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Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

martes, 9 de enero de 2024

Curiosa historia del palanganero de la Casa-Museo de Miguel Hernández en Orihuela, por Inma Meseguer Soria



 HISTORIA DEL PALANGANERO DE MIGUEL HERNÁNDEZ


Por Inma Meseguer


Yo nací en Orihuela y aunque llevo viviendo fuera de ella más de 50 años, me sigo sintiendo muy orgullosa de ser oriolana y de nuestro más insigne oriolano el poeta Miguel Hernández. Ello y otras circunstancias, me llevó a la historia que te cuento a continuación.


A mi me encantan los muebles y objetos antiguos y deseaba tener un palanganero para decoración de mi casa. Por aquel entonces, el Ayuntamiento de Orihuela, por fin había adquirido la casa familiar donde nació Miguel Hernández. Los propietarios de la casa estaban en pleno proceso de trasladarse a su nueva vivienda y estaban vendiendo o regalando todo aquello que ya no les interesaba. Una amiga de Orihuela que vivía cerca de la casa del poeta me comentó que había visto un palanganero allí, en las cuadras de los animales, y que lo regalaban, pero que estaba lleno de carcoma, suciedad y en muy mal estado. Como soy aficionada a restaurar objetos antiguos, le pedí que lo recogiera y yo misma lo restauraría. Cuando fue a por él le pidieron 100 pesetas que pagué sin dudar y lo llevó a su casa donde le dio un tratamiento fuerte para eliminar la carcoma. Luego lo recogí y me lo traje a mi casa, en Alicante.


Así que comencé la restauración. Como le faltaba el toallero, mi padre que era muy habilidoso, se ofreció a hacer uno tomando como referencia la bandeja del otro lateral. Así pues, hizo un asa con la misma forma y, con su ayuda, la colocamos en la posición que debía estar el original. Taponé con cera todos los orificios que había debido a la carcoma, así como pequeños astillados o golpes y luego lo lijé y pinté para igualar todo el color del mueble. Finalmente lo barnicé. También limpié en profundidad la palangana que venía con el mueble y lo instalé en mi salón con unas plantas de adorno.


Por otra parte, me cuestionaba si este mueble había pertenecido a la familia de Miguel Hernández, así que inicié mis pesquisas preguntando en primer lugar a los que me vendieron el palanganero y me dijeron que cuando ellos compraron la casa, el mueble ya estaba allí, pero que como no les interesaba lo sacaron a las cuadras y allí permaneció hasta que me lo vendieron a mi. Lo siguiente, claro está, fue preguntar al hermano de Miguel Hernández, si ese mueble había pertenecido a su familia. Como yo tenía amistad con un sobrino del poeta, le pedí que preguntara a su padre, el cual me describió el palanganero que había en el dormitorio de sus padres, coincidiendo exactamente con el que yo había adquirido.


Puestos en este punto y dada mi admiración hacia el poeta, tomé la decisión de que cuando se inaugurara la Casa Museo de Miguel Hernández yo donaría el palanganero para aportar mi pequeña contribución en homenaje al gran poeta oriolano. Así lo hice y, el 3 de abril de 1985, previa entrega del mueble, el Ayuntamiento de Orihuela me entregó una carta oficial de agradecimiento por la donación firmada por el alcalde de Orihuela en nombre de toda la corporación.


La única pena que tengo en esta historia, es el hecho de que no hayan colocado un cartel que indique la autenticidad del Palanganero como perteneciente a la familia del poeta. Cada vez que he visitado la casa museo, y ya son muchas, he reclamado esta cuestión. Pero siempre parece que esto no les interesa, todo sigue igual, y no comprendo el motivo. En una de las ocasiones que llevé a unos amigos, hice fotos del mueble. Con una de ellas he realizado un cuadro en el que represento el palanganero en cuyo espejo se ve reflejada la imagen de Josefina, la esposa de Miguel, como si él la estuviera observando, y un verso del poeta, imitando su escritura que dice:

No tienes más que hacer que ser hermosa
ni tengo mas festejo que mirarte
alrededor girando de tu esfera


Miguel Hernández
El cuadro se titula “El amor del poeta”