Sinopsis:

Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

lunes, 23 de marzo de 2015

Actos de inauguración del Museo Miguel Hernández-Josefina Manresa en Quesada Jaén

El sábado 28 de marzo 2015, a las 12 horas, se celebra el acto inaugural del Museo Miguel Hernández-Josefina Manresa en Quesad Jaén. Conferencia inaugural a cargo de Alfonso Guerra. presidente de la Fundación pablo Iglesías. En la sala de conferen cia del museo.

Hay una semana cultural desde el marte 24 con diversos actos y plantación de un granado por parte de agricultores de Elche. Cantará Manuel Gerena. Concierto de Manuel Gerena, una exposición del pintor Joan Castejón.

domingo, 22 de marzo de 2015

Homenaje a Miguel Hernández, Lorca y Machado. Días 23 y 25 de marzo 2015


Marzo hernandiano. Homenaje a Miguel Hernández. Sede de la Universidad de Alicante (Canalejas) días 23 y 15 de marzo. El día 23 los grupos poéticos de Alicante recitarán poemas de Antonio Machado, Federico García Lorca y Miguel Hernández. El miércoles 25 a las 20 h. charla-coloquio de Ramón Fernández Palmeral y Manuel Parra Pozuelo sobre "Los avatares judiciales de Miguel Hernández".

sábado, 21 de marzo de 2015

LOS PROCESOS JUDICIALES CONTRA MIGUEL HERNÁNDEZ



("El lápiz de Miguel", óleo de Palmeral 2003)







Por Ramón Fernández Palmeral


Introducción

     Los historiadores somos ese grupo de personas molestas que tratamos empecinadamente de recuperar la memoria de lo que la gente, y algunos políticos quieren olvidar. A pesar de ello, el estudio de la Memoria Histórica es necesario enseñarlo a las juventudes venideras.
       Los procesos judiciales al universal poeta Miguel Hernández se toman como ejemplo o paradigma de la represión franquista de posguerra y cabeza de lista de los numerosos hombres y mujeres republicanas que sufrieron muerte, prisiones, vejaciones y juicios injustos e ilegales según el Derecho. Miguel, a pesar de los 75 años transcurridos desde su sentencia a muerte, judicialmente, sigue condenado.
       ¿Por donde empezar?, me pregunté al estructurar el presente y complejo estudio, pero a la vez interesante. He comentado que es complejo el tema de los procesos judiciales, porque se le instruyeron dos procedimientos sumarísimos paralelos el  21.001 en Madrid y el otro en Orihuela el 4.487-ALI (llenos de errores y omisiones, y tendentes a condenarlo sin una defensa justa), que acabó sobreseído definitivamente por el general Auditor el 27 de mayo 42. Cada sumario aportaba documentos diferentes y que, a pesar del cruce de oficios y exhortos, parece ser que no llegaron a unirse en un mar de legajos, Olivettis y Underwood, de jueces y defensores militares y secretarios incompetentes, que por al Ley 52/2007 de Memoria Histórica han sido declarados ilegales.
      He llegado a la conclusión que lo más comprensible y fácil para el lector sería exponerlo de una forma cronológica. Comenzando  por el final de la Guerra Civil.
      Miguel se halla en Cox (Alicante) a primeros de enero de 1939, el día 4 de enero nace su segundo hijo  Manuel Miguel, recordemos que su primer hijo Manuel Ramón había fallecido el 19 de octubre de 1938 con diez meses, que es el inspirador inicial de su obra personal y maestra Cancionero y romancero de ausencias. El de "Nanas de la cebolla" era su segundo hijo Manolillo.
     El 16 de febrero de 39 se traslada a Valencia, a la Academia ubicada en Alabalt des Sorells posiblemente buscando al capitán Esteban de la VI División para que le diera un dinero prometido en un carta. El Gobierno de la Republica ya no estaba allí, se había traslada a Barcelona en octubre del 38, después de perder Teruel (2 meses en manos republicanas) y que la fuerza Rebeldes de Franco llegaran a Vinaroz y dividieran la zona republicana en dos partes, con el consecuente corte de suministros y  comunicaciones.  El 24 de febrero Miguel se traslada a Madrid, y al día siguiente asistirá como padrino de la boda civil del  casamiento de su amigo el poeta sevillano Antonio Aparicio Herrero con Emilia Ardanuy Rodríguez celebrada en un juzgado madrileño (como escribe Miguel en una carta a Josefina) y no en la capilla de la embajada de Chile como han escrito otros biógrafos. (Antonio y Miguel pertenecieron al Quinto Regimiento, de la Brigada de el Campesino, y ambos fueron Comisarios Culturales. Se habían conocido en  casa de Pablo Neruda en Madrid).
     Fue detenido dos veces, la primera en Moura (Portugal), cerca Rosal de la Frontera (Huelva) que dió inicio al Sumario 21.001, y una segunda vez en Orihuela que da origen al Sumario 4.489-ALI, y que, paradógicamente, continuará instruyéndose después de muerto por fimia pulmonar el 28 de marzo de 1942, primero sobreseído provisionalmente, por si hubiera responsabilidades civiles para los herederos y luego definitivamente.
     Para el estudio actual de los procedimientos judiciales me he basado fundamentales cuatro piezas elementos de investigación: Lo dos sumarios, el expediente penitenciario y el epistolario hernandiano.  


