Sinopsis:

Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

domingo, 27 de diciembre de 2009

El filólogo Tomas Navarro Tomás prologó "Viento del pueblo"


Una de las figuras más sobresalientes de la historia de la filología española, discípulo predilecto de Ramón Menéndez Pidal, fue Tomás Navarro Tomás, fundador en España de la Fonética experimental al comienzo de su carrera y sistematizador y maestro indiscutible del estudio de la Métrica, ya al final de sus venturosos y prologados años laboriosos de trabajo incansable. Con sus trabajos e investigaciones tanto la lengua como la literatura en españoles experimentaron avances científicos fundamentales, de los que hoy tantos filólogos se sirven para un mejor conocimiento de nuestra filología y nuestra historia literaria.

Tomás Navarro Tomás nació en La Roda (Albacete) el 12 de abril de 1884...
Durante la Guerra de España, las actividades de Navarro Tomás no sólo no cesaron, sino que se incrementaron notablemente ya que adquirió nuevas e importantes responsabilidades: director acci­dental de la Biblioteca Nacional, vicepresidente de la Junta de Protec­ción del Patrimonio Artístico, secretario general de la Junta para Am­pliación de Estudios. Trasladado a Valencia, fue cofundador Madrid. Cuadernos de la Casa de la Cultura (1937-1938) y fundador de Hora de España. Prologó el libro Viento del pueblo de Miguel Hernández, que editó Socorro Rojo de España en 1937, con un texto emocionante titulado “Miguel Hernández, poeta campesino de las trincheras”, en cuyos párrafos finales descubrimos la sensibilidad poética de Navarro Tomás y sobre todo su oído de fonólogo, atento a la pronunciación del poeta y al timbre y tono de voz del jovencísimo Miguel Hernández, en aquellos momentos tan duros de lucha en los frentes de la Guerra de España; “Sus veinticinco años cargados de experiencia, fe­cundados con las enseñanzas de la vida pobre, áspera y difícil, han madurado su figura varonil y su alma de pastor, poeta y miliciano. Siente con amplitud y pro­fundidad la tragedia de España, el sacrificio del pueblo y la misión de la juventud. Sirve a su pueblo como poe­ta y como soldado. Su espíritu, encendido en un puro ideal de justicia y libertad, se vierte generosamente en sus composiciones poéticas y en su vida militar. El caudal de sus sentimientos lucha con la dificultad de la palabra y del verso, sin encontrar siempre la forma de expresión justa y adecuada. Se percibe la pugna in­terna entre el ímpetu de una vigorosa inspiración y la resistencia de un instrumento expresivo insuficiente­mente dominado. Pero esta misma norma, labrada con visible esfuerzo y tenacidad, contribuye en cambio a reforzar la impresión de honda y cálida sinceridad emocional que sus composiciones reflejan...


Ver el artículo de Francisco Javier Díez de Revenga (Universidad de Murcia)