Sinopsis:

Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

miércoles, 13 de marzo de 2019

Más de 40 cartas inéditas de Miguel Hernández. Epistolario general.

 

                          42 € en libreria editorial EDAF

Jesucristo Riquelme reúne el epistolario del poeta con 488 misivas, de las que 46 firmadas por él se publican por primera vez, igual que 30 enviadas al autor. El libro se presenta en la Biblioteca Nacional el 5 de abril. Epistolario general de Miguel Hernández.

12.03.2019 | 21:50 Diario Información

Carta a Josefina Manresa, del 12 de abril de 1935; carta a Rodríguez Isern, de 1941, del archivo de Elche, y carta al embajador de Chile, de 1939.

El libro se presenta el 5 de abril en la Biblioteca Nacional.
La marca del reloj que Vicente Aleixandre le regaló en su boda civil en 1937; la ayuda que pidió al embajador de Chile o una misiva escrita en francés. Estos, y muchos más detalles que se han descubierto gracias a que se ha desvelado el contenido de los textos tachados en las cartas, son algunos de los detalles de la vida de Miguel Hernández que ahora se saben gracias al trabajo realizado por el profesor Jesucristo Riquelme, que ha reunido en Epistolario general de Miguel Hernández un total de 488 misivas, postales y notas del poeta oriolano en la que es la edición más amplia de este tipo de documentos.
Este volumen, con 1.152 páginas y editado por EDAF, se presentará el 5 de abril en la Biblioteca Nacional, en un acto que estará presidido por el retrato original que le hizo Buero Vallejo en la cárcel y con las actuaciones de Carmen Linares y Manuel Gerena, que han cantado en numerosas ocasiones al poeta.
Son 46 cartas inéditas hasta ahora escritas por el autor de Nanas de la cebolla y una treintena dirigidas a él por personalidades como Lorca, Neruda, Vicente Aleixandre, Juan Ramón Giménez, Carmen Conde, María Cegarra, Bergamín o Ramón Sijé, entre otros, las que se añaden a la edición publicada en 1992.
Además, el trabajo realizado por Riquelme, con la colaboración de C. R. Talamás, incluye más de 5.000 correcciones, ampliaciones y modificaciones, y transcribe las cartas completas, con anotaciones y comentarios. Otra aportación del libro es que ha conseguido desvelar el contenido del 80 por ciento de las tachaduras que hay en las cartas, «y eso es una información muy interesante», apunta Jesucristo Riquelme.
El profesor destaca que desvelar el texto de las tachaduras ha sido un trabajo desarrollado «con mucha paciencia» y con el empleo de técnicas como los rayos ultravioletas, la lectura al revés o el escaneo de los textos. «Lo que está oculto es lo que Miguel no quería que se viera; a veces, incluso frases revolucionarias, que él mismo pedía al destinatario que tachase cuando lo leyese». Como exabruptos, piropos a Josefina o proclamas revolucionarias. «Me gusta verte revolucionaria [...] pero no quiero que sea por mi voluntad, sino por la tuya» (18 de febrero de 1937) o «Échale la culpa a los fascistas, que no nos dejan poner la paz sobre España» (21 de enero de 1937).
También ha desvelado «muchos entresijos familiares, referencias especialmente a la hermana mayor de Miguel, con quien no tenía buena relación... aunque yo he sido muy discreto en estas trasncripciones», afirma. «He transcrito las cartas, pero no he añadido las cosas morbosas».
Entre las 46 cartas inéditas hasta ahora que se han incorporado al epistolario se recogen 13 dirigidas al diplomático chileno Germán Bergara que se encuentran en el Archivo Histórico Nacional de Chile -mencionadas por Mario Amorós en la biografía de Neruda pero no publicadas-, además de una docena destinadas a su esposa, Josefina Manresa -parte de ellas mencionadas por Mari Paz Hernández en una publicación-, y dos a María Cegarra. «En este corpus completo no hay ni una carta a Maruja Mallo, no sabemos si ella las quemó o él no se quedó copia, pero no hay nada».
A ellas se añade una treintena dirigidas al poeta o sobre él, firmadas por Pablo Neruda, «defendiéndole ante Germán Bergara»; Carlos Fenoll, Carlos Rodríguez Spiteri o Máximo Huerta, director general de Prisiones.
«Reconozco en la correspondencia que nos ha quedado una muestra íntima de su vida, de su vocación por amar a su familia, de su querencia por amar la literatura, de su lucha para superar adversidades», explica el autor, que el pasado año publicó La obra completa de Hernández y ahora este epistolario se configura como el segundo tomo. «Las cartas de Miguel son auténticas sartas de lamentos. Tal vez podamos interpretarlo así: compartir penas es dividirlas; compartir alegrías, multiplicarlas».