Final de la guerra civil, el golpe de Casado

   Tras el nuevo fracaso republicano de la batalla del Ebro en noviembre de 1938 y la posterior caída de Cataluña, el coronel Casado se reafirmó en la idea de que "entre militares llegaremos a entendernos" e inició los contactos con la “quinta columna franquista” (del General Emilio Mola) en Madrid para negociar la rendición republicana, aunque era plenamente consciente de que para alcanzar ese objetivo previamente tenía que desalojar del poder al Presidente del Ejecutivo Juan Negrín y a los comunistas le apoyaban y que seguían apostando por el "resistir es ganar". En cambio, los “casadistas”, con una población que se moría de hambre, consideraron que si continuaba la costosa guerra era solamente en beneficio de la Unión Soviética.
         El día 4 de marzo de 1939  se sublevó la base naval de Cartagena que pretendía  entregar  la flota a Franco y gran parte de la guarnición de la ciudad, el almirante jefe de la flota Miguel Buiza puso rumbo a Bizerta en Túnez (bajo protectorado francés) con tres cruceros, ocho destructores y otras unidades menores. Y la noche del 4 al 5, el coronel Segismundo Casado (segoviano, militar de carrera formado en la Academia de Caballería de Valladolid y miembro de la masonería), Jefe del Ejército del Centro en Madrid, la unidad militar más importante de la zona el Ejército Popular del Centro-Sur, y recién nombrado general por Negrín (empleo que no aceptó), se subleva contra el gobierno socialista radical del Juan Negrín López (canario 19892-1956 médico en fisiología), apoyado por miembros del Partido Comunista (fue una rebelión entre los republicanos). Casado forma el Consejo de Defensa Nacional (presidido por el general Miaja y del que también formaba parte el socialista moderado Julián Besteiro, Wenceslao Carrillo, Val,) quiso negociar con Franco la rendición sobre todo para evitar las represalias contra los que habían luchado en el bando republicano pero no obtuvo ningún resultado ya que el gobierno de Franco en Burgos sólo aceptó la rendición incondicional.
 El Consejo Nacional de Defensa  estaba constituido por los siguientes miembros:
Presidente:
Consejero de Estado:
Julián Besteiro.
Defensa:
Gobernación:
Wenceslao Carrillo.
Comunicaciones y obras Públicas:
Eduardo Val.
Hacienda y Economia:
Manuel G. Marín.
Justicia:
Miguel San Andrés.
Instituciones Públicas:
José de Río.
Trabajo:
Antonio Pérez.
Secretario del Consejo:
Sánchez Requena.



                               Prisiones y turismo carcelario

      La cronología carcelaria se resume:
  1939
         3 de mayo detención en Maura por la policía portuguesa.
       4 de mayo, se le instruye atestado por la policía española, e ingresa en el Depósito Municipal de Rosal de la Frontera (Huelva)
        9 de mayo transeúnte en Huelva
      11 de mayo transeúnte en la prisión Sevilla
      13 de mayo ingresa en la prisión de Torrijos 65
      15 de septiembre sale en libertad de la prisión de Torrijos (Madrid)
       28 de septiembre es vuelto a detener en Orihuela, ingresado en  los sótanos seminario de san Miguel, convertido en prisión.
       3 de diciembre es trasladado desde Orihuela a la cárcel de Toreno (Madrid).

   1940.
      15 de septiembre es trasladado a la Prisión de Palencia
      24 de noviembre transeúnte en la Prisión de Yesería
       29 de noviembre ingresa en la Prisión de Ocaña

   1941
       29 de junio ingresa en el Reformatorio de Adultos de Alicante
       25 de noviembre ingresa en la enfermería del Reformatorio.6
       28 de marzo. Muere a las 5.30 horas del sábado santo al Domingo de Ramos.

      (Es de interés el libro de Miguel Gutiérrez Carbonell. Proceso y expediente contra Migue Hernández y ensayo jurídico con el Derecho Represor Franquista 1936-1945,  Compas, 1992), donde se recoge el Expediente Carcelario del Reformatorio de Adultos de Alicante, que se conserva en los Archivos del Centro Penitenciario de Foncalent (Alicante).
    He destacar el trabajo de Glicerio Sánchez Recio sobre "La institución de la represión en España. El proceso a Miguel Hernández" en las Actas del I Congreso sobre Miguel Hernández, 1992. 
     
                                       

NOTA.-LA INFORMACIÓN DE ESTE ARTÍCULO HA PASADO A  MI  LIBRO:
   
    

"Miguel Hernández, el poeta del pueblo (biografía en 40 artículos)", de Ramón Fernández Palmeral. Editorial ECU

