Sinopsis:

Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

jueves, 30 de diciembre de 2010

Mediación de Rafael Sánchez Maza en el indulto de pena de muerte a Miguel


Por Ramón Fernández Palmeral

Fue tal la fama y popularidad alcanzada por Miguel Hernández durante la guerra civil española que cuando estuvo preso y condenado a muerte fue objeto de consideración por algunos falangista del nuevo Régimen dictatorial de Franco: Rafael Sánchez Maza y José Ibáñez Marín. Miguel era un preso importante. A continuación vamos a destacar la solicitud de clemencia al Caudillo por estos "azules".
Esta fama se la ganó Miguel entre otros hechos destacados por ser miliciano voluntario en la Quinto Regimiento, miembro del P.C., y de la Alianza de Intelectuales Antifascistas, participó como agente de propaganda en el asedio al Santuario de la Virgen de la Cabeza (Andújar), comisario cultural, publicó en numerosísimas revistas como periodista y poeta, publicó el poemario Viento del Pueblo, y varias obras de teatro, director del Altavoz del Frente Sur, participó en “Ponencia colectiva” del II Congreso Internacional de Escritores en Defensa de la Cultura, viajó a Rusia como delegado de la República para el V Festival de Teatro Soviético, obtuvo un accésit en el premio Nacional de Literatura por Pastor de la muerte, dejó en la imprenta El hombre acecha, estuvo en todo los frentes y se relacionó con numerosas comisarios políticos, jefes militares, escritores y poetas de su tiempo. Al final de la guerra intentó huir a Portugal y fue detenido, preso en varias cárceles para acaba sus días, a causa de la tuberculosis, en la enfermería del Reformatorio de Adultos de Alicante.

RAFAEL SÁNCHEZ MAZA
Entre los más destacados falangistas que solicitaron clemencia de indulto de la pena de muerte recaída a Miguel, situamos a Rafael Sánchez Maza(1894-1966), quien estuvo a punto de ser fusilado en 1939, salvado gracias a un misterioso miliciano que le dejó escapar. En marzo de 1936 Sánchez Mazas fue detenido en Madrid. Aprovechando un permiso temporal por el nacimiento de su cuarto hijo, consiguió refugiarse en la embajada de Chile. En el otoño de 1937 intentó la fuga pero el 29 de noviembre fue detenido en Barcelona. Estuvo en el barco Uruguay hasta el 24 de enero de 1939, cuando fue conducido al santuario de Santa Maria del Collell junto a otros prisioneros para ser ejecutado. El 30 de enero escapó de un fusilamiento en masa, refugiándose en una masía de Cornellà de Terri (Gerona), junto a tres soldados republicanos que habían huido de la retirada, pasando con ellos a zona sublevada (este episodio es la base sobre la que se asienta la narración de la novela "Soldados de Salamina", de Javier Cercas).
Luego Sánchez Mazas fue miembro fundador de Falange y uno de sus ideólogos principales. Entre agosto de 1939 y agosto de 1940 fue ministro sin cartera en el gobierno de la dictadura de Franco, abandonándolo por propia iniciativa, sin llegar nunca a ser oficialmente sustituido o cesado, ya que al retrasarse frecuentemente en su asistencia a los consejos de ministros, Franco mandó que retiraran su sillón.
En la novela “soldado de Salamina”, Javier Cercas relata el incidente con el miliciano que Sánchez Mazas parece que escapó milagrosamente. En ella, el protagonista, que no es otro que el mismo autor, se embarca en una investigación sobre aquellos hechos en la que realidad y ficción se van a entrelazar de una manera admirable. Partiendo de una misteriosa carta recibida, Cercas relata las distintas entrevistas con personajes algunos reales y otros no tanto como “los amigos del bosque” que salvaron a un Sánchez Mazas medio ciego y hambriento de una muerte cierta, o el mismo Rafael Sánchez Ferlosio, hijo de Sánchez Mazas.


MEDIACIÓN

Por mediación del escritor José María de Cossió, que había sido jefe de Miguel Hernández la Editorial Espasa-Calpe, buscó a amigos “azules” influyentes del gobierno de Franco. Entre ellos a Dionisio Ridruejo, director general de Propaganda, que se reunía en la tertulia de la Academia Musa Musae, donde acudían Rafael Sánchez Maza (vicesecretario de la Falange), José María Alfaro y Adriano de Valle, Dionisio escribió a José Ibáñez Martín, Ministro de Educación Nacional, para que solicitara al Caudillo el indulto de la pena de muerte, para que no se repitiera el caso de Lorca, que tantos quebraderos de cabeza le dio en el orden internacional.
Dionisio Ridruejo escribió en el mismo término a Rafael Sánchez Maza, éste a su vez se lo pidió al Ministro del Ejército José Enrique Varela, quien habló con el Caudillo.
Las gestiones de Cossío a través de Dionisio, dieron su resultado, y el 24 de junio 40, el general Valera le comunica a Sánchez Maza, el indulto de la pena de muerte por la inmediata inferior de 30 años de reclusión mayor y “obligará al agraciado a seguir una conducta que sea rectificación del pasado”. A Miguel no se le comunicará el indulto hasta el 28 de agosto de 1940. De no haber sido por ellos hoy estariamos hablando de un fusilado, en cambio, Miguel murió o le dejaron morir en una cárcel franquista.

Miguel debía saber algo de la amistad de Cossío con Sanchez Maza, ya que en la declaración indagatoria que prestó Miguel el 06 de julio de 1939, nombró a varias personas como posibles avalistas: a José María Cossio, a Juan Benllod Salmerón, a Lusi Almarcha, a Ernesto Giménes Caballero y a Rafael Sánchez Maza, en último lugar.

En el reciente descubrimiento del procedimiento sumarísismo 4.487, hya una declaración indagatoria de 1 de octubre de 1939, en la que Miguel manifestó "15 de septiembre que salió de la cárcel cree que por intercesión de José María Cossío Pérez, Sanchez Masas (sic) por Mazas y Eugenio Montes, según le dijo el primero, que estaba haciendo presión para que le pusieran en libertad".

Es decir, que José María Cossío consiguió su objetivo de ponerle en libertad y conseguir la anulación de la pena de muerte.