivo genérico, el museo “Miguel Hernández / Josefina Manresa” pretende conseguir en el visitante una triple reacción:
· Conmoción emocional:
· Lección de vida:
El museo lanzará con claridad al visitante el mensaje de la Ilustración, aplicado por la Institución Libre de la Enseñanza: “Solo con la educación y la cultura se logra el progreso de los pueblos”, y “un pueblo sin educación ni cultura es un pueblo sin alma y sin futuro”.
· Transmisión de un ejemplo vital de conducta y una actitud positiva a través de la literatura:
Para despertar esta triple reacción en el espectador, el museo “Miguel Hernández / Josefina Manresa” se plantea cuatro objetivos concretos:
-
Expresar con las necesarias herramientas museísticas la exquisita sensibilidad poética del escritor y su profundidad en la transmisión de mensajes de vida.
- Poner de manifiesto el enorme valor cultural de la obra de Hernández como un tesoro de las letras españolas, dotado de una dimensión social de tal calibre que ha convertido al poeta en un mito literario y humano en todo el mundo.
-
Difundir el valor didáctico
de la figura de Hernández como icono de los valores universales del
ser humano: la lucha por la libertad, la justicia social y la
solidaridad, unido todo ello a actitudes personales de conducta ante la
vida basadas en la sencillez, la humildad, el esfuerzo personal
constante y el autodidactismo. Son todos ellos valores de gran carga
didáctica, que emergen como absolutamente necesarios para nuestra
formación como personas, por lo que entendemos que Miguel Hernández se
muestra como un poeta necesario y especialmente recomendable para la
educación de las nuevas generaciones.
- Fomentar los hábitos de lectura y la creatividad literaria, principalmente entre los más jóvenes, como complemento de su formación académica.
Descripción detallada del proyecto:
El Museo “Miguel Hernández / Josefina Manresa” se integra en el actual Museo “Rafael Zabaleta”, ubicado en la Plaza Cesáreo Rodríguez Aguilera, nº5 (Quesada – Jaén), con una doble intención:
- Funcional: aprovechar al máximo las infraestructuras ya creadas para racionalizar su uso y evitar la duplicidad de gastos.
- Temática:
relacionar la literatura de Miguel Hernández con la pintura de Rafael
Zabaleta, dos artistas que basan buena parte de su obra en la
dignificación de los hombres y mujeres del campo, con una apuesta clara
por las gentes sencillas y por la tierra que habitan.
La
entrada al museo supone ya un ejemplo de aprovechamiento y
racionalización de espacios, contemplando un vestíbulo de acogida al
visitante y una zona de comercialización de souvenirs y artículos de
regalo del museo comunes para ambos artistas.
A
partir de esta zona, los museos se dividen, pudiendo ser visitada la
obra de Zabaleta por un lado, y el museo de Miguel Hernández y Josefina
Manresa por otro.
El
museo hernandiano contempla un hall de recepción y acogida que
ilustrará al visitante sobre la importancia del autor y su evolución
personal y literaria a través de sus etapas cronológicas, vinculadas a
sus libros:
- Perito en Lunas (enero 1933).
- El rayo que no cesa (enero 1936).
- Viento del Pueblo (septiembre 1937).
- El hombre acecha (1938).
- Cancionero y Romancero de Ausencias (1939-41).
A
partir de la zona de recepción, el museo de divide en 5 salas temáticas
que muestran los poemas manuscritos, mecanografiados, documentos de la
época, correspondencia, libros, fotografías, prensa y objetos personales del poeta:
·
Sala del poeta pastor:
Poesía de adolescencia.
Versos herméticos de inspiración pastoril y religiosa.
Naturaleza e inocencia.
·
Sala del poeta enamorado:
(El rayo que no cesa):
Sonetos de temática amorosa.
Estancia en Madrid. Cambio personal y literario.
Ruptura con la iglesia.
· 
Sala del poeta soldado:
(Viento del pueblo / El hombre acecha):
Literatura de combate y compromiso social.
Estancia en Jaén.
Viaje a la URSS e inicio del acento pesimista y del intimismo.
·
Sala del poeta mártir:
(Cancionero y Romancero de Ausencias):
Etapa carcelaria.
Poesía intimista y nostálgica por la libertad perdida.
Cantos de esperanza en un contexto de derrota.
· Sala del poeta mito:
Homenajes, publicaciones y traducciones de la obra de Hernández en el extranjero.
Resurgimiento de la figura de Miguel Hernández en la transición democrática como icono de libertad.
El papel de los cantautores. El poeta y su dimensión cultural y didáctica actual.
El acuerdo con la Diputación de Jaén y el municipio de Quesada.
Para trasladar este mensaje al visitante, el museo contará con cuatro tipos de elementos museísticos:
- Audiovisuales: pantallas de proyección que servirán de guía de contenidos para el visitante.
- Infraestructuras de museo: paneles expositivos con reproducción de poemas y fotografías a gran tamaño, vitrinas con objetos, cuadros…
- Elementos de atrezzo estético para ambientación: recreación de ambientes con elementos decorativos (la trinchera en la guerra, el depósito carcelario…).
- Elementos sonoros para ambientación:
sonidos que acompañan la visita (sonidos de la naturaleza en la primera
etapa, sonidos de la guerra en la tercera etapa, hilo musical de
cantautores en la última sala).
@MuseoMHernandez
Twitter del Museo
MuseoMHernandez
RT @Rafayiyo: Acaban de publicarse las actas del Primer Seminario Internacional Miguel Hernández, Universidad de Jáen, 2015 http://t.co/cWe…
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RT @ALTER_Andalucia: El II Encuentro Internacional de Poesía 'Ciudad de Úbeda' rendirá homenaje a Miguel Hernández. http://t.co/teWorDw3Un …
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Agradecimiento a la Familia de M. Hernandez
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