jueves, 19 de marzo de 2015

Sumario 21.001 contra Miguel Hernández



EL SUMARIO CONTRA EL POETA EN SU CENTENARIO/ 1 El Confindencial

El Gobierno ha iniciado los trámites para reparar la memoria del poeta Miguel Hernández, muerto en la prisión de Alicante en marzo de 1942, cuando se cumple el centenario de su nacimiento. La familia del autor de ‘Vientos del pueblo’ reclamó en octubre del año pasado al Ejecutivo que “repare y reconozca” públicamente que fue condenado de manera injusta. El Confidencial ha indagado en las causas que los tribunales militares instruyeron contra él al final de la guerra civil, para reconstruir en dos entregas su periplo por las cárceles franquistas.
Antonio Márquez Bueno, agente de segunda clase del Cuerpo de Investigación y Vigilancia, y a la sazón jefe del puesto de Rosal de la Frontera (Huelva), supo desde un principio que iba a prestar un valioso servicio a la patria y ordenó a Rafael Córdoba, agente auxiliar interino, que se pusiera a la máquina de escribir. Tenía ante sí a un joven asustado que acababa de entregarle la policía portuguesa por haber cruzado la frontera de manera clandestina. Llevaba poco consigo: un billete de veinte escudos, una moneda de cinco centavos y cuatro más de diez; el libro “La destrucción o el amor” con una carta de su autor, Vicente Aleixandre, y un auto sacramental titulado “Quién te ha visto y quién te ve, y sombra de lo que eras” del que él mismo era autor.
Rafael Córdoba comenzó a teclear: “En la villa de Rosal de la Frontera, siendo las doce horas del día 4 de mayo de 1939, Año de la Victoria, comparece el que dice ser y llamarse Miguel Hernández Gilabert, de 28 años de edad, casado en la que fue zona roja, de profesión escritor, e hijo de Miguel y de Concepción, natural de Orihuela (Alicante) y con domicilio en Cox (Alicante), quien convenientemente interrogado manifiesta”. Dos puntos.
Relato de una huida
Miguel escapaba de la España de Franco a la desesperada, tras rechazar la oferta del encargado de negocios de la embajada de Chile en Madrid, Carlos Morla, que a principios de 1939, cuando la guerra se daba por perdida, le había ofrecido refugiarse en la sede diplomática a la espera de marchar al exilio con la ayuda del también poeta Pablo Neruda, con el que le unía una sincera amistad. Miguel quería llevar consigo a su mujer, Josefina Manresa, y a su hijo, y dejar resuelto el futuro de los cinco hermanos de su esposa, huérfanos tras el asesinato de su suegro, guardia civil. En marzo, con las tropas rebeldes a las puertas de la capital, el poeta marchó a Cox al encuentro de su familia. Convencido del riesgo que corría, decidió huir en solitario para reencontrarse más adelante con su mujer y su hijo en un lugar seguro. Marchó a Madrid y después a Sevilla, donde tomó la decisión de huir a Portugal.
El poeta relató a sus captores que un camión le había dejado a cuatro kilómetros de Aroche (Huelva), donde merendó y se compró unas alpargatas. A las nueve de la noche se puso a caminar con la intención de cruzar la frontera con Portugal sin tener muy claro el terreno que pisaba, y  a las cuatro de la tarde del día siguiente se encontró sin proponérselo en el pueblo portugués de Santo Aleixo, desde el que se trasladó a Moura, donde fue detenido.
Dos puntos. El agente auxiliar interino Rafael Córdoba, continuó con el relato del detenido. “Manifiesta que le sorprendió el Movimiento Nacional en Madrid, donde se encontraba trabajando en la casa Espasa-Calpe en la confección de una enciclopedia taurina bajo la dirección de don José María de Cossío, marchándose a Orihuela, su pueblo natal, a finales de julio para disfrutar el permiso de verano concedido (…) De vuelta de nuevo a su trabajo, en septiembre de 1936 movilizaron a su quinta y se incorporó a un Batallón de Zapadores con destino en Madrid (…) pasando después al 1er. Batallón Móvil como soldado. Quedó incorporado a las oficinas donde, además de trabajar en la parte burocrática, escribía versos para el periódico ‘Al Ataque’ que eran reproducidos en el periódico “El Mono Azul” (…) versos que están recopilados en un libro llamado ‘Vientos del pueblo’, editado en Valencia en 1937”.
Un hombre solo
El primer testimonio del poeta tras su detención muestra a un hombre abatido, que teme ser asesinado en una cuneta y miente para intentar salvar la vida. La comparecencia incorporada al procedimiento sumarísimo de urgencia 21.001 que se instruyó contra él dice textualmente: “Manifiesta que es apolítico por completo, no votó nunca por ningún partido ni está afiliado a ninguno, ni tampoco hizo por pasarse a nuestras filas por ignorar por completo la causa de nuestro Alzamiento, ni darse cuenta de nada de lo que ocurría en Madrid ya que él, dedicado al trabajo, salía poco a la calle por este motivo”.
La diligencia añade que “estrechado a preguntas por quienes suscriben, todo nervioso se encerraba en un círculo vicioso diciendo ‘yo no sé, les digo a ustedes la verdad, hagan de mí lo que quieran (…) Sobre sus amistades literarias manifesta que Federico García Lorca era un hombre de mucha más espiritualidad que Azaña, que no desconoce que era pederasta, y que a pesar de esto era uno de los hombres de gran espiritualidad de España, y que después del teatro clásico él ha sido una de sus mejores figuras; advirtiendo a los agentes que suscriben tengan cuidado no sea se repita el caso de García Lorca, que fue ejecutado rápidamente, y según tiene entendido el mismo Franco (nuestro inmortal Caudillo) sentó mano dura sobre sus ejecutores”.
En busca de avales
Miguel Hernández, comenzaba así, en un destartalado depósito municipal, un triste transitar que habría de llevarle de prisión a prisión. El 17 de mayo fue ingresado en la de Huelva; el día 11 trasladado a la de Sevilla, y el 15 conducido a la cárcel madrileña de Torrijos, desde la que escribió a su mujer para que buscara avales que le ayudasen a salir de la cárcel. Uno de ellos se lo facilitó su amigo Juan Bellod Salmerón, convertido entonces en secretario de la Jefatura Provincial de Falange en Valencia. En un folio con membrete de la misma, fechado el 24 de mayo, que figura incorporada a la causa, escribe:
“Certifico que conozco desde su niñez a Miguel Hernández Gilabert (…) constándome ser persona de inmejorables antecedentes, generosos sentimientos y honda formación religiosa y humana, pero cuya excesiva sensibilidad y temperamento poético le ha hecho actuar atendiendo más a los dictados del apasionamiento momentáneo que a una voluntad firme y serena, fácilmente influenciable por acontecimientos y personas (…) Que garantizo plenamente su conducta y actuación, así como su fervor patriótico y religioso, que se revela por lo demás en la lectura de su producción literaria, singularmente en la de su magnífico auto sacramental ‘Quién te ha visto y quién te ve, y sombra de lo que era”.
Bellod relataba que Miguel Hernández le había visitado en repetidas veces en la cárcel de Jesús y María, en la que fue ingresado por los ‘rojos’ al inicio de la guerra, “constándome que hizo cuanto estuvo en su mano para evitar que fuese paseado”.  El jefe de Falange  añadía que posteriormente había perdido el contacto con él, pero que le consideraba incapaz de haber intervenido en ningún hecho delictivo.
“Estimando que su producción literaria en las publicaciones rojas obedecía a coacciones, e incluso a imperativos de su pasión, cambiada de signo por la falaz propaganda marxista, pero no a la maldad y falta de espíritu nacional y religioso que caracterizó a las fuerzas de la anti-España. No le creo pues, en lo fundamental, enemigo de nuestro Glorioso Movimiento, con cuyos principios, una vez conocidos en la reveladora verdad de nuestra Doctrina hecha actuación gloriosa, le considero identificado por su formación y por su temperamento”.
También desde la editorial Espasa Calpe avalaron su conducta, según consta en otra carta incorporada a la causa:
“Miguel Hernández Gilabert no prestaba sus servicios directamente a esta empresa, sino a las órdenes de uno de nuestros directores literarios, pero podemos manifestar que su conducta ha sido en todo momento correcta, lo mismo para su jefe que para las demás personas de esta editorial. Por Dios, por España y su Revolución Nacional-Sindicalista”. La misiva contenía en su parte inferior una posdata: “Su jefe, D. José María de Cossío, se halla actualmente ausente y oportunamente le daremos cuenta de este requerimiento, para que dé a usted su informe”.
Ante el Tribunal Especial de Prensa
Tras dos meses de estancia en prisión, el 6 de julio de 1939 Miguel Hernández prestó su primera declaración ante el juez del Tribunal Especial de Prensa, Manuel Martínez Gargallo, ante el que ya no ocultó su apoyo a la causa republicana. Lo vivido en Torrijos con otros presos republicanos le había marcado profundamente y no estaba dispuesto a renegar de sus ideales. Su testimonio fue recogido a mano por un escribiente.
Que reconoce sus ideales antifascistas y revolucionarios, no estando identificado con la Causa Nacional, creyendo que el Movimiento Nacional no puede hacer feliz a España (…) Que su libro ‘Vientos del pueblo’ es una compilación de toda la labor que como escritor antifascista y al servicio de la causa del pueblo ha desarrollado el dicente durante la guerra, su identificación a la causa roja recomendando la resistencia a la invasión, y conteniendo exaltaciones, dice el dicente, de los rasgos nobles de la causa marxista” (…) “Preguntado si con su labor como escritor antifascista reconocía la labor delictiva que realizaba recomendando la resistencia a la Causa Nacional, contesta el dicente: ‘reconocía esta labor delictiva en contra de la invasión”.
Días después, llegaba a manos del juez una carta del alcalde de Orihuela que, contra lo que el propio poeta esperaba, no sólo no avalaba su conducta, sino que vertía contra él serias acusaciones.
“He de manifestar que su actuación en esta ciudad desde la proclamación de la República ha sido francamente izquierdista, más aún marxista, incapaz por temperamento de acción directa en ningún aspecto, pero sí de activísima conducta comunistoide. Se sabe que durante la revolución ha publicado numerosos trabajos en toda clase de periódicos y publicaciones, y que estuvo agregado al Estado Mayor de la Brigada de ‘El Campesino’. Hace bastantes años se le conocía como ‘el pastor poeta’, y últimamente por ‘el poeta de la revolución’, lo que comunico a los efectos que estime oportunos. Dios, que salvó a España, guarde a usted muchos años”. Firmado en Orihuela el 14 de julio de 1939.
Su pertenencia a la brigada de Valentín González, conocido como ‘el Campesino’, que los primeros días de la guerra había contenido a las tropas rebeldes en Somosierra y evitado con ello la caída de Madrid, era una prueba irrefutable de su plena y trascendente identificación con la causa “roja”.
Dos meses más tarde, el 6 de septiembre, volvió a prestar declaración ante el juez Martínez Gargallo, y lejos de desdecirse de sus anteriores manifestaciones las ratificó, aunque negó haber luchado con ‘El Campesino’. El día 18 del mismo mes, el juez instructor resumió en quince escuetas líneas sus conclusiones:
“Está plenamente acreditado que dicho individuo, de tendencias notoriamente contrarias al Movimiento Nacional, desarrolló apenas iniciado éste una activísima labor literaria en contra de los ideales como de sus figuras más prestigiosas, apareciendo como firmante de varios manifiestos destinados a sembrar en España y en el extranjero la idea de que tan Glorioso Movimiento no era sino una vulgar invasión plagada de crímenes, y alentar al mismo tiempo a la resistencia armada contra las fuerzas nacionales; habiendo intervenido como animador, en unión de las fuerzas rojas, en el asalto y toma del Santuario de Nuestra Señora de la Cabeza y existiendo, además, indicios muy racionales de haber sido comisario político de una brigada de choque”.
Versión que ratificaría el fiscal del autodenominado “Ejército de Ocupación”, que en su escrito de acusación consideró los hechos constitutivos de un delito de “adhesión a la rebelión militar, con las agravantes de perversidad y trascendencia de los hechos cometidos. Pena que se pide: MUERTE”.

