Sinopsis:

Página multimedia virtual sobre la vida, obra y acontecimientos del universal poeta Miguel Hernández -que murió por servir una idea- con motivo del I Centenario de su nacimiento (1910-2010). Administrada por Ramón Fernández Palmeral. ALICANTE (España). Esta página no es responsable de los comentarios de sus colaboradores. Contacto: ramon.palmeral@gmail.com

miércoles, 12 de agosto de 2009

Casa de Cultura en Rosal de la Frontera (Huelva)

Primera detención en Rosal de la Frontera (Huelva). Por Ramón Fernández Palmeral

Al finalizar la guerra incivil, se refugió en Madrid en casa del escultor Víctor González Gil en calle Garcilaso nº 19, va a la Embajada de Chile, el encargado de negocios Carlos Morla Lynch le ofreció asilo, pero Miguel no aceptó y regresa a Cox a ver a su mujer y a su segundo hijo Manuel Miguel que por entonces tenía nueve meses, y contacta en Madrid con el poeta Eduardo Llosent Marañón, sevillano, que había sido compañero en la Misiones Pedagógicas por La Mancha y Salamanca, ahora era director de la revista Mediodía de Sevilla, se le ha acusado de falangista, (se casó con Mercedes Formica, abogada y escritora gaditana nacida en 1916). Y recién nombrado director de Arte Moderno en Madrid. En esta visita que se celebró en el Hotel…., donde tenía su residencia provisional le proporciona a Miguel dinero y una carta de recomendación para el poeta Joaquín Romero Morube y conservador del Alcázar de Sevilla.



Sale de Cox para Madrid el 22 de abril de 1939, con un salvoconducto para Sevilla, Jerez y Cádiz, expedido por la Comandancia Militar de Orihuela que le facilitó Ismael Terrés (su cuñado, marido de su hermana Encarnación) en Alcoy (CRIM). Su hermano Vicente le ha proporcionado 200 pesetas. En Alcázar de San Juan escribe una carta a Josefina el día 23 de abril, con nombre falso.

Llega en tren a Sevilla, a la entonces llamada estación de Córdoba, va a los Reales Alcázares de Sevilla, a busca a Eduardo Llosent en calle San Vicente, 22, domicilio de Eduardo (lo había conocido en las Misiones Pedagógicas), palacete del siglo XVIII, ocupado por la Delegación de Prensa y Propagandaquien, este le recomendó personalmente a Joaquín Romero Morube, alcaide de Alcázar, la verdad es que ninguno de los dos le dieron el refugio requerido. para entrevistarse con Joaquín Romero Murube, director de los Reales Alcázares, al que le entrega la carta de recomendación, lo recibe en los jardines, Murube cuenta que en aquellos días estaba Franco en Sevilla, y era peligroso ocultar a Miguel en Sevilla porque había mucha vigilancia. Parece ser que son excusas, ya que no está documentado que Franco estuviera en Sevilla por esas fechas.



Como no encuentra refugio ni trabajo se Sevilla, se marcha a Cádiz y Huelva, seguramente en tren, estuvo buscando a Pedro Pérez Clotet (natural de Villaluenga del Rosario y director de la revista Isla, se conocieron en el 33 con motivo de la publicación de Perito en lunas) pero Clotet estaba en Ronda, y como no encuentra a Pedro, seguramente, como sabía donde encontrarlo se citan en Huelva, hay una carta de Miguel a Josefina del 29 de abril en la que dice que está en la ciudad onubense y que se marcha a Portugal en un camión. Quería que Pedro le diera trabajo en sus fincas de ganadería en Villauenga del Rosario (Cádiz). Buscó luego al abogado Diego Romero Pérez en Valverde del Camino (Huelva) según su libro M.H. en mi recuerdo (Camas, 1992), era el contacto pensado por Miguel para pasar a Portugal. Un camión le lleva de Huelva a Aroche, allí cruza el río Rivera de Chanza, llega a Santo Aleixo, vende un traje y el reloj que le regaló Vicente Aleixandre para su boda, le dan unos escudos, este mismo comprador lo debió denunciar a la policía. Se interna hacia Moura y cerca de Moura lo detiene la policía salazarista.