Cárcel de Miguel Hernández en Huelva





Descripción

    La última etapa de la vida de Miguel Hernandez fue un cúmulo de despropósitos que convirtió su existencia en un auténtico calvario. Al desánimo personal (su primer hijo, Manuel Ramón, había muerto en otoño de 1938) se unía el desánimo colectivo (la guerra estaba prácticamente perdida, y el miedo a la muerte y a la represión era más que patente). Es una época de amargura, tan sólo aliviada por la noticia del nacimiento de su segundo hijo Manuel Miguel. Su via crucis personal comienza cuando, finalizada la guerra, intenta escapar a pie por la frontera portuguesa.

    Como Miguel Hernández no encuentra refugio seguro ni trabajo en Sevilla, se marcha a Cádiz y Jerez, buscando a Pedro Pérez Clotet (natural de Villaluenga del Rosario y director de la revista Isla, se conocieron en el 33 con motivo de la publicación de Perito en lunas) pero no lo encontró, por lo que decidió seguir su camino hacia Huelva para buscar al abogado Diego Romero Pérez en Valverde del Camino (Huelva) según su libro M.H. en mi recuerdo (Camas, 1992), quien era el contacto pensado por Miguel para pasar a Portugal. Un camión le lleva de Huelva a Aroche, allí cruza el río Rivera de Chanza, llega a Santo Aleixo, vende un traje y el reloj que le regaló Vicente Aleixandre para su boda, le dan unos escudos, este mismo comprador lo debió denunciar a la policía. Se interna hacia Moura y aquí es donde comienza la historia común del Rosal de la Frontera y Miguel Hernández, cuando el 4 de mayo de 1939 tras ser detenido en esta localidad portuguesa por la policía salazarista, fue trasladado al calabozo del puesto fronterizo de Rosal de la Frontera (Huelva).

    Antonio Márquez Bueno, agente de segunda clase del Cuerpo de Investigación y Vigilancia, y a la sazón jefe del puesto de Rosal de la Frontera (Huelva), supo desde un principio que iba a prestar un valioso servicio a la patria y ordenó a Rafael Córdoba, agente auxiliar interino, que se pusiera a la máquina de escribir. Tenía ante sí a un joven asustado que acababa de entregarle la policía portuguesa por haber cruzado la frontera de manera clandestina. Llevaba poco consigo: un billete de veinte escudos, una moneda de cinco centavos y cuatro más de diez; el libro “La destrucción o el amor” con una carta de su autor, Vicente Aleixandre, y un auto sacramental titulado “Quién te ha visto y quién te ve, y sombra de lo que eras” del que él mismo era autor.

     Rafael Córdoba comenzó a teclear: “En la villa de Rosal de la Frontera, siendo las doce horas del día 4 de mayo de 1939, Año de la Victoria, comparece el que dice ser y llamarse Miguel Hernández Gilabert, de 28 años de edad, casado en la que fue zona roja, de profesión escritor, e hijo de Miguel y de Concepción, natural de Orihuela (Alicante) y con domicilio en Cox (Alicante)”.
Llevaba Miguel en su poder 20 escudos y unos centavos, dos salvoconductos, el libro de poesía de Aleixandre La destrucción o el amor y una carta del propio Vicente, más un ejemplar de el Auto Sacramental “Quien te ha visto y quien te ve, y sombra de lo que eras”. El día 6 de mayo escribe a Josefina notificándole su detención, quitando hierro al asunto ya que fue maltratado por sus guardianes.
El 9 de mayo está en la prisión Provincial de Huelva y le conducen a Madrid, según el documento del Gobernador Civil de Huelva.
    En Rosal de la Frontera estuvo cinco días, le pegan y le torturan hasta orinar sangre. Según Enrique Cerdán Tato, hubo un testigo Francisco Guapo que comparte celda con Miguel, preso por contrabando, y gracias a la mujer de éste, Miguel recibió comida y le lavó la ropa, Miguel le dedicó un poema "Hombre encarcelado" en un papel de estraza con un dibujo del barco que pensaba coger en Lisboa, actualmente éste se encuentra inédito y en paradero desconocido.De allí es trasladado a la Prisión de Huelva, de Huelva a la prisión de Sevilla como transeúnte, unos días, y de Sevilla a la cárcel de Torrijos, a la que llegó el 18 de mayo de 1939.
     Por una serie de descoordinación gubernamental y judicial lo ponen en libertad de 15 de septiembre 1939, no se ha demostrado documentalmente lo que María Teresa León y Pablo Neruda contaron sobre la mediación del cardenal Baudrellat con Franco. Puesto que de haber sido cierto, la segunda detención, una semana después no se hubiera llevado a efecto.
   En aquellos años, acabada la guerra, la Fuerzas del Orden actuaban como verdaderos Fiscales, y con suma dureza interrogaban a los detenidos, amparados por la leyes franquistas, y estaba bien visto ante los jueces que el detenido fuera interrogado a conciencia y sin presencia de abogados, ya que la presencia del abogado en la primeras diligencias, aparece ya en España a partir de la Constitución de 1978. Sin abogados presentes, las declaración de los detenidos eran “durísimas” y los jueces las iban a tomar como verdaderos testimonios sin lugar a dudas.

   La prisión en la que estuvo el poeta es ahora la Casa de la Cultura "Miguel Hernández", donde está recreada la celda y también se ha instalado un centro de interpretación de su vida y obra.
El 12 de junio de 2010, la nuera del poeta, Lucía Izquierdo y la Presidenta del Parlamento Andaluz, Fuensanta Coves y el alcalde de Rosal de la Frontera, Ramón Márquez, descubrieron un monolito en granito gris custodiado por dos olivos. Y en segundo lugar una escultura con el busto del poeta realizado y donado al pueblo de Rosal por el joven escultor aracenense Alberto Germán Franco, con la presencia de dos alas rotas como símbolo de la libertad.

Tomado de Huelvapedia

Migue Hernández en la Prisión de Palencia

MIGUEL HERNÁNDEZ EN PALENCIA

El famoso preso de la celda 23

01.11.10 - 01:19 -


El sábado se conmemoró el primer centenario del nacimiento de Miguel Hernández (Orihuela, 1910-Alicante, 1942). Dos años antes, pasó por la cárcel de Palencia. El poeta pisó por vez primera suelo palentino el día 23 de septiembre de 1940. En la cárcel de Palencia permaneció durante dos meses cumpliendo una pequeñísima parte de la condena a treinta años de prisión que un juzgado militar le había impuesto por su participación en el bando republicano durante la guerra civil. Y fue en Palencia donde cumplió los treinta años de edad, su penúltimo cumpleaños.
   La cárcel de Palencia fue un eslabón en la cadena de presidios que el poeta oriolano conoció tras la guerra civil. Temeroso de la represión franquista, Miguel Hernández huyó a Portugal con la intención de llegar hasta Lisboa para solicitar asilo político en la embajada chilena. Pero nada más cruzar la frontera por Rosal de la Frontera, fue capturado por la policía portuguesa y entregado a las autoridades franquistas. Fue aquí donde comenzó el final trágico del poeta. Rosal de la Frontera, Huelva, Sevilla, Orihuela, Madrid, Palencia, Ocaña y Alicante fueron las ciudades y prisiones por las que Miguel Hernández fue arrastrando su pena y dejando su salud.
   El traslado de Miguel Hernández a la antigua Prisión Provincial de Palencia se produjo entre la noche y la mañana de los días 22 y 23 de septiembre de 1940 en vagones de mercancías, en un penoso viaje que duró más de dieciséis horas.
   En este destino a una ciudad tan distante de su tierra natal, algún biógrafo del poeta ha querido encontrar una falsa justificación atribuyendo el traslado a una equivocación del funcionario que tramitó el mismo y que presumiblemente cambió el nombre de Palencia por Valencia, ciudad esta última mucho más cercana a su tierra natal y a su familia.
   El poeta fue enviado a la capital palentina junto con otros 244 presos, entre los cuales, al igual que el propio Miguel, también había muchos condenados a penas de treinta años de prisión. Una parte de aquellos reclusos fueron ingresados en el antiguo manicomio, habilitado como prisión provisional, mientras que el resto, entre ellos Miguel Hernández, fueron internados en la Prisión Provincial de la avenida de Valladolid.
    La llegada al nuevo destino carcelario coincidió con la celebración de la fiesta de la Merced. Las guirnaldas, cadenetas y demás elementos ornamentales de la prisión de Palencia infundieron una falsa imagen a los recién llegados. Era una cárcel celular concebida para una población reclusa inferior a cien presos. Pero con la llegada de esta expedición, el número de reclusos sobrepasó el millar. El hacinamiento era total y Miguel Hernández, que fue destinado a la celda número 23, tuvo que compartir su reducido espacio de seis metros cuadrados con otros nueve reclusos.
   A las duras normas carcelarias se sumaron el frío y la pésima alimentación. Miguel Hernández comenzó a sentirse solo y necesitó buscar refugio en algunos de sus compañeros de presidio. En Palencia, a diferencia con Madrid, no tenía amigos que le visitasen en la cárcel o que le llevasen comida. Su consuelo estuvo en la tarjeta postal que cada semana podía escribir a su familia y en la espera de poder recibir noticias de su mujer.
    Durante los dos meses que Miguel Hernández estuvo preso en la cárcel palentina escribió a su mujer en nueve ocasiones. Del contenido de las cartas del poeta se entreven algunos aspectos sobre cómo fue su estancia en Palencia. El régimen disciplinario de la cárcel le impidió escribir a su esposa unas cartas tan extensas como las que le enviaba cuando estaba preso en Madrid, y Miguel Hernández tuvo que aprovechar al máximo el reducido espacio de esas tarjetas postales.
En la relación epistolar mantenida desde Palencia, Miguel Hernández y su esposa se mintieron mutuamente para eludir sufrimientos y preocupaciones, pero los dos sabían que la realidad era otra muy distinta. En el análisis del contenido de esta correspondencia se ven los encubrimientos consoladores a los que recurre el poeta. En un intento de evitar sufrimientos a su esposa, Miguel Hernández pocas veces le contó la verdad. Casi siempre intentaba convencerla de que su situación era buena, pero la realidad era todo lo contraria. Un claro ejemplo de esos engaños a su esposa es que cuando fue trasladado a Palencia, aún no le había comunicado que estaba condenado a treinta años de cárcel, ni tan siquiera antes le había dicho que había estado condenado a la pena de muerte.
    Las tres primeras semanas de estancia en la cárcel de Palencia fueron muy angustiosas para el poeta por la falta de noticias de los suyos. Los días de las semanas transcurrieron esperando ansiosamente noticias de su esposa. La melancolía por la ausencia de sus seres queridos intentó ser mitigada mediante la contemplación de una fotografía de su hijo, «a la que doy mi repaso diario», según le decía a su mujer en la tarjeta escrita el 14 de noviembre.
    A su estado de preocupación por el alejamiento de sus seres más queridos, Miguel Hernández tuvo que enfrentarse a otros dos serios problemas en la prisión palentina: el frío y el hambre.
La alimentación de los reclusos en la cárcel de Palencia fue pésima. Miguel Hernández palió aquella situación comprando alguna vez alimentos en el economato de la prisión, gracias a la ayuda económica que ocasionalmente recibió de sus padres. En otras ocasiones, fue la solidaridad de los propios reclusos, sobre todo los que tenían familia en Palencia y les llevaban alimentos a la cárcel, los que contribuyeron a mitigar el hambre del poeta. 
    El otoño de 1940 fue extremadamente frío en Palencia. Miguel Hernández esperó ansiosamente la ropa de abrigo que había pedido a su esposa. Una cazadora, unos pantalones, ropa interior y unas botas, porque las alpargatas que calzaba no impedían que se le congelasen los pies. En una de sus tarjetas, Miguel Hernández describió a su esposa cómo era aquel gélido otoño palentino: «Hace frío de verdad aquí. Al que le da por reírse, le queda cuajada la risa en la boca, y al que le da por llorar, le queda el llanto hecho hielo en los ojos».
    Convencido de que en su nuevo destino carcelario debía pasar una larga estancia, Miguel Hernández intentó convencer a su mujer para que se trasladase a vivir a Palencia, donde, según le decía, «no falta el pan y podrás trabajar como modista (…), y el frío, acostumbrándose a él, es saludable, y nuestro hijo se criará más fuerte, porque esto es muy sano».
     Durante su estancia en Palencia, la producción poética de Miguel Hernández fue prácticamente nula. En alguna ocasión, encargó comprar tinta y papel a la familia de un compañero de presidio. Solo quedan los recuerdos de algunos compañeros de cárcel que en su día poseyeron algún poema escrito y dedicado por Miguel Hernández y que el tiempo y el exilio hicieron desaparecer.
    Dos meses después de su llegada a Palencia, en la madrugada del día 24 de noviembre, Miguel Hernández fue entregado, a las dos de la madrugada, a una pareja de guardias civiles cuya misión era la de custodiar al poeta hasta su nuevo destino en la prisión de Ocaña. Atrás dejaba la ciudad de las mantas y el frío tan intenso que, presumiblemente, pudo llegar a afectarle gravemente.
     El deterioro de la salud del poeta durante su estancia en Palencia ha supuesto todo tipo de conjeturas. Han sido varios los biógrafos que, sin testimonio alguno, han afirmado con total seguridad que Miguel Hernández enfermó de neumonía en esta cárcel. El frío extremo de aquel otoño palentino, el hambre o las malas condiciones de higiene de la prisión fueron circunstancias en las que cualquier recluso podía contraer todo tipo de enfermedades. Pero ninguno de los compañeros de Miguel Hernández en la cárcel palentina recordaba que aquí enfermase o que se le llegase a prestar atención en la enfermería de la prisión.