El día 4 de mayo a las 12 horas comparecen con el detenido el Puesto fronterizo, por no llevar pasaporte, Cuerpo de Investigación y Vigilancia de Fronteras [1], hasta las 22 horas, Miguel fue "estrechado a preguntas" durnate diez horas por los agentes: Antonio Márquez y Rafael Córdoba. Cuerpo que dependía de la Dirección General de Seguridad, Franco mantuvo durante unos años este Cuerpo de Vigilancia republicano hasta que en 1942 creó el Cuerpo Superior de Policía [2]. Nada se dice en el atestado que a ellos se los entregara la Guardia Civil. Por ello, Miguel no fue entregado a la Guardia Civil [3] como se suele escribir, no existe ningún docuemtno que lo acredite. Solo son congetura y suposiciones. Es posible, pero no hay un parte que de la Guardia Civil que reciba al detendio de la Policía Internacional Portuguesa y lo lleve al depósito o a disposición del Cuerpo de Investigación y Vigilancia.

Llevaba Miguel en su poder 20 escudos y unos centavos, dos salvoconductos el libro de poesía de Aleixandre La destrucción o el amor y una carta del propio Vicente, más un ejemplar de el Auto Sacramental “Quien te ha visto y quien te ve, y sombra de lo que eras”. El día 6 de mayo escribe a Josefina notificándole su detención, quitando hierro al asunto ya que fue maltratado por sus guardianes. El 9 de mayo está en la prisión Provincial de Huelva y le conducen a Madrid, según el documento del Gobernador Civil de Huelva.

En Rosal de la Frontera estuvo cinco días, le pegan y le torturan hasta orinar sangre. Según Enrique Cerdán Tato, hubo un testigo Francisco Guapo que comparte celda con Miguel, preso por contrabando, y gracias a la mujer de éste, Miguel recibió comida y le lavó la ropa, Mihuel le dedicó un poema "Hombre encarcelado" que la mujer tenía enmarcado, llegó un día un maestro natural de Orihuela y con la excusa de que se lo llevaría a Josefina, se lo llevó y nada sabemos de este poema. Escribe Miguel a Eduardo Llosent a Sevilla. De allí detenido a la Prisión de Huelva, de Huelva a la prisión de Sevilla como transeúnte, unos días, y de Sevilla a la cárcel de Torrijos, a la que llegó el 18 de mayo de 1939.

Elvio Romero, escribe en el prólogo de la Edición de Lautaro, MH Destino y Poesía, Buenos Aires de 1958: «Ocho días duraron las vejaciones y las interrogaciones infamantes en Rosal de la Frontera. Fuerte siempre, sin que haya sufrido suplantación su firmeza ni su pujanza, comienza a cobrar conciencia de lo que le esperaba; abarca con una sola mirada lo que la prisión tiene de sobrante tiniebla y de malos momentos».

Por una serie de descoordinación gubernamental y judicial lo ponen en libertad de 15 de septiembre 1939, no se ha demostrado documentalmente lo que María Teresa León y Pablo Neruda contaron sobre la mediación del cardenal Baudrellat con Franco. Puesto que se haber sido cierto, la segunda detención, una semana después no se hubiera llevado a efecto.

Y «estrechado a preguntas...», según las primeras diligencias, pág. 23 - 29, del libro de Juan Guerrero Zamora, Proceso a Miguel Hernández. El Sumario 2001. Dossat, 1990. lo que supone que el detenido fue torturado física y psicológicamente porque le interrogaron durante cinco días en Rosal de la Frontera, ingresó en la prisión de Torrijos. Conoce entre otros al madrileño Luis Rodríguez Isern. En aquellos años, acabada la guerra, la Fuerzas del Orden actuaban como verdaderos Fiscales, y con suma dureza interrogaban a los detenidos, amparados por la leyes franquistas, y estaba bien visto ante los jueces que el detenido fuera interrogado a conciencia como pasado por la muela de la inquisición, y lo que había declarado, sin presencia de abogados, porque recordemos que la presencia del abogado en la primeras diligencias, aparece ya en España a partir de la Constitución de 1978. Sin abogados presente, las declaración de los detenidos era “durísimas” y los jueces las iban a tomar como verdaderos testimonios sin lugar de dudas.