martes, 17 de marzo de 2015

Exposición pictórica de Ximo Canet "Una palabra, una imagen. Homenaje a Miguel Hernández"

 

Exposición pictórica de Ximo Canet "Una palabra, una imagen. Homenaje a Miguel Hernández"

MARZO HERNANDIANO 2015


Esta exposición nace como homenaje a Miguel Hernández en el 73º aniversario de su fallecimiento, como un despertar, un canto a la naturaleza y a la solidaridad, que tan bien supo trasladarnos con sus poemas.
Basándome en algunos de ellos, como una pequeña antología creada con pinceladas, intento reflejar en mis cuadros algunos de los problemas actuales que estamos viviendo: como la sobreexplotación de los recursos naturales y los graves recortes sociales y de derechos, siendo necesaria su reivindicación y solución. Para que el trabajo realizado por muchos no quede atrás, perdido. Como un canto a la libertad, la esperanza y la naturaleza.
Ximo Canet

Sala Museo san Juan de Dios (Orihuela) del 4 al 22 de marzo de 2015. 

Programa. IV Jornada de los murales de San Isidro, en Orihuela

Ver detalle del evento
MARZO HERNANDIANO 2015    
      
  • 9:00 h. Pintada de Murales 

  • 9:00h. Jornadas Cuadernistas. Por la Asociación Cuadernos Viajeros de Elche. Recorre el Barrio pintando libremente.
             
  • 10:00- 20:00 h. Exposición. Colegio Jesús- María de San Isidro.
            - Cosmogonia Hernandiana. Por Michele Bertoni, pintor y músico italiano.
         
            
  • 11:00 h. Recital. Micrófono abierto. Pza. C/ Gitanilla
       
  • 11:30 h. Pintando poemas. Taller para niños por el Foro Social. Pza. C/ Gitanilla
            
  • 12:00 h. Dacapo. Pasacalles
           
  • 12:00 h. La maleta de Miguel. Por el Taller Municipal de teatro.  
       
  • 17:00 h. Reconociendo a Miguel. Colegio Jesús- María de San Isidro. Narración de Amparo González, presidenta de la Casa de la Cultura Miguel Hernández fundada en París en 1984.
         
  • 17:00 h. Con la música a la Calle. VI Edición
                     
    - Plaza de San Isidro (frente al Colegio): 17:00 h >> MILCHAKAS. Músicas del mundo | 18:30 h >> PORRAS Y AMIGOS. Flamenco
         
    - Plaza frente a C/ Gitanilla: 17:00 h >> CANTAUTORES EFRÉN PAMIES, ANTONIO LARROSA Y TONI ORTUÑO. Canción de autor
       
  • 18:00 h. Parlamentos. Pza. frente a C/ Gitanilla
             
    - Manifiestos de poetas por Ada Soriano | Manifiesto de pintores por Joan Castejón | Recital | Homenaje a Imanol. Intervención de Txomin Angos
          
  • 18:30 h. Concierto Recordando a Imanol. Imanol Oroituz. Con Karlos González al piano, Francisco Herrero al violín y Ainara Ortega, Niko Etxart Amaia Zubiria, voces.      

domingo, 15 de marzo de 2015

Homenaje a Miguel Hernández para tres poetas inmortales. Sede de la Universidad de Alicante


Los días 23 y 25 de marzo de 2015, en la Sede la Universidad de Alicante, Sala Altamira.

Día 23, a las 20 horas. Homenaje a tres poetas inmortales: Anrtonio Machado, Federico García Lorca y Miguel Hernández. Lectura de poemas por los grupos poéticos de Alicante, invitados a este homenaje.

El día 25 de marzo a las 20.15 hroas. Charla-Coloquio: Los avatares juidicilaes de Miguel Hernández a cargo de Ramón Fernández Palmeral y Manuel Parra Pozuelo.

sábado, 14 de marzo de 2015

Inscripción para la Senda del Poeta 2015

Senda del Poeta. Orihuela-Alicante

   Los organizadores de la Senda del Poeta 2015 han abierto el plazo de inscripción para participar en la edición de este año que será en el mes de abril. La Senda arrancará en Orihuela el 17 de abril y los senderistas llegarán a la UMH el sábado 18. Las plazas son limitadas. Las inscripciones para participar en la senda se pueden realizar en el siguiente enlace:
http://www.gvajove.es/ivaj/opencms/IVAJ/es/cultura/Senda_poeta.html
 

 SendaPoeta_2015_WEB_IVAJ.GVA-JOVE








 




¡INSCRÍBETE EN LA SENDA DEL POETA 2015!

Formulario de inscripción individual.


Formulario de inscripción para grupos.

La “Senda del Poeta” es una actividad que en los últimos años ha batido todos los récords y expectativas tanto en participación como en difusión de la obra y vida del poeta Miguel Hernández. La Senda se ha consolidado como una de las citas del senderismo con mayor repercusión cultural, incluso a nivel internacional.

Queremos animaros a participar en la misma.


FECHAS DE REALIZACIÓN

Días 17, 18 y 19 de abril del 2015.


LA SENDA DEL POETA

En los últimos años el  Institut Valencià de la Joventut.Generalitat Jove (IVAJ.GVA JOVE), en colaboración con los ayuntamientos por los que pasa la Senda, y de la Diputación de Alicante, viene desarrollando este encuentro que discurre por los lugares más singulares de la vida y obra del poeta. Se trata de una actividad senderista de carácter cultural, turístico y medioambiental, que promueve valores tales como la participación y la convivencia intergeneracional dirigiéndose especialmente a jóvenes de la Comunitat Valenciana.

La salida será desde Orihuela, ciudad del nacimiento del poeta Miguel Hernández.
La senda comprende tres etapas que discurren por la senda internacional GR-125, realizando paradas en cada localidad de la ruta. En ellas se descansará, y se deleitará con diversos actos culturales de poesía, teatro y música realizados principalmente por jóvenes estudiantes de las poblaciones por las que discurre la Senda. 

En todo momento la Senda contará con varios monitores-guía que, a lo largo de la marcha, estarán a disposición de los senderistas ofreciéndoles la información necesaria para que sea lo más agradable posible.
 Más información:
http://www.gvajove.es/ivaj/opencms/IVAJ/es/cultura/Senda_poeta.html


Generalitat Jove.IVAJ - Alicante
Avda. Rambla de Méndez Núñez, 41
03002 Alicante
Tel. 966 47 81 00
www.gvajove.es

Libros sobre Miguel Hernández en libraria Codex, de Ramón Palmeral

Dirección wed para padedios de libros sobre Miguel Hernández

http://www.libreriacodex.com/busqueda/detalle.php?codigo=129054

jueves, 12 de marzo de 2015

SE PRESENTA EL LIBRO SOBRE EL CENTENARIO DE RAMÓN SIJÉ EN LA LIBRERÍA CODEX

ESTE PRÓXIMO LUNES SE PRESENTA EL LIBRO SOBRE EL CENTENARIO DE RAMÓN SIJÉ EN LA LIBRERÍA CODEX


Orihuela, 12-03-15

Este próximo lunes día 16 de marzo se presentará a las 19:45 horas en la Librería Codex, de Orihuela (plaza de San Sebastión, nº 2, bajo), el libro “Ramón Sijé en su centenario”, editado por la Fundación Cultural Miguel Hernández con la colaboración de la Cátedra Miguel Hernández de la Universidad que lleva el nombre del universal poeta oriolano.



En el acto intervendrán el director de la Cátedra Miguel Hernández, Francisco Esteve Ramírez, el director de la Fundación Cultural Miguel Hernández, Aitor L. Larrabide, y el profesor y especialista hernandiano José Antonio Torregrosa Díaz, coautor de uno de los trabajos incluidos en el libro.

El volumen de 232 páginas recoge las ponencias del curso de Verano dedicado a Ramón Sijé en septiembre de 2013 y realizado con la colaboración del Vicerrectorado de Cultura y Extensión Universitaria de la UMH y de la Concejalía de Educación del Ayuntamiento de Orihuela, además de diversas propuestas didácticas en torno a su figura, la conferencia de clausura del Centenario del ensayista oriolano y la revista “El Clamor de la Verdad, monográfico realizado por alumnos del mencionado curso. El contenido es el siguiente: “Crónica del Centenario”, por Aitor L. Larrabide; “Por el camino de Sijé”, por Francisco Esteve Ramírez; “Hernández y la gestación de “Perito en lunas” ”, por Francisco Javier Díez de Revenga; “Ramón Sijé y Miguel Hernández: de la poesía pura a la ruptura estética”, por José Antonio Torregrosa Díaz y Luis M. Abad Merino; “La edición del ensayo sobre el Romanticismo de Sijé”, por Gaspar Peral Baeza; “El pensamiento de Ramón Sijé en “La decadencia de la flauta” ”, por Ramón Fernández Palmeral; “Sobre Sijé: “La decadencia de la flauta y el reinado de los fantasmas” ”, por Vicente Hernández Fabregat; “Ramón Sijé. Una aproximación al pensamiento de José Marín Gutiérrez en el centenario de su nacimiento”, por Julio Calvet Botella; “ “He resucitado” (Vigencia de Ramón Sijé)”, por Antonio Luis Galiano Pérez; “Ramón Sijé: activista cultural, alma atormentada”, por José Luis Ferris; “Anexo” e “Índice”. 

Para más información sobre Ramón Sijé